Día negativo en Wall Street: qué preocupa a los mercados y por qué crece la volatilidad
Crecen las chances de ver una estanflación en EEUU, algo que la Fed ha advertido en su última reunión. Las bolsas operan en rojo y el mercado espera los anuncios de Trump el miércoles próximo.

Wall Street opera a la baja este viernes. La caída en las acciones se da luego de que se presenten señales de debilidad en el principal motor de la economía estadounidense y la preocupación de que la inflación pueda cobrar mayor impulso en medio de una guerra comercial.
Hoy por la mañana se publicaron datos de inflación mas altos de lo esperado. El índice de precios del gasto de consumo personal (PCE) "subyacente", una métrica que monitorea de cerca la Reserva Federal (Fed), subió ligeramente en febrero, lo que le dio al banco central estadounidense más razones para ser cauteloso con los recortes de tasas el próximo año. Eso impacta de manera negativa en los mercados.
El miércoles que viene, Donald Trump hará su gran anuncio sobre los aranceles recíprocos y el mercado está atento.
Jornada bajista
Los principales índices accionarios en Wall Street operan con fuertes bajas. El Dow Jones muestra una baja de 1,1%, mientras que el S&P500 cae 1,3%. Las acciones del sector tecnológico son las que más sufren, con una merma de 1,82% al cierre de la semana en el Nasdaq.
Malos datos macro
Lo que sucedió fue que el PCE general creció un 2,5% anual durante el segundo mes del año, sin cambios respecto a la lectura de enero y en línea con las estimaciones de los economistas. En tanto, mensualmente, el índice creció un 0,3%, al mismo ritmo que en enero.
Sin embargo, la métrica "core", que excluye artículos más volátiles como alimentos y combustible, se situó en el 2,8% anual, ligeramente por encima del 2,7%.
En términos mensuales, creció un 0,4%, por encima del 0,3% promedio del mes anterior. Así, la inflación se mantiene firme en niveles superiores al objetivo del 2% de la Fed y el impulso es al alza, no a la baja.
Además, se publicaron recientemente datos que mostraron una caída en la confianza del consumidor estadounidense.
El índice elaborado por la Universidad de Michigan cayó a 57 puntos, debajo del 57,9 esperado y toca su menor nivel desde julio de 2022.
Por otro lado, la inflación esperada a 5 años elaborada por la Universidad de Michigan alcanzó el 4,1%, cuando el mercado esperaba que fuera del 3,9%.
Al analizar la misma expectativa, pero de menor plazo, la medición arroja que la inflación a un año es del 5%, por encima del 4,9% esperado por el mercado.
Así, crecen con fuerza las expectativas de inflación a largo plazo, que alcanza su máximo en 32 años.
Guerra comercial y temores a una estanflación
Todas estas cifras se conocen en un momento en que crece el temor a que la agresiva agenda comercial del presidente estadounidense Donald Trump, que incluye aranceles tanto a aliados como a adversarios, pueda reavivar las presiones inflacionarias y afectar negativamente a la actividad económica en general.
El mercado está viendo como más probable que un enfriamiento gradual del mercado laboral y focos de tensión financiera en los hogares contribuyan a una desaceleración del crecimiento hasta 2025.
Los aranceles serán un lastre adicional para el crecimiento durante este año, a la vez que aumentarán la inflación.
De esta manera, se elevan las chances de ver una estanflación en EEUU, algo que la Fed advirtió en su última actualización de proyecciones económicas la semana pasada.
Todo esto plantea un panorama desafiante para la Fed, que la semana pasada optó por mantener sin cambios la tasa de interés en su última reunión debido a la incertidumbre en torno a las medidas políticas de Trump.
"Es probable que el crecimiento y el consumo se desaceleren debido a una fuerte caída en la confianza del consumidor, causada por una importante incertidumbre política", señalaron analistas de ABN Amro en una nota.
Mientras tanto, el nowcast de la Reserva Federal de Atlanta estima que la economía podría caer 1,8% trimestral anualizado en el primer trimestre de 2025.
Aunque, si se utiliza su nuevo modelo -que excluye las importaciones y exportaciones de oro-, el resultado es un leve crecimiento del 0,2%. De igual manera, implicaría una evidente desaceleración respecto al año pasado.
"Parece que una Fed que se mantiene a la expectativa aún tiene que esperar. La lectura de inflación más alta de lo esperado de hoy no fue excepcionalmente positiva, pero no va a acelerar el cronograma de la Fed para recortar las tasas de interés, especialmente dada la incertidumbre en torno a los aranceles"", dijo Ellen Zentner de Morgan Stanley Wealth Management.
Mientras tanto, la volatilidad en Wall Street vuelve a subir y el índice se dispara por encima de los 20 puntos nuevamente.
El miércoles que viene, Donald Trump hará su gran anuncio sobre los aranceles recíprocos y el impacto que puedan llegar a tener los aranceles sobre la actividad económica y la inflación es la principal preocupación.
Los analistas de PPI remarcaron que "la verdadera discusión pasa por si ese impacto sobre la inflación será transitorio o no".
La semana pasada, Powell intentó calmar las aguas en la conferencia de prensa posterior a la decisión de política monetaria al plantear que su escenario base es que el efecto podría ser transitorio.
Sin embargo, otros miembros de la Fed se mostraron más escépticos. El presidente de la Fed de St. Louis, Alberto Musalem, afirmó el miércoles que sería cauteloso con asumir que el impacto de los aumentos arancelarios sobre la inflación será completamente transitorio", dijeron.
El presidente de la Fed de Atlanta, Raphael Bostic, evitó pronunciarse: cuando le preguntaron sobre este tema, dijo que no iba a hacer comentarios al respecto.
"Más allá del dato de inflación, el foco está puesto en la postura más defensiva que vienen adoptando los consumidores. A pesar del crecimiento en los ingresos nominales, se observa una preferencia por mantener una tasa de ahorro elevada. En otras palabras, ese mayor ingreso no se está trasladando plenamente al gasto", dijeron desde PPI.