Uno de los imputados de la red de pederastia de Barcelona admitió estar "un poco incómodo" por la edad de la víctima

Los jueces mantuvieron en prisión provisional a la mayoría de los pedófilos ante el riesgo de que "interfieran" en la investigación o incluso que "atentaran" contra la principal víctima, extutelada por la Generalitat La Fiscalía pide 107 años de cárcel a un hombre por ofrecer sexo con una niña de 13 años tutelada y grabar las violaciones “Una actuación pedófila continuada en el tiempo”. Es la descripción de la Audiencia de Barcelona de la red de pederastas que los Mossos d'Esquadra desarticularon en 2024 y para cuyo líder la Fiscalía pide 107 años de cárcel. La media docena de resoluciones judiciales que ha consultado elDiario.es confirman la hipótesis inicial de los investigadores y permiten constatar la magnitud de la trama. Las pesquisas permanecen divididas en tres causas judiciales distintas para no eternizar la investigación. El primero de los juicios se celebrará la primavera del año que viene y sentará en el banquillo al jefe de la trama por haber prostituido y agredido sexualmente a una menor que fue tutelada por la Generalitat. Otra causa afecta a la misma víctima y a otros cinco hombres que la violaron. La tercera investigación va más allá y es la que engloba al conjunto de la red de pederastia liderada por el mismo hombre y que afecta a una veintena de víctimas. En sus resoluciones de mediados y finales del año pasado y principios de 2025 por las que confirman las prisiones provisionales o las medidas cautelares que ordenó el juez Francisco Miralles para varios integrantes de la red de pederastia, los magistrados de la Audiencia de Barcelona recogen la existencia de “numerosos y consistentes indicios” que, agregan, les dejan “pocas dudas” sobre la participación de los hombres en las agresiones sexuales a las menores, que eran grabadas en vídeo (en algunos casos, con cámaras ocultas). El líder de la trama promovía la prostitución de las menores a través de las redes sociales como Badoo o incluso Instagram. En esta última página, uno de los investigados confesó al jefe de la trama haberse sentido “un poco incómodo” por la “corta edad de la víctima”, tal y como destacan los magistrados de la Audiencia de Barcelona en otro auto. La investigación de los Mossos se inició a finales del 2021 a partir de la denuncia de una víctima de 12 años que había sido agredida sexualmente, con otros menores, por un mismo hombre entre mayo del 2020 y octubre del 2021. Los pederastas tienen estatus sociales y familiares diversos y tienen entre 19 y 50 años. Uno de ellos pidió dejar sin efecto la prisión provisional porque tenía un hijo recién nacido y una pareja de 21 años y porque, según su versión, en los vídeos de las violaciones la víctima era quien “le daba instrucciones”. Los jueces le recordaron que participó en grabaciones que constituían un delito de pornografía infantil y que “sí podía conocer que estaba ante una adolescente y no ante una adulta”. Las primeras pesquisas policiales en las redes sociales y aplicaciones de contactos de adultos, donde habían sido captadas los menores, permitieron dar con el domicilio del máximo responsable de la trama, que permanece en prisión preventiva. En su piso se localizó abundante material informático que mostró que el principal investigado organizaba encuentros sexuales con otros depredadores sexuales y los menores en su domicilio. Algunas agresiones sexuales se grabaron con teléfonos móviles y cámaras ocultas. Al principal investigado se le requisaron 1.300 vídeos de explotación sexual infantil, de los que unos 250 habrían sido grabados por él entre el 2016 y el 2022. De las más de 2.000 conversaciones analizadas, 120 fueron seleccionadas por su contenido pedófilo. Los pedófilos han desplegado, desde que fueron encarcelados a mediados del año pasado, uno de los alegatos habituales de los acusados por delitos sexuales contra menores: que no sabían que las adolescentes tenían menos de 18 años. La excusa ha sido completamente desacreditada por los jueces. “Los indicios son suficientes y se basan en las imágenes grabadas por los propios investigados manteniendo relaciones sexuales con niñas de 13 años”, reza uno de los autos que mantiene a uno de los pedófilos en prisión preventiva. Uno de los acusados incluso achacó a la primera de las víctimas “una madurez que no se correspondía con la propia de una menor de edad” debido a su “capacidad de expresión, riqueza del lenguaje y fluidez en el discurso”, extremos replicados con contundencia por los jueces tras analizar las grabaciones de las violaciones: “No puede haber la impresión de considerarla una mujer joven y ya sexualmente madura”. Este acusado, remarcan los magistrados, “forzosamente tuvo que representarse la edad real de la menor y, pese a ello, decidió aceptar la situación y realizar los actos sexuales”. En su caso, además, la violación de la menor se grabó y se perpet

May 14, 2025 - 08:28
 0
Uno de los imputados de la red de pederastia de Barcelona admitió estar "un poco incómodo" por la edad de la víctima

Uno de los imputados de la red de pederastia de Barcelona admitió estar "un poco incómodo" por la edad de la víctima

Los jueces mantuvieron en prisión provisional a la mayoría de los pedófilos ante el riesgo de que "interfieran" en la investigación o incluso que "atentaran" contra la principal víctima, extutelada por la Generalitat

La Fiscalía pide 107 años de cárcel a un hombre por ofrecer sexo con una niña de 13 años tutelada y grabar las violaciones

“Una actuación pedófila continuada en el tiempo”. Es la descripción de la Audiencia de Barcelona de la red de pederastas que los Mossos d'Esquadra desarticularon en 2024 y para cuyo líder la Fiscalía pide 107 años de cárcel. La media docena de resoluciones judiciales que ha consultado elDiario.es confirman la hipótesis inicial de los investigadores y permiten constatar la magnitud de la trama.

