El apagón pasa factura: la hostelería y el comercio de Huelva contabilizan pérdidas

La provincia de Huelva vivió este lunes el mayor colapso energético de su historia reciente. El gran apagón que afectó a toda la península ibérica transformó la rutina cotidiana en una serie de respuestas improvisadas en todos los sectores económicos. Con Ayamonte sumida en la oscuridad hasta casi las siete de la mañana del martes, el territorio onubense estuvo casi 20 horas sin suministro eléctrico y cada sector resistió como pudo: desde hoteles con generadores que mantuvieron una relativa normalidad hasta restaurantes que perdieron todos sus productos refrigerados, pasando por minas que activaron sus protocolos de emergencia y un Rocío que tuvo que cerrar sus puertas a los devotos. Y es que la provincia no fue una excepción en este apagón sin precedentes que, según informó el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez , se debió a la pérdida súbita de 15 gigavatios de energía, aproximadamente el 60% de la demanda del país en ese momento. Algunas localidades, como Ayamonte, no recuperaron el suministro eléctrico hasta las primeras horas de la mañana del martes, prolongando la situación de emergencia durante casi 20 horas. En el sector hotelero , la situación fue relativamente favorable. Según ha informado el secretario general del Círculo Empresarial de Turismo de Huelva (CETH), Rafael Barba , los establecimientos hoteleros onubenses apenas registraron cancelaciones motivadas por el apagón nacional. «No ha habido ninguna incidencia destacable en el desarrollo normal de la actividad hotelera», ha señalado, atribuyendo esta normalidad a que «los establecimientos hoteleros cuentan casi todos con grupos electrógenos que les posibilita trabajar con cierta normalidad». Las escasas cancelaciones producidas estuvieron relacionadas con problemas de movilidad de los clientes, «especialmente en grupos concertados, que o bien no han podido llegar directamente y han cancelado, o bien directamente lo que han hecho es retrasar su llegada a este martes». El CETH ha destacado también «el comportamiento de los clientes», quienes «no han puesto ningún problema, se han adaptado a esas pequeñas incidencias y han colaborado en todo aquello que se les ha planteado». Sin embargo, no todos los sectores corrieron la misma suerte. La hostelería onubense ha sufrido «bastantes daños en todo lo que se refiere a material perecedero que estaba en las cámaras», según el mismo portavoz. El sector está aún «cuantificando y valorando la situación para también de manera colectiva poder ayudar a los hosteleros a poder hacer las reclamaciones que correspondan», en contacto permanente con la Consejería de Turismo. El sector minero de Huelva, uno de los pilares económicos de la provincia, tampoco registró incidencias destacadas durante el apagón. Según ha indicado Aminer, el funcionamiento del sector estivo «dentro de la normalidad en todo momento». Los equipos electrógenos de las empresas se activaron según lo previsto en el momento en que falló el suministro eléctrico, «para garantizar un paro ordenado de la actividad, como establecen los protocolos de seguridad», evitando así que «se produjeran incidentes en las instalaciones». Durante la mañana del martes, las minas han ido retomando «la normalidad» a medida que volvía la luz, aunque «en muchos casos todavía esperando que se recupere la alta tensión y se puedan reiniciar las operaciones», un proceso que puede «tardar horas en operar con normalidad, dependiendo del proceso de cada empresa». Los lugares emblemáticos de la provincia tampoco escaparon al impacto del apagón. El santuario de la Virgen del Rocío , en Almonte, tuvo que cerrar sus puertas a los devotos sobre las 14.00 horas del lunes al comprobar que no se restablecía el servicio eléctrico. Aunque había visitantes en la ermita, «no es la hora de máxima afluencia», ha explicado el vicesecretario y delegado en temas de comunicación de la Hermandad Matriz de Almonte, Francisco José Pérez . El Rocío no recuperó la normalidad eléctrica hasta aproximadamente las 20.00 horas, por lo que el santuario permaneció cerrado el resto de la jornada, reabriendo sus puertas con normalidad este martes. Los generadores también evitaron incidentes en otro punto emblemático de la provincia, la Gruta de las Maravillas de Aracena, que pudo mantener sus puertas abiertas hasta el mediodía del lunes gracias a sus grupos electrógenos. Según ha explicado el alcalde del municipio, Manuel Guerra, aunque el sistema de emergencia garantizaba la iluminación interior, se decidió cerrar «por precaución» durante el resto de la jornada ante posibles complicaciones en evacuaciones o asistencia sanitaria en caso de que la cueva quedara a oscuras. Situación similar vivieron el recinto fortificado del Castillo y el Museo del Jamón. Desde la Diputación de Huelva, se activó «de inmediato» un dispositivo de seguimiento y atención para «garantizar la seguridad y el bienestar de la ciudadanía», según ha explicado su presidente, David Toscano . La institución provincial movilizó todos

Abr 29, 2025 - 17:03
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El apagón pasa factura: la hostelería y el comercio de Huelva contabilizan pérdidas
