Con tecnología de hace más de 30 años: así roban los datos de los usuarios de las tarjetas EBT del programa SNAP
Descubre cómo roban los datos de los usuarios de tarjetas EBT del programa SNAP con tecnología de hace más de tres décadas.

Los estafadores utilizan tecnologías de los años 90 para clonar y robar fondos de las tarjetas EBT que pertenecen a los beneficiarios del programa SNAP, el cual otorga asistencia alimentaria a los más necesitados. El problema radica en que estas tarjetas no fueron actualizadas desde su implementación en 1998, lo que las deja sin protección ante métodos de clonación como “skimmers”.
De acuerdo a ABC27, esta tecnología es la misma que en su momento fue utilizada en las tarjetas de crédito y débito tradicionales, las cuales ahora son fácilmente vulnerables a las prácticas de clonación de datos. A diferencia de las tarjetas más modernas, que cuentan con microchips de seguridad, las EBT continúan con la misma tecnología básica, lo que las hace un blanco fácil para los delincuentes.
Fraude con tarjetas EBT: la amenaza de los skimmers
El uso de “skimmers” o dispositivos de clonación es una de las tácticas más comunes que utilizan los estafadores para obtener información sensible de las tarjetas. Estos aparatos, que se colocan sobre terminales de pago, logran copiar la banda magnética y el número PIN de los usuarios cuando estos pagan una compra.
Recientemente, se reportó un caso de un skimmer que fue instalado en una terminal de un Dollar General en Highspire, Pensilvania, en donde varios consumidores vieron comprometida la información de sus tarjetas. Este tipo de fraude aumentó de manera exponencial durante los últimos años, lo que genera una gran preocupación no solo entre los beneficiarios del programa SNAP, sino que también entre las autoridades federales.
El impacto que tiene este tipo de estafa en los beneficiarios de SNAP
Monique Bryant, una residente de Harrisburg, Pensilvania, se vio afectada por el robo de US$198.66 de su cuenta de SNAP. A pesar de que la víctima nunca prestó ni compartió su tarjeta ni su PIN con nadie, los fondos fueron robados y utilizados en una panadería en Chicago, Illinois.
En este caso, la legislación anterior, que permitía a los estados reembolsar las pérdidas a las víctimas del robo de información, dejó de estar vigente a finales de 2024. Esto situación implica que aquellos beneficiarios que sean víctimas de este tipo de estafa no tendrán una cobertura si sus cuentas son vaciadas.
Peter Zurflieh, abogado del Proyecto de Justicia Comunitaria, explicó: “Si esto le sucede y fue víctima de un robo de datos después del 24 de diciembre de 2024, puede solicitar un reemplazo de su tarjeta, pero no podrá recuperar las prestaciones atrasadas”. Esta situación pone en aprietos a los más vulnerables, quienes dependen de estos fondos para cubrir sus necesidades básicas de alimentación.
La propuesta para hacer más seguras las tarjetas EBT
Las propuestas para modernizar las tarjetas EBT y adaptarlas a tecnologías más avanzadas son cada vez más necesarias. Los legisladores de Pensilvania, Dan Williams y Doyle Heffley, comenzaron a trabajar en proyectos de ley para exigir que el Departamento de Servicios Humanos del estado comience a producir tarjetas con chips de seguridad similares a las utilizadas por las tarjetas bancarias actuales.
Sin embargo, a pesar de que la transición sea necesaria, no va a ser fácil, ya que se va a necesitar tiempo y recursos para distribución de nuevas tarjetas y la actualización de los sistemas de pago en comercios que aceptan SNAP. La implementación de nuevas tecnologías en las tarjetas EBT no solo mejoraría la seguridad de los fondos, sino que también aliviaría una situación crítica para miles de personas en situación de vulnerabilidad.