Publican en español 'Juega con tu gato', la guía esencial para una vida felina feliz y saludable
Mikel Delgado vive en Sacramento, California, con su pareja y tres gatos rescatados.

En el ámbito del comportamiento animal, especialmente cuando hablamos de especies domésticas, es fácil encontrar referentes que han marcado el rumbo de la etología moderna. Figuras como Konrad Lorenz, Nikolaas Tinbergen o David L. Mech (quien primero impulsó y luego desmintió la teoría de la dominancia en cánidos), forman parte del imaginario colectivo de cualquier aficionado o profesional interesado en el estudio de los perros. Más recientemente, nombres como Alexandra Horowitz han contribuido a acercar el comportamiento canino al gran público siempre desde un enfoque riguroso y accesible.
Sin embargo, cuando el foco se desplaza hacia los gatos, las figuras de referencia son menos numerosas. Entre los expertos que están cambiando esta narrativa destaca Mikel Maria Delgado, doctora en psicología especializada en comportamiento animal, consultora felina y autora de más de 20 artículos científicos, cuya labor ha contribuido de forma decisiva a llenar ese vacío.
Ahora, los lectores en español estamos de enhorabuena: Juega con tu gato, su último libro, llega de la mano de GeoPlaneta. Esta obra se presenta como una guía imprescindible para cualquier amante de los gatos que desee comprenderlos y mejorar su bienestar a través del juego.
El juego: mucho más que diversión
En España, donde se estima que hay unos 6 millones de gatos domésticos, los felinos son el segundo animal de familia más común, por detrás de los perros. Sin embargo, muchos convivientes con gatos desconocen un aspecto fundamental de su naturaleza: necesitan jugar, no solo para divertirse, sino para mantenerse sanos y equilibrados. Mikel Delgado, apoyándose en investigaciones recientes, desmonta la idea de que el juego es un lujo secundario. En Juega con tu gato, explica que el juego es una necesidad biológica arraigada en el instinto depredador de los felinos, esencial para su salud física, mental y emocional.
“Los gatos no ‘sientan la cabeza’ como los humanos”, escribe Mikel Delgado. A través de la domesticación, hemos seleccionado rasgos juveniles en los gatos, lo que se conoce como neotenia (ojos grandes, caras redondas, vocalizaciones como maullidos) que los convierten en ‘eternos cachorros’ con una predisposición al juego que dura toda la vida. Porque el juego, además de estimular sus habilidades motoras y cognitivas, también actúa como una válvula de escape para el estrés y activa regiones cerebrales relacionadas con la motivación y las recompensas. Mantener una actividad de juego saludable puede incluso prevenir problemas de comportamiento.
Cazar, la raíz del juego
La experta en gatos reconocida internacionalmente dedica gran parte del libro a conectar el juego con el instinto cazador innato de los gatos. “No nos gusta pensar que nuestros mimosos gatos son 'asesinos' fríos como el acero, pero es un hecho: los gatos cazan”, afirma. Este instinto persiste incluso en gatos bien alimentados que viven en pisos. Por eso, el juego interactivo, donde las personas movemos el juguete imitando a una presa, es crucial para canalizar esa energía sin recurrir a la caza real.
El libro también desmiente mitos comunes, como la idea de que los gatos traen presas muertas porque creen que tenemos hambre. Mikel Delgado sugiere que esta conducta podría reflejar un impulso de compartir, similar al de una madre con sus cachorros, aunque no descarta que simplemente sea parte de su rutina cazadora. Para quienes quieran reducir esta conducta, la autora recomienda soluciones prácticas, como los llamados ‘salva pájaros’, unos baberos de neopreno que, según estudios, disminuyen hasta en un 81% la captura de aves y fauna silvestre sin interferir con otras actividades felinas.
Consejos prácticos
Juega con tu gato ofrece también herramientas concretas para integrar la práctica del juego en la rutina diaria. La autora insiste en que todos los gatos, incluso los que parecen indiferentes, tienen un cazador interno que puede despertarse con el estímulo adecuado. M. Delgado también aborda el caso de los gatos que no juegan: “Todos los gatos tienen la impronta de la caza en su ADN”, asegura, y comparte técnicas para motivar incluso a los felinos más reacios, como mover un juguete bajo una alfombra o usar varitas que simulen presas.
Más allá del juego: entender y corregir conductas
El libro no se limita al juego, y explora cómo este puede ser una herramienta para abordar problemas de comportamiento. Por ejemplo, el juego agresivo, cuando un gato ataca manos o pies, no es un acto de maldad, sino una expresión de su instinto cazador mal canalizado. La autora recomienda mantener la calma, evitar reacciones que imiten a una presa y redirigir esa energía hacia juguetes interactivos. En casos más complejos, sugiere la modificación de conducta con el uso de clickers o la consulta con un veterinario especializado.
Otro problema común es el uso inadecuado del arenero, que puede deberse a cuestiones de salud, porque el recipiente no es apropiado o por el estrés. El libro contiene consejos como las revisiones veterinarias, mantener los areneros limpios y accesibles (uno por gato, más uno extra), y utilizar arenas aglomerantes no perfumadas. Su enfoque subraya la importancia de ver estas conductas como gritos de auxilio’ en lugar de actitudes vengativas, animando a los cuidadores de gatos a adoptar la perspectiva felina.
Una guía para conectar con tu gato
Con un estilo ameno y apoyado por las ilustraciones de Lili Chin, Juega con tu gato, de 248 páginas, es un manual de juegos, pero también nos ofrece la oportunidad de comprender mejor la mente felina, fortalecer el vínculo y promover su bienestar. Gracias a la combinación de rigor científico con consejos prácticos, es una lectura accesible tanto para convivientes novatos como para profesionales del comportamiento felino. Como dice Mikel Delgado, jugar con tu gato no solo es divertido: es una forma de cuidar su salud, su felicidad y, de paso, la tuya.