Santa Bárbara amplía un 50% su plantilla asturiana dedicada al 8x8 en pleno rearme europeo
La compañía redobla sus esfuerzos para acelerar la producción del blindado estrella del Ministerio de Defensa una semana después de que su matriz revelase el nuevo plan industrial para expandir su presencia en España.

La exigencia de incrementar el gasto militar empieza a hacerse notar en la industria española de defensa. En Santa Bárbara, la filial española de la norteamericana General Dynamics, la presión llega en forma de un refuerzo de plantilla para acelerar la producción del 8x8, blindado estrella del Ministerio de Defensa. La compañía, según rige un comunicado emitido este martes, se compromete a incrementar un 50% el personal en su fábrica asturiana de Trubia dedicado a la integración y montaje de este vehículo que afronta varios años de retraso.
Tal y como explica la firma, esta estrategia se enmarca en el nuevo plan industrial de su matriz GDELS para ampliar sus capacidades productivas en España. En esta hoja de ruta que vio la luz del mercado el pasado 8 de abril, el grupo se emplaza a estudiar una ampliación de su presencia en otras autonomías más allá de Asturias, Andalucía o Madrid, donde ya está presente. En esta línea, Santa Bárbara ya ha anunciado una primera inversión de 5 millones de euros destinada a ampliar las instalaciones de Trubia y aumentar capacidades de su centro de mecanizado avanzado.
Con más detalle, el refuerzo de plantilla se produce en el momento operativo en el que es posible acelerar la producción después de que el consorcio que suministra el 8x8 -formado por Indra, Sapa, Escribano y la propia Santa Bárbara- haya entregado las cuatro primeras unidades. Ahora, desde SB defienden que todos los proveedores podrán concretar una planificación más expansiva con el fin de entregar los vehículos.
Se da la circunstancia de que este movimiento se produce en pleno auge del rearme europeo, el proyecto que busca dotar a los países del bloque de una fuerza de disuasión suficiente para garantizar su propia defensa y seguir proporcionando armamento a Ucrania, ante la amenaza de Rusia y la posibilidad de que la Administración Trump retire su apoyo militar. Para lograr estos objetivos, el primer paso que plantea el Ejecutivo comunitario es incrementar la inversión en defensa y que la media del gasto de la UE pase del 1,9% al 3% del PIB. España, de igual modo que otros países del sur, se encuentra muy alejado de este objetivo ya que sólo dedica un 1,28% de su PIB.
A esta estrategia hace referencia el propio presidente de GDELS, Antonio Bueno, en el comunicado. "España y Europa tienen un objetivo y vamos a poner todos nuestros recursos junto al resto de nuestros socios para poder entregar los vehículos previstos durante 2025 por TESS y el Ministerio de Defensa" defiende antes de recalcar que su propósito es "ayudar al sector de la industria de defensa en España a traccionar en esta nueva etapa y a ser relevantes en Europa y el espacio OTAN".