Las pesquisas permanecen divididas en tres causas judiciales distintas para no eternizar la investigación. El primero de los juicios se celebrará la primavera del año que viene y sentará en el banquillo al jefe de la trama por haber prostituido y agredido sexualmente a una menor que fue tutelada por la Generalitat. Otra causa afecta a la misma víctima y a otros cinco hombres que la violaron. La tercera investigación va más allá y es la que engloba al conjunto de la red de pederastia liderada por el mismo hombre y que afecta a una veintena de víctimas.

En sus resoluciones de mediados y finales del año pasado y principios de 2025 por las que confirman las prisiones provisionales o las medidas cautelares que ordenó el juez Francisco Miralles para varios integrantes de la red de pederastia, los magistrados de la Audiencia de Barcelona recogen la existencia de “numerosos y consistentes indicios” que, agregan, les dejan “pocas dudas” sobre la participación de los hombres en las agresiones sexuales a las menores, que eran grabadas en vídeo (en algunos casos, con cámaras ocultas).

El líder de la trama promovía la prostitución de las menores a través de las redes sociales como Badoo o incluso Instagram. En esta última página, uno de los investigados confesó al jefe de la trama haberse sentido “un poco incómodo” por la “corta edad de la víctima”, tal y como destacan los magistrados de la Audiencia de Barcelona en otro auto.

La investigación de los Mossos se inició a finales del 2021 a partir de la denuncia de una víctima de 12 años que había sido agredida sexualmente, con otros menores, por un mismo hombre entre mayo del 2020 y octubre del 2021.

Los pederastas tienen estatus sociales y familiares diversos y tienen entre 19 y 50 años. Uno de ellos pidió dejar sin efecto la prisión provisional porque tenía un hijo recién nacido y una pareja de 21 años y porque, según su versión, en los vídeos de las violaciones la víctima era quien “le daba instrucciones”. Los jueces le recordaron que participó en grabaciones que constituían un delito de pornografía infantil y que “sí podía conocer que estaba ante una adolescente y no ante una adulta”.

Las primeras pesquisas policiales en las redes sociales y aplicaciones de contactos de adultos, donde habían sido captadas los menores, permitieron dar con el domicilio del máximo responsable de la trama, que permanece en prisión preventiva. En su piso se localizó abundante material informático que mostró que el principal investigado organizaba encuentros sexuales con otros depredadores sexuales y los menores en su domicilio.

Algunas agresiones sexuales se grabaron con teléfonos móviles y cámaras ocultas. Al principal investigado se le requisaron 1.300 vídeos de explotación sexual infantil, de los que unos 250 habrían sido grabados por él entre el 2016 y el 2022. De las más de 2.000 conversaciones analizadas, 120 fueron seleccionadas por su contenido pedófilo.

Los pedófilos han desplegado, desde que fueron encarcelados a mediados del año pasado, uno de los alegatos habituales de los acusados por delitos sexuales contra menores: que no sabían que las adolescentes tenían menos de 18 años. La excusa ha sido completamente desacreditada por los jueces.

“Los indicios son suficientes y se basan en las imágenes grabadas por los propios investigados manteniendo relaciones sexuales con niñas de 13 años”, reza uno de los autos que mantiene a uno de los pedófilos en prisión preventiva.

Uno de los acusados incluso achacó a la primera de las víctimas “una madurez que no se correspondía con la propia de una menor de edad” debido a su “capacidad de expresión, riqueza del lenguaje y fluidez en el discurso”, extremos replicados con contundencia por los jueces tras analizar las grabaciones de las violaciones: “No puede haber la impresión de considerarla una mujer joven y ya sexualmente madura”.

Este acusado, remarcan los magistrados, “forzosamente tuvo que representarse la edad real de la menor y, pese a ello, decidió aceptar la situación y realizar los actos sexuales”. En su caso, además, la violación de la menor se grabó y se perpetró en presencia del líder de la red, que fue quien se hizo pasar por ella en la red social Badoo. “Otros de los investigados sí evidenciaron que era palpable la edad de la víctima”, agregan los jueces en otra resolución.

Los jueces han decidido mantener a al menos cinco de los investigados en prisión provisional ante la posible reiteración delictiva y la gravedad de las penas a las que se enfrentan por varios delitos de agresión sexual a menores de 16 años y elaboración y tenencia pornografía infantil.

Además, los jueces alertan del riesgo de que los imputados “interfieran” en la investigación o incluso “atentaran” contra la principal víctima, que es “altamente vulnerable”, o contra “otras [víctimas] de las que todavía no se tienen conocimiento y puedan aparecer a lo largo de la investigación”.

Este sitio utiliza cookies. Al continuar navegando por el sitio, usted acepta nuestro uso de cookies.