Confirman la muerte de Karely, hija de Lupita TikTok, tras apenas unas semanas de vida
La historia de Karely Yamileth, hija de la influencer mexicana Lupita TikTok, terminó de forma trágica la madrugada del 13 de mayo. La bebé, de tan solo tres semanas de vida, falleció en el Hospital Materno Infantil de Nuevo León luego de ser hospitalizada desde el 27 de abril por una sepsis neonatal que deterioró […]

La historia de Karely Yamileth, hija de la influencer mexicana Lupita TikTok, terminó de forma trágica la madrugada del 13 de mayo. La bebé, de tan solo tres semanas de vida, falleció en el Hospital Materno Infantil de Nuevo León luego de ser hospitalizada desde el 27 de abril por una sepsis neonatal que deterioró rápidamente su salud.
Confirman la muerte de Karely, la hija de Lupita TikTok
A pesar de los esfuerzos médicos, Karely sufrió un paro cardíaco y no pudo ser reanimada. Se confirmó que la menor presentaba muerte cerebral, lo que volvió irreversible su condición. La noticia provocó una ola de reacciones en redes sociales, donde muchos usuarios ya habían expresado preocupación por el estado de salud de la bebé y el entorno familiar en el que se encontraba.
Desde su nacimiento, Karely estuvo en el centro de la atención mediática, impulsada por la enorme presencia digital de su madre. Sin embargo, esa visibilidad también encendió alertas: comentarios sobre la exposición de la bebé, la aparente precariedad en los cuidados y el comportamiento errático de algunos adultos cercanos alimentaron la inquietud pública.
Una tragedia con implicaciones legales
Días antes del fallecimiento de Karely, la situación dio un giro aún más grave: Ricardo “N”, el presunto padre de la menor, fue detenido por un delito equiparable a violación. La Fiscalía de Nuevo León ya abrió una investigación formal sobre las circunstancias que rodearon la hospitalización y muerte de la bebé.
Este caso no solo ha evidenciado una tragedia familiar, sino que también ha puesto bajo el foco la necesidad de revisar los protocolos de protección a menores en contextos de alta exposición digital y riesgo social. Mientras continúa el proceso legal, miles de personas se preguntan si se pudo haber hecho algo para evitar este desenlace.