Ectomorfo, mesomorfo o endomorfo: ¿Qué significa cada uno y cuál es tu tipo de cuerpo?

El somatotipo o psicología constitucional asocia tres tipos básicos de composición corporal con tres temperamentos diferentes.

May 10, 2025 - 07:20
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Ectomorfo, mesomorfo o endomorfo: ¿Qué significa cada uno y cuál es tu tipo de cuerpo?

En un afán por etiquetarnos permanentemente en España, el somatotipo es una teoría que vuelve a salir a la palestra, y que reduce los estándares corporales a tres grandes clasificaciones. En función de ellos, se establece un tipo de personalidad y necesidades. Una simplificación fácil de reconocer que, sin embargo, está cargada de modelos híbridos que se componen de rasgos mixtos, puesto que cada ser humano es único e intransferible.

También denominada psicología constitucional, esta tendencia nació en 1940 de la mano del psicólogo norteamericano William Herbert Sheldon, que relacionaba los tipos de cuerpos humanos con tipos de temperamentos. Sheldon los denominó según las tres capas germinales del desarrollo embrionario: el endodermo (que se desarrolla dando lugar al tracto intestinal), el mesodermo (que se convierte en músculos, corazón y vasos sanguíneos), y el ectodermo (que posteriormente forma la piel y el sistema nervioso).

1. Cuerpo endomorfo: extrovertidos con facilidad para ganar peso

Los rasgos de personalidad que se asocian con las personas que tienen cuerpo endomorfo tienen que ver con comportamientos extrovertidos, amigables, y afectuosos, con cierta tendencia al egoísmo también.

La complexión que va implícita en esta clasificación es baja estatura, corpulencia y una destacable facilidad para ganar peso pero también masa muscular. La cintura suele ser ancha, y estas personas tienen bastantes dificultades para perder peso. En cuanto a lo más recomendable para ellos, está la práctica de ejercicios de fuerza para controlar los niveles de grasa. Los entrenamientos a intervalos de alta intensidad HIIT están especialmente indicados.

El somatotipo endomorfo suele presentar un metabolismo más lento (de ahí la propensión a acumular grasa por encima de la media). En general, los cuerpos endomorfos son redondeados, de hombros estrechos y caderas anchas, con una estructura ósea grande. Para controlar el peso, nada mejor que disminuir los hidratos de carbono en la dieta, y sustituirlos en gran parte por proteínas.

2. Cuerpo ectomorfo: constitución delgada y personalidad sensible

La segunda clasificación del profesor Sheldon hace referencia a los cuerpos ectomorfos, todo lo contrario a los anteriores: Las personas ectomorfas tienden hacia cuerpos delgados en general, estatura alta, extremidades largas y hombros estrechos. Su metabolismo es muy rápido, por lo que la ingesta no suele provocarles aumento de peso.

Por contra, este grupo suele tener dificultades para ganar masa muscular y definir la musculatura. En estos casos, los expertos recomiendan la práctica de deporte con pesas. En cuanto a la alimentación, ésta debería ser rica en carbohidratos y nutrientes calóricos, para compensar ese metabolismo rápido que las quema con facilidad.

3. Mesomorfos: complexión atlética y espíritu competitivo

La tercera y última categoría es la de los cuerpos mesomorfos, que según su inventor son esos cuerpos bien dotados genéticamente, con cierta facilidad para ganar masa muscular y quemar grasa con facilidad. Cintura estrecha, hombros más anchos y grasa corporal moderada son sus credenciales.

Con un metabolismo eficiente y equilibrado, los mesomorfos suelen ser más deportistas, y para ellos están indicados los entrenamientos que les permitan ganar fuerza muscular y resistencia a base de cardio. Pueden permitirse un pequeño aumento en la ingesta de calorías.

Por lo que se refiere a sus rasgos de personalidad, Sheldon les presuponía altos grados de ansiedad y autoexigencia, espíritu competitivo, fortaleza mental y decisión.

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