Más de la mitad de las mujeres tienen problemas para que no se le escape el pis, y eso puede estar asociado a problemas cardiovasculares

La incontinencia urinaria es una condición común que afecta a millones de mujeres en todo el mundo, generando no solo incomodidad física, sino también consecuencias en la salud cardiovascular. Nuevas investigaciones revelan que la incontinencia puede estar relacionada con un mayor riesgo de desarrollar enfermedades del corazón debido a que las mujeres afectadas suelen practicar menos actividad física, incrementando factores de riesgo como la hipertensión y la diabetes. Conocer estos vínculos podría ayudar a prevenir complicaciones graves y mejorar la calidad de vida de quienes la padecen. Incontinencia urinaria y su impacto en la actividad física Un reciente estudio llevado a cabo en Estados Unidos ha explorado la relación entre la incontinencia urinaria, la actividad física y el riesgo de enfermedades cardiovasculares en una amplia muestra de más de 20.000 mujeres. Los investigadores encontraron que, aunque la incontinencia urinaria no se relacionó directamente con una clasificación específica de actividad física, sí existió una tendencia a realizar menos ejercicio entre las mujeres afectadas. Esto es especialmente importante porque estudios anteriores ya habían indicado que hasta el 75% de las mujeres con incontinencia abandonan o modifican su rutina de ejercicios debido al temor a experimentar episodios de fuga involuntaria de orina. Estos cambios de estilo de vida conducen inevitablemente a un mayor sedentarismo, lo que a largo plazo incrementa el riesgo de enfermedades cardiovasculares. En Vitónica Los cinco mejores ejercicios que puedes hacer para ponerte en forma según Harvard ¿Por qué la incontinencia urinaria afecta el riesgo cardiovascular? La citada investigación mostró que las mujeres con incontinencia tienen una probabilidad significativamente mayor de padecer factores de riesgo cardiovascular, como hipertensión arterial, diabetes tipo 2, colesterol elevado, e incluso complicaciones graves como accidentes cerebrovasculares y necesidad de cirugía cardíaca, como el bypass coronario. Uno de los posibles mecanismos propuestos por los científicos es que el estrés y la ansiedad asociados a los síntomas de la incontinencia podrían aumentar la actividad del sistema nervioso simpático, contribuyendo a un mayor estrés cardiovascular. Además, al reducir la actividad física para evitar situaciones incómodas, estas mujeres pierden beneficios importantes relacionados con el ejercicio regular, como un mejor control del peso, presión arterial más saludable y niveles más bajos de colesterol. Recomendaciones para la práctica clínica Dada esta clara asociación entre la incontinencia urinaria y un aumento del riesgo cardiovascular, los investigadores recomiendan que se realice un cribado rutinario de esta condición entre mujeres adultas. Asimismo, sugieren que aquellas mujeres diagnosticadas con incontinencia reciban un seguimiento más estrecho y específico orientado a prevenir complicaciones cardíacas. Es fundamental que los profesionales de la salud ofrezcan estrategias para manejar esta condición, incluyendo ejercicios específicos para fortalecer el suelo pélvico, asesoría sobre estilo de vida saludable, y en ciertos casos, tratamientos médicos o quirúrgicos efectivos para disminuir los síntomas y facilitar la adopción de un estilo de vida más activo. ¿Qué se puede hacer para prevenir y tratar la incontinencia urinaria? La intervención temprana es clave. Iniciar ejercicios de fortalecimiento del suelo pélvico y adoptar hábitos saludables, como mantener un peso adecuado y evitar sustancias irritantes para la vejiga, podrían reducir el riesgo de desarrollar incontinencia y, por ende, complicaciones cardiovasculares a largo plazo. Finalmente, es crucial abordar este tema sin tabúes, promoviendo consultas médicas tempranas ante los primeros síntomas. Esta perspectiva integral podría cambiar significativamente el pronóstico y la calidad de vida de muchas mujeres afectadas por la incontinencia urinaria. Referencias VanWiel LL, Carr LJ, Bond DS, Wu Y, Tunitsky-Bitton E, Tulikangas P, Steinberg AC, Whitaker KM. Associations of urinary incontinence, physical activity and cardiovascular disease risk among women in the United States. Prev Med. 2025 May;194:108277. doi: 10.1016/j.ypmed.2025.108277. Epub 2025 Apr 3. PMID: 40187659. En Vitónica | Encogimientos abdominales después del parto: así impactan en la diástasis abdominal Imágenes | Freepik, 8photo (Freepik) - La noticia Más de la mitad de las mujeres tienen problemas para que no se le escape el pis, y eso puede estar asociado a problemas cardiovasculares fue publicada originalmente en Vitónica por Joaquín Vico Plaza .

