Un comensal le pide al equipo de 'First Dates' que corte la grabación en plena decisión final
Prieto tuvo un encontronazo con su cita, María, en el momento de decidir si volvían a quedar o no

Hay citas que comienzan mal y luego acaban bien o al revés. Pero lo que pasó este miércoles en First Dates entre María y Prieto se había visto pocas veces en el programa de Cuatro.
El primero en llegar al restaurante del amo fue el madrileño, que le explicó a Carlos Sobera que ni estudiaba ni trabajaba, pero "no soy nini", aclaró.
"Me defino como un emprendedor del barrio de Orcasitas en Madrid, jarcoreta, cani o lo que quieras, pero aspiro a ser un pijo y mirarte por encima del hombro como me han hecho a mí toda la vida", aseguró.
El presentador le preguntó por su experiencia en el amor, y el joven le contestó que solo había tenido una relación seria, pero se rompió cuando él se fue a Ibiza a trabajar el verano pasado.
"Mientras yo estaba en Ibiza, ella se estaba follando a mi mejor amigo aquí. Lo pasé muy mal, pero me di cuenta de que la chica no me importaba tanto, pero pasé tres días de mierda".
A continuación llegó la madrileña, que explicó en su presentación que en el amor le había ido "mal, mal y mal. Siempre me han tocado los notas, machistas… fatal".
Ya en la mesa, Prieto le dijo que estaba buscando a alguien que le ayudara a cambiar su forma de ver el amor o encontrar una aventura: "Me gustaría tener una follaamiga por ahí porque antes de ser pareja, tendríamos que ser follaamigos", le explicó a su pareja de la noche.
"Eres muy guapa y eres de mi flow", le confesó el emprendedor a su cita en mitad de la cena. "Siento que entre nosotros hay una conexión para follar", aseguró.
El dater le preguntó a María cómo le gustaban los chicos, y ella le contestó que "no quiero un narcisista, ni machistas, ni homófobos, que no sean ninis…".
Él, por su parte, le contó que entre sus requisitos estaban "que le guste el guarreo, que se dejen 'por el siempre sucio'". Al escucharle, María le contestó rápidamente: "No, ni de coña".
"Ese término de 'siempre sucio' no me ha gustado nada y, además, tengo claro que eso no lo haré hasta que me case, que hay que tener algo reservadito para mi marido", confesó la madrileña.
Ambos protagonizaron una de las decisiones finales más confusas de la historia del programa. "Estaría bien repetir, quedar otro día, salir de fiesta... no te veo para algo estable y serio", le dijo Prieto a María.
"Eres la menos amueblada de los dos y no va a malas", le dijo el madrileño a la joven, que no le sentó nada bien el comentario. "Por lo menos tengo estudios...", le contestó.
Entonces, tras los comentarios y viendo que la tensión aumentaba por momentos, Prieto le pidió al equipo del programa que parara la grabación: "Corta que nos estamos llevando peor".
A pesar de todo, los dos coincidieron en que tenían el mismo sentido del humor y que se lo habían pasado bien en la cita: "Tenemos la misma chispa", destacó el empresario.
"¡Eres un picado!", exclamó la comensal antes de reconocer ambos que, finalmente, les gustaría tener una segunda cita fuera del restaurante de First Dates.