LG xboom Stage 301: sonido potente, luces dinámicas y una app que lo controla todo

Primera impresión: entra por los ojos

Nada más sacarlo de la caja, el Stage 301 transmite esa sensación de producto bien construido. Tiene un diseño muy actual, con líneas limpias y una forma cúbica ligeramente redondeada que recuerda a otros modelos de la gama xboom, aunque en este caso el acabado en negro mate y la discreta tira LED le dan un aire algo más elegante. No es un altavoz minimalista, pero tampoco resulta estridente.

Es grande, sí, aunque se puede transportar fácilmente y queda muy bien en cualquier habitación, ya sea como altavoz auxiliar en el escritorio o como protagonista de una fiesta improvisada en el salón. Los controles físicos son pocos pero intuitivos, y eso se agradece. Todo lo demás se gestiona desde la aplicación, que ha sido una de las grandes sorpresas de esta prueba.

Sonido que llena la sala

Este juguete ofrece  120 W RMS de potencia, por lo que el LG xboom Stage 301 no tiene problemas para llenar una estancia de tamaño medio-grande con sonido claro y con cuerpo. Y no lo digo como una frase hecha. Lo he probado en diferentes situaciones: reproduciendo música pop mientras trabajaba, poniendo rock para animar una cena en la terraza de casa o moviendo algo de electrónica más contundente durante una reunión de amigos que se viene arriba. En todos los casos, el altavoz ha respondido con un rendimiento más que solvente, sin distorsiones molestas, con buenos agudos y, sobre todo, unos graves reforzados gracias al modo Bass Boost, que se activa desde la app o directamente desde el panel.

Este modo de refuerzo de bajos no es simplemente un “subidón” artificial. Aporta profundidad sin que el resto del sonido se vea comprometido. Hay también otras opciones de ecualización predefinidas, como Estándar o el perfil personalizado, por si quieres ajustar algo más fino según el género musical o el espacio donde lo uses.

Un show visual que acompaña

La iluminación es uno de los elementos distintivos de este modelo. La tira LED que rodea el frontal cambia de color y se adapta al ritmo de la música, generando un efecto envolvente muy logrado. Pero lo mejor es que esta iluminación es completamente configurable. Desde la app LG xboom puedes elegir entre distintos efectos como Wave, Rotation, Flash o Breathing, cada uno con su propia personalidad. Algunos son más suaves, otros más rítmicos, e incluso puedes dejar que se repitan en bucle de forma automática. Yo he acabado usando casi siempre el modo “Flash”, que combina colores vivos con transiciones suaves, ideal para ambientar una habitación sin que parezca una discoteca.

Además, si en algún momento prefieres un uso más sobrio o simplemente estás viendo una película, puedes desactivar las luces con un solo toque desde la app o directamente en el botón de iluminación.

La app es más útil de lo que esperas

Confieso que suelo ser escéptico con las aplicaciones de control para altavoces. En muchos casos son meros accesorios poco pulidos que se usan una vez y luego se olvidan. Pero no es el caso. La app LG xboom es bastante completa y muy bien resuelta. Desde el principio ofrece una interfaz clara, sin distracciones, donde puedes controlar desde el volumen y el modo de sonido hasta los efectos visuales, las fuentes de entrada o el famoso Party Link, que permite emparejar varios altavoces entre sí.

Hay dos modos de enlace: el Modo Dual, ideal para crear una experiencia estéreo real conectando dos xboom iguales; y el Modo Múltiple, que te deja combinar hasta 10 altavoces compatibles para montar un auténtico sistema multisala. No he tenido ocasión de probar más de uno, pero la opción está ahí y es fácil de configurar: seleccionas el modo, enciendes los otros altavoces y los emparejas con unos simples pasos.

Otra función muy práctica es la posibilidad de vincular tu cuenta de Apple Music o tus listas favoritas. En mi caso, la app detectó automáticamente las playlists que suelo usar , “Canciones favoritas”, “25 más escuchadas”, etc. y me permitió iniciar la reproducción directamente desde el altavoz, sin tener que abrir la app de música. Esto, para usuarios habituales del ecosistema Apple, es un plus nada menor.

Autonomía para un día entero

El LG xboom Stage 301 incorpora una batería interna que, según el fabricante, ofrece hasta 12 horas de autonomía. En mis pruebas, reproduciendo música a volumen medio-alto, he conseguido algo más de 10 horas, lo cual está bastante bien para un altavoz de esta potencia y tamaño. Además, cuenta con un indicador de batería visible tanto en la app como en la pantalla del dispositivo, así que es fácil saber cuándo necesita recargarse.

En cuanto a conectividad, además del Bluetooth 5.1, también incluye entrada auxiliar de 3,5 mm y puerto USB, lo cual amplía bastante las opciones de uso. Puedes conectar un pendrive con tus canciones favoritas o usarlo como altavoz para un ordenador portátil sin depender de conexiones inalámbricas. Y si te ves con ganas, conectar un micro y dejarte los pulmones cantando en karaoke. O incluso, hasta una guitarra.

Ideal para el veranito

Después de varios días de uso, tengo claro que el LG xboom Stage 301 no es solo un altavoz más. Es una propuesta pensada para quienes buscan algo más que volumen. Tiene potencia, sí, pero también inteligencia: la app funciona muy bien, la iluminación le da personalidad y la calidad sonora no decepciona. Si estás pensando en renovar tu equipo de sonido para casa o quieres un altavoz con el que disfrutar de buena música tanto dentro como fuera, esta puede ser una opción a tener muy en cuenta.