La provincia de Huelva vivió este lunes el mayor colapso energético de su historia reciente. El gran apagón que afectó a toda la península ibérica transformó la rutina cotidiana en una serie de respuestas improvisadas en todos los sectores económicos. Con Ayamonte sumida en la oscuridad hasta casi las siete de la mañana del martes, el territorio onubense estuvo casi 20 horas sin suministro eléctrico y cada sector resistió como pudo: desde hoteles con generadores que mantuvieron una relativa normalidad hasta restaurantes que perdieron todos sus productos refrigerados, pasando por minas que activaron sus protocolos de emergencia y un Rocío que tuvo que cerrar sus puertas a los devotos. Y es que la provincia no fue una excepción en este apagón sin precedentes que, según informó el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez , se debió a la pérdida súbita de 15 gigavatios de energía, aproximadamente el 60% de la demanda del país en ese momento. Algunas localidades, como Ayamonte, no recuperaron el suministro eléctrico hasta las primeras horas de la mañana del martes, prolongando la situación de emergencia durante casi 20 horas. En el sector hotelero , la situación fue relativamente favorable. Según ha informado el secretario general del Círculo Empresarial de Turismo de Huelva (CETH), Rafael Barba , los establecimientos hoteleros onubenses apenas registraron cancelaciones motivadas por el apagón nacional. «No ha habido ninguna incidencia destacable en el desarrollo normal de la actividad hotelera», ha señalado, atribuyendo esta normalidad a que «los establecimientos hoteleros cuentan casi todos con grupos electrógenos que les posibilita trabajar con cierta normalidad». Las escasas cancelaciones producidas estuvieron relacionadas con problemas de movilidad de los clientes, «especialmente en grupos concertados, que o bien no han podido llegar directamente y han cancelado, o bien directamente lo que han hecho es retrasar su llegada a este martes». El CETH ha destacado también «el comportamiento de los clientes», quienes «no han puesto ningún problema, se han adaptado a esas pequeñas incidencias y han colaborado en todo aquello que se les ha planteado». Sin embargo, no todos los sectores corrieron la misma suerte. La hostelería onubense ha sufrido «bastantes daños en todo lo que se refiere a material perecedero que estaba en las cámaras», según el mismo portavoz. El sector está aún «cuantificando y valorando la situación para también de manera colectiva poder ayudar a los hosteleros a poder hacer las reclamaciones que correspondan», en contacto permanente con la Consejería de Turismo. El sector minero de Huelva, uno de los pilares económicos de la provincia, tampoco registró incidencias destacadas durante el apagón. Según ha indicado Aminer, el funcionamiento del sector estivo «dentro de la normalidad en todo momento». Los equipos electrógenos de las empresas se activaron según lo previsto en el momento en que falló el suministro eléctrico, «para garantizar un paro ordenado de la actividad, como establecen los protocolos de seguridad», evitando así que «se produjeran incidentes en las instalaciones». Durante la mañana del martes, las minas han ido retomando «la normalidad» a medida que volvía la luz, aunque «en muchos casos todavía esperando que se recupere la alta tensión y se puedan reiniciar las operaciones», un proceso que puede «tardar horas en operar con normalidad, dependiendo del proceso de cada empresa». Los lugares emblemáticos de la provincia tampoco escaparon al impacto del apagón. El santuario de la Virgen del Rocío , en Almonte, tuvo que cerrar sus puertas a los devotos sobre las 14.00 horas del lunes al comprobar que no se restablecía el servicio eléctrico. Aunque había visitantes en la ermita, «no es la hora de máxima afluencia», ha explicado el vicesecretario y delegado en temas de comunicación de la Hermandad Matriz de Almonte, Francisco José Pérez . El Rocío no recuperó la normalidad eléctrica hasta aproximadamente las 20.00 horas, por lo que el santuario permaneció cerrado el resto de la jornada, reabriendo sus puertas con normalidad este martes. Los generadores también evitaron incidentes en otro punto emblemático de la provincia, la Gruta de las Maravillas de Aracena, que pudo mantener sus puertas abiertas hasta el mediodía del lunes gracias a sus grupos electrógenos. Según ha explicado el alcalde del municipio, Manuel Guerra, aunque el sistema de emergencia garantizaba la iluminación interior, se decidió cerrar «por precaución» durante el resto de la jornada ante posibles complicaciones en evacuaciones o asistencia sanitaria en caso de que la cueva quedara a oscuras. Situación similar vivieron el recinto fortificado del Castillo y el Museo del Jamón. Desde la Diputación de Huelva, se activó «de inmediato» un dispositivo de seguimiento y atención para «garantizar la seguridad y el bienestar de la ciudadanía», según ha explicado su presidente, David Toscano . La institución provincial movilizó todos sus servicios, «prestando especial atención a las personas en situación de vulnerabilidad, en particular aquellas que reciben el Servicio de ayuda a domicilio», un colectivo que en 2024 ha alcanzado la cifra de más de 51.000 personas beneficiarias en la provincia. El Consorcio Provincial de Bomberos «permaneció en alerta, preparado para intervenir ante cualquier emergencia, aunque afortunadamente no fue necesaria ninguna actuación extraordinaria», ha destacado Toscano. Por su parte, el vicepresidente y diputado de Nuevas Tecnologías, Felipe Arias , ha explicado que los técnicos realizaron un «trabajo encomiable» y que «gracias a eso todos los sistemas y el protocolo de la Diputación funcionaron perfectamente», pues la institución «dispone de servicios alternativos de suministro» conectados a dos generadores y sistemas de baterías.