Ayuso reivindica en el Dos de Mayo un Madrid que "nadie apaga ni encierra" y lamenta la ausencia del Ejército

La presidenta madrileña reconoce en el Dos de Mayo la respuesta al apagón masivo en un mensaje con muchos guiños a las Fuerzas Armadas.

May 2, 2025 - 14:35
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Ayuso reivindica en el Dos de Mayo un Madrid que "nadie apaga ni encierra" y lamenta la ausencia del Ejército

El 2 de mayo de 2025 se recordará durante largo tiempo en la Comunidad de Madrid. Por ser el primero que el acto institucional para celebrar el día autonómico salió fuera de la Real Casa de Correos, pero también porque el tiempo no pudo acompañar menos. La lluvia ha deslucido un acto con una producción a lo grande para hacer más vistoso que nunca el homenaje a los reconocidos con las Grandes Cruces, entre los que se encuentran los profesionales y voluntarios madrileños que el pasado octubre se desplazaron a la Comunidad Valenciana para ayudar tras la DANA, la cantante Massiel, el actor José Coronado, el luchador Ilia Topuria -ausente-, el piloto Jorge Martín o el cantaor José Mercé.

Agua, truenos y relámpagos, y una temperatura muy fresca para una mañana de mayo, se han apuntado apuntado a una fiesta -"con lluvia, con sol, falta nieve... pero, en fin", se ha resignado la presidenta- que ha comenzado con un sentido homenaje a todos los empleados públicos madrileños que estuvieron ayudando tras la DANA. Bomberos, forestales, policías locales, trabajadores de Metro de Madrid o del Canal de Isabel II han entrado desfilando en la Puerta del Sol bajo los aplausos de los congregados en la Puerta del Sol.

"Estuvimos apoyando donde se nos necesitaba, lo que nos llenó de orgullo y ánimo, ha afirmado Alfonso Segura, oficial de Bomberos de la Comunidad, que ha tomado la palabra en nombre de los condecorados, "ver plasmado el altruismo y la solidaridad humana entre tanta desgracia era alimento suficiente para continuar cada día".

"No cabe más orgullo", ha aseverado Isabel Díaz Ayuso durante su discurso que ha pronunciado para cerrar el acto, una intervención en la que el agradecimiento a los trabajadores públicos de la Comunidad ha sido doble, porque la presidenta ha dedicado buena parte de su mensaje a reconocer la respuesta al apagón masivo del pasado lunes. La jefa del Ejecutivo regional, que ha elegido un look que ha recordado a los colores de la bandera de España, ha alabado el coraje de los madrileños que lucharon contra el invasor francés en 1808, que aún ve hoy. "El pueblo de Madrid sigue aquí, grande y vibrante, como siempre", ha aseverado Díaz Ayuso, "lo demostró en la pandemia, en Filomena, y hace unos días durante el bochornoso apagón que dejó España a oscuras".

"El trabajo de los ciudadanos y de nuestros servidores públicos ha sido espectacular", ha recalcado la presidenta, quien ha mencionado a maquinistas de metro que estuvieron 10 horas a oscuras dentro de sus trenes esperando a ser relevados y a Josué, un gerocultor que caminó durante horas para coger un autobús que le llevara a su puesto de trabajo en una residencia pública para personas con alzheimer situada en Getafe.

La presidenta regional no ha olvidado a la sanidad. "Volvió a dar ejemplo", ha destacado, porque se logró funcionar de una manera "coordinada y eficaz" en toda la red entre hospitales, centros de salud o centros de transfusión y hasta 96 bebés nacieron en Madrid mientras España estaba a oscuras.

"La fabulosa solidaridad, o la alegría de vivir que asombra y contagia a los que nos visitan, no deberían hacernos olvidar la gravedad de lo ocurrido", ha apostado Díaz Ayuso. "No podemos acostumbrarnos al desastre, ni al sectarismo, ni a la mentira", ha enfatizado, en unas palabras que se han entendido como críticas al Gobierno central por la gestión de la emergencia, unos reproches que desde Madrid ya se habían transmitido horas después del 'cero energético' del lunes.

En su discurso de este viernes, Díaz Ayuso no ha escatimado en hacer avisos a navegantes de la que seguramente vaya a ser la polémica que protagonice la agenda política las próximas semanas y meses. "Que nadie se confunda: el buen carácter de los españoles no es pasividad, ni sumisión, ni indiferencia", ha lanzado la dirigente del PP; "que nadie se crea que puede tomarnos por tontos, que se puede acabar con nuestro buen nombre en el mundo, porque nos costó casi dos siglos recuperarlo", ha insistido en otro punto de su mensaje.

