La experta en limpieza Maribel Mendoza explica cómo se deben usar las bayetas
Uno de los imprescindibles en el mundo de la limpieza del hogar son las bayetas de microfibra. Y es normal que estén presentes en todas las casas: son versátiles, muy eficaces y cuidan las superficies. Además, gracias a su estructura especial de fibras ultrafinas, no es necesario echarles mucha cantidad de producto para atrapar bien el polvo, la grasa y hasta las bacterias.Las usamos para limpiar cristales, encimeras, baños, muebles, etc., pero ¿realmente sabemos usarlas bien? Pues no, no sabemos usar las bayetas de microfibra. Y no lo decimos nosotras, sino que estas palabras están avaladas por la experta en limpieza Maribel Mendoza quien afirma que, aunque el uso de las bayetas parezca sencillo, muchas personas cometen el mismo error: no saben distinguir entre las dos caras con las que cuenta una bayeta de microfibra. Únete a nuestro canal de Whatsapp y descubre nuevas ideas muy El Mueble para tu casa. Las dos caras de las bayetas de microfibraComo bien ha explicado Maribel en su cuenta de TikTok, cada cara de una bayeta de microfibra tiene un uso diferente: una cara está diseñada para limpiar, y la otra para secar. Y aunque las usemos indistintamente, la experta nos alerta que usarlas al revés puede dejar marcas y residuos en las superficies por donde las pasemos:La cara de fibra corta sirve para limpiarLa cara de la bayeta de microfibra que sirve para limpiar es la que tiene la fibra más corta y compacta, es decir, es la que al tacto se siente más firme y más rasposa. Esta estructura más densa es ideal para atrapar la suciedad, extender el producto de limpieza de forma uniforme y eliminar los restos sin rayar las superficies.Viene muy bien para usarla justo después de aplicar el producto de limpieza a la superficie. Por ejemplo, cuando vayas a limpiar una encimera, primero pulveriza el limpiador y, con esta cara, extiéndelo bien por toda la superficie. La clave está en que esta parte de la bayeta se encarga de la limpieza como tal, arrastrando la suciedad y atrapándola sin necesidad de frotar con fuerza.La cara de fibra larga sirve para secar y dar brilloLa otra cara, más suave y con fibras más largas, es la que se encarga de añadir un acabado perfecto. Sirve para secar, abrillantar y eliminar cualquier resto de humedad o de producto limpiador. Este lado de la bayeta no está pensado para arrastrar suciedad, sino para dejar las superficies impecables, sin marcas ni rayas. Sus usos son secar y dar brillo.Es tan fácil de usar como que después de limpiar con la cara de fibra corta, girar la bayeta y pasar esta cara más esponjosa y suave. Es ideal para dar el toque final en cristales, grifos, acero inoxidable o muebles lacados. Incluso sirve para secar superficies delicadas sin rayar. Si lo haces al revés (secar con la cara corta o limpiar con la larga), lo más probable es que la superficie quede con marcas o residuos.En definitiva, las bayetas de microfibra son las mejores herramientas de limpieza de la casa, pero si no sabemos usar cada una de sus caras de la manera adecuada, jamás disfrutaremos de unos resultados impecables. Así que, a partir de ahora, no te olvides de primero limpiar con la cara de fibra corta y luego secar con la de fibra larga.Si quieres estar al día de todo lo que publicamos en www.elmueble.com, suscríbete a nuestra newsletter.Descubre cómo hacer que la energía fluya en tu casa con nuestro ebook gratuito de Feng Shui. Consejos de expertas, claves por estancias y un test final...¡No te lo pierdas!

Uno de los imprescindibles en el mundo de la limpieza del hogar son las bayetas de microfibra. Y es normal que estén presentes en todas las casas: son versátiles, muy eficaces y cuidan las superficies. Además, gracias a su estructura especial de fibras ultrafinas, no es necesario echarles mucha cantidad de producto para atrapar bien el polvo, la grasa y hasta las bacterias.
Las usamos para limpiar cristales, encimeras, baños, muebles, etc., pero ¿realmente sabemos usarlas bien? Pues no, no sabemos usar las bayetas de microfibra. Y no lo decimos nosotras, sino que estas palabras están avaladas por la experta en limpieza Maribel Mendoza quien afirma que, aunque el uso de las bayetas parezca sencillo, muchas personas cometen el mismo error: no saben distinguir entre las dos caras con las que cuenta una bayeta de microfibra.
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Las dos caras de las bayetas de microfibra
Como bien ha explicado Maribel en su cuenta de TikTok, cada cara de una bayeta de microfibra tiene un uso diferente: una cara está diseñada para limpiar, y la otra para secar. Y aunque las usemos indistintamente, la experta nos alerta que usarlas al revés puede dejar marcas y residuos en las superficies por donde las pasemos:
La cara de fibra corta sirve para limpiar
La cara de la bayeta de microfibra que sirve para limpiar es la que tiene la fibra más corta y compacta, es decir, es la que al tacto se siente más firme y más rasposa. Esta estructura más densa es ideal para atrapar la suciedad, extender el producto de limpieza de forma uniforme y eliminar los restos sin rayar las superficies.
Viene muy bien para usarla justo después de aplicar el producto de limpieza a la superficie. Por ejemplo, cuando vayas a limpiar una encimera, primero pulveriza el limpiador y, con esta cara, extiéndelo bien por toda la superficie. La clave está en que esta parte de la bayeta se encarga de la limpieza como tal, arrastrando la suciedad y atrapándola sin necesidad de frotar con fuerza.
La cara de fibra larga sirve para secar y dar brillo
La otra cara, más suave y con fibras más largas, es la que se encarga de añadir un acabado perfecto. Sirve para secar, abrillantar y eliminar cualquier resto de humedad o de producto limpiador. Este lado de la bayeta no está pensado para arrastrar suciedad, sino para dejar las superficies impecables, sin marcas ni rayas. Sus usos son secar y dar brillo.
Es tan fácil de usar como que después de limpiar con la cara de fibra corta, girar la bayeta y pasar esta cara más esponjosa y suave. Es ideal para dar el toque final en cristales, grifos, acero inoxidable o muebles lacados. Incluso sirve para secar superficies delicadas sin rayar. Si lo haces al revés (secar con la cara corta o limpiar con la larga), lo más probable es que la superficie quede con marcas o residuos.
En definitiva, las bayetas de microfibra son las mejores herramientas de limpieza de la casa, pero si no sabemos usar cada una de sus caras de la manera adecuada, jamás disfrutaremos de unos resultados impecables. Así que, a partir de ahora, no te olvides de primero limpiar con la cara de fibra corta y luego secar con la de fibra larga.
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