Franco Mastantuono, a los 17 años, pasó de ser una promesa a una realidad. Con un desparpajo poco habitual en un futbolista de su edad, el mediocampista ofensivo de River dejó su huella en la historia del Superclásico con un golazo de tiro libre.

A los 25 minutos del primer tiempo, el volante se hizo cargo de la ejecución de un tiro libre impecable, con la fuerza y comba justa para que la pelota se coloque en el ángulo del arco que defendió Agustín Marchesín.

El instante previo a hacer historia en el Superclásico

Luego de una falta de Marcos Rojo a Sebastián Driussi, el árbitro Nicolás Ramírez sancionó una falta a 30 metros del arco de Boca. El que se hizo cargo de la ejecución fue Franco Mastantuono, quien antes se tomó unos segundos para respirar, observó a la tribuna, picó la pelota y planificó lo que terminó siendo un gol de antología.

En un video que circuló en las redes sociales de River, el joven de 17 años se mostró muy reflexivo antes de ejecutar el tiro libre. Según se observa, mira a ambos costados de las tribunas colmadas de gente, hace rebotar la pelota contra el césped, le da un beso al esférico y recibe un consejo de Germán Pezzella.

Con una personalidad propia de un deportista experimentado, Mastantuono demostró no solo estar a la altura de la envergadura de un River-Boca, sino que se perfila para ser convocado por Lionel Scaloni para los próximos compromisos con la selección argentina.