«Impacto limitado», nucleares y los «ultrarricos de las energéticas»: las nueve sentencias de Pedro Sánchez sobre el gran apagón

El presidente Pedro Sánchez llegó al Congreso para informar sobre el gran apagón que sufrió casi la totalidad del país el pasado 28 de abril y el aumento del gasto en defensa. Y, sobre el primer asunto, poca novedad aportó salvo reafirmar las líneas generales del relato que ha defendido Moncloa desde aquella fecha : no concretar la causa del mismo , defensa de las renovables y ataque directo a la nuclear y las operadores privados. Las principales sentencias de Sánchez en su intervención sobre asunto han sido las siguientes. El presidente comenzó su intervención sacando pecho de la rápida reacción y recuperación ante el gran apagón, pero centró su discurso en la reacción cívica. El trabajo de todos, la disminución de la delincuencia o los accidentes de tráfico, fueron algunos de los hechos que destacó. En términos económicos, explicó Sánchez, que lo cifró en algo más de 400 millones de euros, y que estimó que el consumó se recuperó y compensó en los días posteriores. Si alguien esperaba alguna novedad en este asunto, se vio decepcionado. No pronunció Sánchez la palabra «ciberataque», pero siguió sin despejar las principales incógnitas. Aseguró que no quería precipitarse, que estaban analizando todo y que esta era su «prioridad», para pedir «responsabilidades». Antes las informaciones que apuntan a que el gran apagón pudo deberse a un desequilibrio producido por el papel de las renovables en el mix energético, Sánchez rechazó esa posibilidad y aprovechó para defender estas energías y conducir sus ataques contra la nuclear. En un argumentario habitual del Ejecutivo, Sánchez calificó su argumentación energética en la ciencia, aunque tampoco entró en detalles. Sánchez mantuvo su obsesión con la energía nuclear en su discurso. Lo hizo asegurando que él no se cerraba a prorrogar la vida de las centrales nucleares, pero lo vinculaba a tres condiciones: «Tres criterios seguridad ciudadana, seguridad suministro y que lo paguen las empresas y no el contribuyente». Y ahí aprovechó para volver a atacar las energéticas privadas: «Que lo pague el bolsillo de los ultrarricos que presiden las energéticas propietarias de las centrales». También añadió que «ninguna empresa ha pedido la prórroga». Siguiendo con el argumentario aseguró que ningún estudio «serio» defendía que la nuclear fuera necesaria en España, aunque sí podía ocurrir «en otros países» por sus «condiciones climáticas» u otras razones. Insistía el presidente en su defensa de las renovables, tratando de sacar la apuesta de cualquier guerra cultural, ideológica o económica. «El futuro será verde, o no será», repitió un 'leit motiv' que en su boca no es novedoso. También hubo, evidentemente, hueco en su intervención para atacar a la oposición a la que acusó de estar al servicio de los intereses de las energéticas, entre otras, pero también les acusó de, a pesar de haber vivido la tragedia de la dana en Valencia, haber sacado la crisis climática de su agenda.

May 7, 2025 - 09:48
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«Impacto limitado», nucleares y los «ultrarricos de las energéticas»: las nueve sentencias de Pedro Sánchez sobre el gran apagón
El presidente Pedro Sánchez llegó al Congreso para informar sobre el gran apagón que sufrió casi la totalidad del país el pasado 28 de abril y el aumento del gasto en defensa. Y, sobre el primer asunto, poca novedad aportó salvo reafirmar las líneas generales del relato que ha defendido Moncloa desde aquella fecha : no concretar la causa del mismo , defensa de las renovables y ataque directo a la nuclear y las operadores privados. Las principales sentencias de Sánchez en su intervención sobre asunto han sido las siguientes. El presidente comenzó su intervención sacando pecho de la rápida reacción y recuperación ante el gran apagón, pero centró su discurso en la reacción cívica. El trabajo de todos, la disminución de la delincuencia o los accidentes de tráfico, fueron algunos de los hechos que destacó. En términos económicos, explicó Sánchez, que lo cifró en algo más de 400 millones de euros, y que estimó que el consumó se recuperó y compensó en los días posteriores. Si alguien esperaba alguna novedad en este asunto, se vio decepcionado. No pronunció Sánchez la palabra «ciberataque», pero siguió sin despejar las principales incógnitas. Aseguró que no quería precipitarse, que estaban analizando todo y que esta era su «prioridad», para pedir «responsabilidades». Antes las informaciones que apuntan a que el gran apagón pudo deberse a un desequilibrio producido por el papel de las renovables en el mix energético, Sánchez rechazó esa posibilidad y aprovechó para defender estas energías y conducir sus ataques contra la nuclear. En un argumentario habitual del Ejecutivo, Sánchez calificó su argumentación energética en la ciencia, aunque tampoco entró en detalles. Sánchez mantuvo su obsesión con la energía nuclear en su discurso. Lo hizo asegurando que él no se cerraba a prorrogar la vida de las centrales nucleares, pero lo vinculaba a tres condiciones: «Tres criterios seguridad ciudadana, seguridad suministro y que lo paguen las empresas y no el contribuyente». Y ahí aprovechó para volver a atacar las energéticas privadas: «Que lo pague el bolsillo de los ultrarricos que presiden las energéticas propietarias de las centrales». También añadió que «ninguna empresa ha pedido la prórroga». Siguiendo con el argumentario aseguró que ningún estudio «serio» defendía que la nuclear fuera necesaria en España, aunque sí podía ocurrir «en otros países» por sus «condiciones climáticas» u otras razones. Insistía el presidente en su defensa de las renovables, tratando de sacar la apuesta de cualquier guerra cultural, ideológica o económica. «El futuro será verde, o no será», repitió un 'leit motiv' que en su boca no es novedoso. También hubo, evidentemente, hueco en su intervención para atacar a la oposición a la que acusó de estar al servicio de los intereses de las energéticas, entre otras, pero también les acusó de, a pesar de haber vivido la tragedia de la dana en Valencia, haber sacado la crisis climática de su agenda.