¿Infancia difícil o exageración? Nodal dice que juntaba latas y robaba cobre de niño para vivir

Christian Nodal no deja de dar de qué hablar. Después de confirmar su relación con Ángela Aguilar y encender la polémica con su confesión sobre haberse enamorado de ella cuando era menor de edad, ahora el cantante ha sorprendido con otra declaración: cuando era niño en Caborca, juntaba latas y robaba cables para vender el cobre.

¿Una infancia difícil o un intento forzado de parecer humilde? La confesión que hizo Nodal

Fue durante una entrevista con Mike Salazar donde Nodal soltó esta anécdota de su infancia: que salía a recoger botes y también robaba cobre para venderlo. La reacción en redes no se hizo esperar. Algunos usuarios simplemente se burlaron, otros se mostraron escépticos y no faltaron quienes acusaron al cantante de “hacerse el humilde” para ganarse el cariño del público.

Comentarios como “¿Desde cuándo robar cobre es una historia tierna?” o “Este güey viene de familia acomodada, ¿por qué se inventa que era niño de la calle?” han llenado las publicaciones relacionadas. Y aunque hay quienes defienden su derecho a compartir lo que vivió, lo cierto es que la historia no cuadra con la imagen pública que Nodal ha construido desde el inicio de su carrera.

El contraste entre su discurso y su entorno

Según lo que se sabe, la familia de Nodal siempre estuvo relacionada con la música y contaba con una posición relativamente estable. Desde joven tuvo acceso a formación artística y oportunidades que no suelen estar al alcance de quienes viven en condiciones precarias. Entonces, ¿por qué contar ahora esta historia?

Hay quienes opinan que se trata de una estrategia de relaciones públicas: mostrar una infancia difícil puede funcionar como herramienta para humanizar al personaje, generar empatía y limpiar su imagen en medio de la polémica. Pero eso también plantea otra pregunta: ¿a costa de qué o de quién se está intentando generar simpatía?

Cuando contar “la verdad” también es parte del show

Lo más preocupante no es si Nodal realmente robó cobre o no. Lo preocupante es cómo las figuras públicas manipulan su narrativa personal según lo que les conviene en el momento, y cómo eso impacta la percepción que el público tiene sobre lo que significa “salir adelante” o “ser humilde”.

Porque una cosa es tener una infancia con dificultades, y otra muy distinta es apropiarse de historias de pobreza para alimentar una imagen pública.

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