El aire mata: cerca de 70 personas mueren prematuramente cada día por la contaminación, según el Gobierno
Además de los graves problemas de salud que causa, la contaminación también tiene un impacto en nuestra economía, suponiendo el 3,5% del PIB español

La contaminación en el planeta es un problema cada vez más preocupante y con mayor presencia. Cerca del 97% de la población en Europa respira aire contaminado y los estragos en la salud empiezan a ser más notorios. 300.000 personas mueren prematuramente al año a causa de la polución en Europa, 25.000 en España; lo que deja una cifra de casi 70 fallecidos al día, según datos del Consejo Europeo y del Gobierno español.
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) -correspondientes a 2023-, un 90% del territorio nacional ha sido afectado por la polución. La Comunidad de Madrid y las Islas Canarias fueron las regiones más contaminadas del país. “Creo que en España, y en general en Europa, no tenemos tan identificado el riesgo que supone la mala calidad del aire”, comenta a Vozpópuli Vanessa López, directora de Salud por Derecho.
Respirar aire contaminado aumenta el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, accidentes cerebrovasculares, asma, enfermedades pulmonares obstructivas crónicas o cáncer de pulmón, entre otras patologías. Además, reduce la función pulmonar, tiene efectos en el desarrollo del cerebro y el sistema nervioso central, aumenta el riesgo de parto prematuro y el déficit de peso al nacer, que puede causar problemas de salud a posteriori.
Debido a estos problemas en la salud, se producen más de 62.000 ingresos hospitalarios urgentes al año en España. Destaca también el aumento de riesgo de diabetes, obesidad y demencia, así como los efectos negativos en la salud mental, incrementando el peligro de sufrir ansiedad, estrés o depresión.
“Se ha ido identificando que un número muy importante de casos de demencia en Europa están relacionados con la mala calidad del aire”, señala López. De acuerdo con diversos estudios, el aumento de exposición media a la contaminación incrementa el riesgo de desarrollar demencia en un 4%. “Todavía es muy necesario avanzar en la ciencia para conocer qué mecanismos específicos son los que están produciendo estos daños neurológicos y de salud mental”, demanda la directora de Salud por Derecho.
Como tiende a ocurrir en otros escenarios sanitarios, el riesgo de contraer alguna enfermedad asociada con la contaminación es mayor en niños, embarazadas, personas mayores y enfermos preexistentes. En esta línea, los barrios con menos recursos, más pobres, están también más expuestos a las amenazas que supone la polución en la salud.
El pasado 26 de abril de 2024, la UE aprobó nuevos límites en la Directiva Europea de Calidad del Aire para alcanzar el objetivo de contaminación cero para 2050, afectando únicamente al 6% de la población. España está trabajando para convertirse en verde, pero sus niveles están aún por encima de los límites establecidos.
El tráfico motorizado es la principal fuente de contaminación. Por este motivo la Unión Europea está fomentando cada vez con más énfasis establecer Zonas de Bajas Emisiones (ZBE), limitando la entrada de ciertos vehículos. No obstante, esta medida ha creado discrepancia entre la población, ya que ha imposibilitado y complicado la movilidad de varios ciudadanos. Actualmente, solo veinte ciudades españolas cuentan con ZBE.
“No vale con decir a las personas que no utilicen el coche. Tienen que ir a trabajar y trasladarse. Necesitan un transporte público eficiente”, apunta Vanessa López. Además del transporte, es importante reducir las emisiones en los hogares. “Son muchas las medidas que hay que tomar y que la Administración tiene que ponerlas en marcha y ayudar”, añade López.
El impacto económico de la contaminación
Más allá de los perjuicios en la salud, la contaminación atmosférica también provoca un impacto en la economía. Los costes sanitarios y laborales derivados de la polución representan 50.000 millones de dólares al año, según datos del Banco Mundial. Un 3,5% del PIB español.
Centrando el foco en el panorama nacional, anualmente se destinan 3.600 millones de euros en gastos relacionados con enfermedades asociadas a la contaminación por tráfico. Asimismo, los miles de ingresos hospitalarios que se dan cada año suponen 850 millones de euros al Estado.