"A nosotros nadie nos encierra, nos apaga, ni nos deja en evidencia ante el mundo y jamás seremos crueles, ni egoístas, ni indiferentes, ni cobardes", ha recalcado, en una intervención que ha pronunciado tras entregar las Grandes Cruces que han incluido al restaurante Botín, a la Fundación FAD Juventud y Proyecto Hombre Madrid, al Colegio Oficial de Ingenieros Industriales, a la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Industriales de la Politécnica, a la Cuesta de Moyano, al economista Pedro Schwartz, al centro de ELA del hospital Isabel Zendal, a los fundadores del Hayedo de Montejo y a Onda Madrid por su 40 aniversario.

El Ejército, protagonista ausente

Además de los condecorados con las Grandes Cruces y de los que trabajaron el lunes para volver a la normalidad lo antes posible tras el apagón, el discurso de la presidenta por el Dos de Mayo ha tenido este año otro gran protagonista: el Ejército. La cancelación de la parada cívico-militar que tradicionalmente se hacía en la Puerta del Sol con motivo de la festividad fue cancelada por el Gobierno central y Díaz Ayuso no lo ha olvidado en su mensaje.

"Este año, el pueblo de Madrid está dolido y echa de menos a sus Fuerzas Armadas", ha asegurado la mandataria mientras sonaba 'La muerte no es el final', himno para honrar a los caídos de las Fuerzas Armadas Españolas, interpretada en directo por piano y violín. "Los madrileños quieren y admiran a su Ejército, siempre con ellos, en los malos y en los buenos momentos; un cuerpo de élite, querido y admirado en todo el mundo", ha manifestado.

"Por eso los madrileños se echan masivamente a las calles para verlo desfilar, sin fallarle nunca", ha insistido, para agregar que esta ausencia "no la quiere nadie". "Madrid, unida y alegre, volverá a celebrar a sus héroes con su Ejército, que está siempre donde debe, a la altura de esta Nación centenaria que amamos y en la que, juntos, ponemos todas nuestras esperanzas", ha vaticinado. Al cierre del acto, el himno nacional ha sonado mientras se proyectaba en la pantalla principal una imagen de la Patrulla Águila 'pintando' la bandera de España sobre el cielo de la capital.

Danza, vídeos con IA y Los Secretos para cerrar

Al primer Dos de Mayo al aire libre han asistido alrededor de un millar de invitados, que han sido acomodados en sillas bajo una carpa frente al escenario, dispuesto delante de la entrada de la Real Casa de Correos. Las dos gradas habilitadas para el público general, con 250 asientos cada una, también han lucido bastante concurridas, a pesar de la intensa lluvia y de que no estaban a cubierto. Decenas de personas pertrechadas con paraguas, algunos de ellos repartidos por la propia Comunidad, han aguantado la lluvia para seguir el acto institucional que ha prolongado algo más de una hora y media.

Durante el mismo ha habido espacio para la danza, que ha puesto la compañía de Dani Pannullo estrenando una coreografía basada en la Oda al 2 de mayo de Bernardo López García, y para la música, que ha corrido a cargo del grupo Los Secretos, con sus himnos 'A tu lado' y 'Déjame', y la banda de la Policía Municipal de la capital, que ha interpretado el chotis 'Madrid', entre otras piezas.

La Inteligencia Artificial también ha tenido su hueco por primera vez en la fiesta del Dos de Mayo a través de tres vídeos que se han emitido por las grandes pantallas dispuestas en la Puerta del Sol. Representando a jóvenes de hoy y de principios del siglo XIX, la Comunidad ha querido dar a conocer el papel de la juventud en el levantamiento popular y también los retos que afrontan hoy estas generaciones.

La presidenta había comenzado la mañana en el cementerio de La Florida, en el tradicional homenaje a los héroes del Dos de Mayo encendiendo la llama votiva y depositando una corona de laurel, un gesto que también se ha repetido sobre la placa que en la fachada de la Real Casa de Correos recuerda los sucesos de comienzos del XIX.

"El 2 de mayo de 1808 fuimos de nuevo motor de España y de Europa, demostramos que Napoleón no era invencible, que el pueblo unido lo podía todo", ha enfatizado Díaz Ayuso, que ha considerado que así sigue siendo "años después". La presidenta ha acabado su intervención con tres vivas, a Madrid al rey y a España, que han sido respondidos por los que aún resistido en la Puerta del Sol, entonces sí bajo unos tímidos rayos que han dado una tregua al primer Dos de Mayo al raso.