Abr 29, 2025 - 18:07
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Más de la mitad de las mujeres tienen problemas para que no se le escape el pis, y eso puede estar asociado a problemas cardiovasculares

Más de la mitad de las mujeres tienen problemas para que no se le escape el pis, y eso puede estar asociado a problemas cardiovasculares

La incontinencia urinaria es una condición común que afecta a millones de mujeres en todo el mundo, generando no solo incomodidad física, sino también consecuencias en la salud cardiovascular. Nuevas investigaciones revelan que la incontinencia puede estar relacionada con un mayor riesgo de desarrollar enfermedades del corazón debido a que las mujeres afectadas suelen practicar menos actividad física, incrementando factores de riesgo como la hipertensión y la diabetes. Conocer estos vínculos podría ayudar a prevenir complicaciones graves y mejorar la calidad de vida de quienes la padecen.

Incontinencia urinaria y su impacto en la actividad física

incontinencia

Un reciente estudio llevado a cabo en Estados Unidos ha explorado la relación entre la incontinencia urinaria, la actividad física y el riesgo de enfermedades cardiovasculares en una amplia muestra de más de 20.000 mujeres.

Los investigadores encontraron que, aunque la incontinencia urinaria no se relacionó directamente con una clasificación específica de actividad física, sí existió una tendencia a realizar menos ejercicio entre las mujeres afectadas.

Esto es especialmente importante porque estudios anteriores ya habían indicado que hasta el 75% de las mujeres con incontinencia abandonan o modifican su rutina de ejercicios debido al temor a experimentar episodios de fuga involuntaria de orina.

Estos cambios de estilo de vida conducen inevitablemente a un mayor sedentarismo, lo que a largo plazo incrementa el riesgo de enfermedades cardiovasculares.

¿Por qué la incontinencia urinaria afecta el riesgo cardiovascular?

La citada investigación mostró que las mujeres con incontinencia tienen una probabilidad significativamente mayor de padecer factores de riesgo cardiovascular, como hipertensión arterial, diabetes tipo 2, colesterol elevado, e incluso complicaciones graves como accidentes cerebrovasculares y necesidad de cirugía cardíaca, como el bypass coronario.

Uno de los posibles mecanismos propuestos por los científicos es que el estrés y la ansiedad asociados a los síntomas de la incontinencia podrían aumentar la actividad del sistema nervioso simpático, contribuyendo a un mayor estrés cardiovascular.

Además, al reducir la actividad física para evitar situaciones incómodas, estas mujeres pierden beneficios importantes relacionados con el ejercicio regular, como un mejor control del peso, presión arterial más saludable y niveles más bajos de colesterol.

Recomendaciones para la práctica clínica

Dada esta clara asociación entre la incontinencia urinaria y un aumento del riesgo cardiovascular, los investigadores recomiendan que se realice un cribado rutinario de esta condición entre mujeres adultas. Asimismo, sugieren que aquellas mujeres diagnosticadas con incontinencia reciban un seguimiento más estrecho y específico orientado a prevenir complicaciones cardíacas.

Es fundamental que los profesionales de la salud ofrezcan estrategias para manejar esta condición, incluyendo ejercicios específicos para fortalecer el suelo pélvico, asesoría sobre estilo de vida saludable, y en ciertos casos, tratamientos médicos o quirúrgicos efectivos para disminuir los síntomas y facilitar la adopción de un estilo de vida más activo.

¿Qué se puede hacer para prevenir y tratar la incontinencia urinaria?

La intervención temprana es clave. Iniciar ejercicios de fortalecimiento del suelo pélvico y adoptar hábitos saludables, como mantener un peso adecuado y evitar sustancias irritantes para la vejiga, podrían reducir el riesgo de desarrollar incontinencia y, por ende, complicaciones cardiovasculares a largo plazo.

Finalmente, es crucial abordar este tema sin tabúes, promoviendo consultas médicas tempranas ante los primeros síntomas. Esta perspectiva integral podría cambiar significativamente el pronóstico y la calidad de vida de muchas mujeres afectadas por la incontinencia urinaria.

Referencias

VanWiel LL, Carr LJ, Bond DS, Wu Y, Tunitsky-Bitton E, Tulikangas P, Steinberg AC, Whitaker KM. Associations of urinary incontinence, physical activity and cardiovascular disease risk among women in the United States. Prev Med. 2025 May;194:108277. doi: 10.1016/j.ypmed.2025.108277. Epub 2025 Apr 3. PMID: 40187659.

En Vitónica | Encogimientos abdominales después del parto: así impactan en la diástasis abdominal

Imágenes | Freepik, 8photo (Freepik)

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La noticia Más de la mitad de las mujeres tienen problemas para que no se le escape el pis, y eso puede estar asociado a problemas cardiovasculares fue publicada originalmente en Vitónica por Joaquín Vico Plaza .