Podría estar medio hecho: El español que ya suena como Papa
Conmoción en el Vaticano: el Papa Francisco ha muerto y se activa el proceso para elegir a su sucesor El mundo católico despide a una de sus figuras más influyentes del siglo XXI. El Papa Francisco, líder espiritual de más de 1.300 millones de fieles en todo el mundo, falleció este lunes 21 de abril ... Leer más

Conmoción en el Vaticano: el Papa Francisco ha muerto y se activa el proceso para elegir a su sucesor
El mundo católico despide a una de sus figuras más influyentes del siglo XXI. El Papa Francisco, líder espiritual de más de 1.300 millones de fieles en todo el mundo, falleció este lunes 21 de abril a los 88 años a causa de un ictus, dejando a la Iglesia católica sumida en un profundo duelo y con una importante misión por delante: elegir a su sucesor.
La noticia del fallecimiento del primer Papa latinoamericano de la historia ha causado una oleada de reacciones en todo el planeta. Desde líderes religiosos y políticos, hasta millones de fieles que lo admiraban por su mensaje de humildad, inclusión y compromiso social. Con su muerte, se pone en marcha uno de los procesos más solemnes y trascendentales de la Iglesia: el periodo de “Sede Vacante”.
¿Qué es la Sede Vacante y quién lidera ahora la Iglesia?
Durante la Sede Vacante, la Iglesia se queda oficialmente sin Papa. Este lapso, que puede durar días o semanas, es gestionado por el cardenal camarlengo, cargo que en esta ocasión recae en el estadounidense Kevin Farrell. Él será el encargado de garantizar la transición y convocar el tan esperado Cónclave, la reunión secreta en la que los cardenales se encierran en la Capilla Sixtina para elegir al próximo Pontífice.
El proceso de elección es meticuloso. Para que un candidato sea proclamado Papa, debe contar con una mayoría cualificada de dos tercios de los votos de los cardenales electores. Las votaciones pueden extenderse durante días, realizándose hasta cuatro escrutinios diarios. Solo cuando uno de los nombres alcanza el consenso necesario, la famosa “fumata blanca” se alzará desde la chimenea de la Capilla Sixtina, señal inequívoca de que el mundo tiene un nuevo Papa.
¿Quién será el sucesor de Francisco? Comienzan las especulaciones
La muerte del Papa ha reactivado las quinielas en torno a quién podría ser su sucesor. Entre los nombres más mencionados se encuentran figuras procedentes de todos los continentes, lo que refleja el carácter verdaderamente global de la Iglesia católica actual.
Entre ellos están el conservador estadounidense Raymond Burke, cercano al expresidente Donald Trump; el filipino Luis Antonio Tagle, defensor del legado social del papa Francisco; y el ghanés Peter Turkson, una de las voces africanas más influyentes dentro del Vaticano. También destacan los italianos Matteo Zuppi y Pietro Parolin, ambos con un largo historial en la Curia romana, así como el guineano Robert Sarah, referente del ala más tradicionalista.
Un español entre los favoritos: Juan José Omella
Entre la lista de posibles sucesores, ha sorprendido gratamente la inclusión de un nombre español con gran peso dentro de la Iglesia: Juan José Omella, actual arzobispo de Barcelona. Considerado uno de los candidatos con mayores posibilidades, Omella se ha ganado el respeto dentro y fuera de España por su extensa trayectoria pastoral y su estrecha relación con el Papa Francisco.
Nacido en Cretas, Teruel, en 1946, Omella cuenta con una carrera eclesiástica sólida. Comenzó como párroco en Zaragoza y pasó un año como misionero en Zaire (actual República Democrática del Congo), una experiencia que marcó su visión humanista. En 1996 fue nombrado obispo auxiliar de Zaragoza, para luego liderar las diócesis de Calahorra y La Calzada-Logroño. Su consagración llegó en 2015, cuando el propio Papa Francisco lo nombró arzobispo de Barcelona.
A su amplio currículum se suma el haber sido presidente de la Conferencia Episcopal Española entre 2020 y 2024 y Cardenal Presbítero de Santa Cruz en Jerusalén. Además, en 2023, Francisco lo eligió como miembro del influyente Consejo de Cardenales, lo que demuestra el alto nivel de confianza que depositó en él.
La reacción de Omella a su posible elección
Las especulaciones sobre su posible elección no se han hecho esperar, y el propio Omella ha querido restar importancia a los rumores con un tono de humildad y humor. “Ya veremos qué pasará, yo no me voy a votar”, declaró este lunes desde el Palacio Episcopal, en referencia a que, como cardenal elector, participará activamente en la votación, aunque no pueda votar por sí mismo.
En otra intervención, añadió entre risas: “Yo no me voy a votar, evidentemente, y si vosotros pudieseis votar, pues no sé a quién votaríais, o sea que lo dejamos en las manos del Espíritu Santo”. Una muestra de su cercanía, sencillez y sentido del humor que lo han convertido en uno de los rostros más queridos dentro de la Iglesia española.
Un nuevo capítulo se abre en la historia de la Iglesia
Con la partida de Francisco, se cierra una era marcada por un Pontificado que abogó por los marginados, la justicia social y la reforma interna de la Iglesia. Ahora, el mundo observa con atención el desarrollo del Cónclave, en espera de conocer al nuevo guía espiritual de la Iglesia católica. ¿Será Juan José Omella el próximo Papa? Solo el tiempo —y los cardenales— lo dirán.