Por qué las calles de un barrio de Zaragoza tienen nombres de películas
Además de algunos títulos de Buñuel, largometrajes clásicos, actuales o infantiles forman parte de un callejero que homenajea al Séptimo ArteLos escenarios españoles donde llegaron a rodarse capítulos de 'MacGyver', 'El equipo A' y otras series de los 80 Hay algunas películas que no solo están en nuestra memoria, sino también en algunos callejeros. Una calle de Rishon LeTsyyon (Israel) lleva por nombre Doctor Zhivago. En Dallas es Star Wars la homenajeada. Pero hay un barrio de Zaragoza que supera estos reconocimientos. Y es que en el suroeste de la ciudad maña no es que haya una calle dedicada a una gran película. O al maestro Buñuel, aragonés. Hay todo un barrio cuyas calles llevan por nombre grandes largometrajes. De ahí que sea considerado el barrio más cinéfilo de España… o del mundo. Se trata del barrio de Valdespartera, que sorprende a quien lo recorre a pie con calles, avenidas y plazas fácilmente reconocibles. ¿El origen? Un homenaje a la propia Zaragoza y a su devoción por el cine, una ciudad en la que se filmó la primera cinta española de la historia, Salida de misa de doce del Pilar de Zaragoza, rodada en 1897. Muchos clásicos Calle de La ventana indiscreta, la Calle de Centauros del desierto o Calle de El mago de Oz son guiños a algunos de los títulos más clásicos del Séptimo Arte. Pero también Ben Hur, Espartaco, Al este del edén, Cantando bajo la lluvia, Casablanca, El Gordo y el Flaco, Ciudadano Kane, Cleopatra, Con faldas y a lo loco, La quimera del oro, El gabinete del Doctor Caligari, La diligencia, El cantor de jazz, Desayuno con diamantes, Los pájaros, Un americano en París, Río Bravo, Una noche en la ópera o Gilda. En las 86 calles bautizadas con nombres de filmes, el ayuntamiento zaragozano también quiso reconocer la valía de obras más actuales, como El resplandor, El paciente inglés, La lista de Schindler, Los puentes de Madison, Manhattan o la más oscarizada de la historia, Titanic. Los ciudadanos de este barrio también viven en calles como la japonesa Cuentos de Tokyo, la italiana Cinema Paradiso, la alemana El Ángel Azul o la soviética El Acorazado Potemkin. El cine de animación o infantil tampoco falta, en este caso con películas como El Libro de la Selva, Tetris, Super Mario o Mary Poppins. Lógicamente también hay huecos para algunas de las joyas que filmó Buñuel. En este caso sus calles son Viridiana, Un perro andaluz o Los olvidados, obra esta última que recibió en su momento el título de Memoria del Mundo por la UNESCO. Buñuel aparte, el cine español también tiene su hueco con Belle Époque, Atraco a las tres, Volver a Empezar, Todo sobre mi madre, Morena Clara, La prima Angélica, Furtivos o La Violetera.

Además de algunos títulos de Buñuel, largometrajes clásicos, actuales o infantiles forman parte de un callejero que homenajea al Séptimo Arte
Los escenarios españoles donde llegaron a rodarse capítulos de 'MacGyver', 'El equipo A' y otras series de los 80
Hay algunas películas que no solo están en nuestra memoria, sino también en algunos callejeros. Una calle de Rishon LeTsyyon (Israel) lleva por nombre Doctor Zhivago. En Dallas es Star Wars la homenajeada. Pero hay un barrio de Zaragoza que supera estos reconocimientos.
Y es que en el suroeste de la ciudad maña no es que haya una calle dedicada a una gran película. O al maestro Buñuel, aragonés. Hay todo un barrio cuyas calles llevan por nombre grandes largometrajes. De ahí que sea considerado el barrio más cinéfilo de España… o del mundo.
Se trata del barrio de Valdespartera, que sorprende a quien lo recorre a pie con calles, avenidas y plazas fácilmente reconocibles. ¿El origen? Un homenaje a la propia Zaragoza y a su devoción por el cine, una ciudad en la que se filmó la primera cinta española de la historia, Salida de misa de doce del Pilar de Zaragoza, rodada en 1897.
Muchos clásicos
Calle de La ventana indiscreta, la Calle de Centauros del desierto o Calle de El mago de Oz son guiños a algunos de los títulos más clásicos del Séptimo Arte. Pero también Ben Hur, Espartaco, Al este del edén, Cantando bajo la lluvia, Casablanca, El Gordo y el Flaco, Ciudadano Kane, Cleopatra, Con faldas y a lo loco, La quimera del oro, El gabinete del Doctor Caligari, La diligencia, El cantor de jazz, Desayuno con diamantes, Los pájaros, Un americano en París, Río Bravo, Una noche en la ópera o Gilda.
En las 86 calles bautizadas con nombres de filmes, el ayuntamiento zaragozano también quiso reconocer la valía de obras más actuales, como El resplandor, El paciente inglés, La lista de Schindler, Los puentes de Madison, Manhattan o la más oscarizada de la historia, Titanic.
Los ciudadanos de este barrio también viven en calles como la japonesa Cuentos de Tokyo, la italiana Cinema Paradiso, la alemana El Ángel Azul o la soviética El Acorazado Potemkin. El cine de animación o infantil tampoco falta, en este caso con películas como El Libro de la Selva, Tetris, Super Mario o Mary Poppins.
Lógicamente también hay huecos para algunas de las joyas que filmó Buñuel. En este caso sus calles son Viridiana, Un perro andaluz o Los olvidados, obra esta última que recibió en su momento el título de Memoria del Mundo por la UNESCO.
Buñuel aparte, el cine español también tiene su hueco con Belle Époque, Atraco a las tres, Volver a Empezar, Todo sobre mi madre, Morena Clara, La prima Angélica, Furtivos o La Violetera.