'El eternauta' y una de las series de Spielberg: ¿inspiración o coincidencia?
El estreno de la serie de Netflix ha despertado nuevas sospechas sobre 'Falling Skies'.

Contiene SPOILERS de 'El eternauta' T1
Tras múltiples intentonas, El eternauta ya ha llegado a las pantallas en forma de serie con el sello Netflix. La dirección de Bruno Stagnaro y un reparto excepcional con Ricardo Darín han ayudado a que esta adaptación del cómic de Oesterheld y Solano López salga de Argentina, donde ya era un mito popular, para volverse famosa en todo el mundo.
Ahora bien: antes de convertirse en serial televisivo, El eternauta era ya un clásico de las viñetas conocido más allá de su país natal, aunque solo fuese por su reputación. Y entre sus lectores, cabe suponer, se hallaba un tal Steven Spielberg. ¿De dónde vienen estas sospechas? Pues de una serie producida por el director de E.T. (y creada por Robert Rodat) que aguantó cinco temporadas (2011-2015) en la parrilla de TNT.
La invasión de los aliens argentinos
Aunque las acusaciones de plagio hacia Spielberg por el caso de Falling Skies y El eternauta no hayan faltado, algunos pueden considerarlas exageradas. Al fin y al cabo, Héctor Oesterheld era un gran lector de ciencia ficción que partió de sus propios referentes para el cómic, como La guerra de los mundos de H. G. Wells (adaptada mucho después por el propio Spielberg) y otros clásicos del subgénero de invasiones.
Ahora bien: como recuerda el periódico La Nación, también es verdad que el guionista David Koepp, colaborador habitual del director, estuvo casado con la actriz argentina Rosario Varela y tuvo tiempo para conocer el país austral y su cultura. Así pues, los malpensados tienen aquí una razón para torcer el morro ante las similitudes entre el cómic y la serie.
Unas similitudes que comienzan con el arranque de ambas historias. Si El eternauta nos hace vivir el comienzo de la invasión con esa nevada mortal e inexplicable que arrasa Buenos Aires, Falling Skies nos presenta una Tierra sojuzgada por unos aliens apodados 'chinches' (algo que, ya de por sí, puede recordar a los 'cascarudos' de El eternauta) mediante el uso de un arma que vuelve inutilizable la tecnología humana.
Al igual que en El eternauta, la aparición de estos bichos insectoides resulta ser solo el principio, puesto que la fuerza invasora está compuesta por varias especies agrupadas en una estructura jerárquica y al servicio de un poder superior que nunca llega a hacerse visible.
Y, como en El eternauta, Falling Skies cuenta como protagonista con un hombre corriente cuyo papel en la resistencia terrícola va volviéndose más y más importante. Solo que, en este caso, el héroe se llama Tom Mason (Noah Wyllie) en lugar de Juan Salvo, como el personaje interpretado por Ricardo Darín.
Uno de los elementos de la serie de Spielberg que más mosquean a los fans de El eternauta, por último, es el sistema de control mental empleado por los invasores. En ambos casos, se trata de un dispositivo implantado en la columna vertebral cuyo descubrimiento da lugar a escenas muy similares.
Conviene insistir en que todos estos tropos han sido empleados en múltiples obras de ciencia ficción, así que no cabe señalar de buenas a primeras a Spielberg como plagiario. Sin embargo, si a su amigo George Lucas le han llovido las collejas por sus 'préstamos creativos' para Star Wars (empezando por el cómic francés Valerian y Laureline), no es ningún disparate sospechar que el estadounidense conocía la obra de Oesterheld antes de darle luz verde a su serie.
¿Quieres estar a la última de todas las novedades de cine y series? Apúntate a nuestra newsletter.