Red Eléctrica inyecta más nuclear y gas para evitar un nuevo caos en el puente de mayo
El sistema colapsó cuando las energías renovables tiraban de la generación

Red Eléctrica está en alerta tras el apagón. La empresa encargada de la gestión eléctrica en España aún está buscando la causa que provocó el mayor shock energético de la historia de nuestro país.
Aunque tanto el Gobierno como el gestor parecen tener indicios de lo ocurrido —y advierten que “es pronto para conocer todos los detalles”—, lo cierto es que desde Moncloa y desde Red Eléctrica se trabaja día y noche para evitar que esta situación vuelva a repetirse.
Una de las principales medidas adoptadas por el gestor ha sido la incorporación de tecnologías denominadas síncronas al mix energético en los últimos días. Estas tecnologías incluyen el ciclo combinado (impulsado por gas) y la energía nuclear. Se trata de fuentes en las que el rotor gira a una velocidad constante, conocida como velocidad síncrona, a diferencia de los generadores asíncronos, donde la velocidad del rotor no coincide con la velocidad síncrona del campo magnético del estator.
Así, en caso de apagón o de una incidencia como la del pasado lunes, las tecnologías síncronas resultan mucho más eficaces y útiles para reactivar un sistema eléctrico caído. Precisamente, estas centrales operaban casi al mínimo cuando se produjo el apagón.
En el momento en que el sistema energético colapsó, las energías renovables lideraban la generación. Los parques fotovoltaicos aportaban hasta un 60 % del total de electricidad, mientras que el viento era la segunda fuente más utilizada, con un 12 %.
Durante las horas posteriores al apagón se abrió el debate sobre el papel de las renovables en el mix energético, como ya apuntaban algunos sectores. Tanto el Gobierno como Red Eléctrica han insistido en señalar que las energías renovables no fueron responsables del caos eléctrico vivido en España.
En el lado opuesto, las energías síncronas tenían un papel marginal en el momento del apagón. El ciclo combinado, tradicionalmente uno de los pilares del mix energético nacional, apenas representaba el 3,37 % de la generación, mientras que la nuclear rozaba el 11 %. Tras el incidente, el sistema dependía de estas plantas —fundamentales para proporcionar electricidad de forma inmediata—, pero se encontraron con una escasa aportación y con las interconexiones con Portugal y Francia limitadas, a fin de evitar consecuencias mayores. El resultado fue que el sistema nacional estuvo fuera de servicio durante unos 37 minutos.
Con la lección aprendida, Red Eléctrica ha otorgado mayor protagonismo al ciclo combinado y a la energía nuclear. Por ejemplo, en determinados momentos del día, el ciclo combinado llegó a representar hasta el 45 % de la generación. No obstante, las renovables también mantuvieron una presencia destacada y lideraron la producción en varias franjas horarias.
Este miércoles, la situación volvió a ser similar: los ciclos combinados aportaron un 13 % del total, mientras que la nuclear osciló en torno al 4 %.
En alerta para los festivos
Fuentes del sector apuntan que esta tónica se repetirá en los próximos días. Los ciclos combinados y la energía nuclear “tendrán un peso representativo” debido a que, este fin de semana, habrá un puente festivo en España, lo que provocará una fuerte caída de la demanda.
Con un exceso de producción previsto, el sector eléctrico reconoce su “inquietud” ante una situación que podría “parecerse a la del pasado lunes”. “Vamos a ver cómo se comporta la red eléctrica y el mercado mayorista con las horas más baratas de la historia. Va a ser una verdadera prueba de fuego”, advierten.
Y es que la gran cantidad de electricidad que se generará estos días contrasta con una demanda muy baja. Millones de españoles no acudirán a sus puestos de trabajo, las oficinas estarán cerradas y lo mismo ocurrirá en muchas fábricas. Además, en los hogares se consumirá menos, ya que las personas pasarán más tiempo fuera de casa.
Todo esto se refleja en el precio de la electricidad. El megavatio hora marcó este jueves un precio negativo histórico y, durante la jornada, llegó a hundirse hasta los diez euros negativos. Es decir, los generadores tuvieron que pagar por verter electricidad al sistema.
Esto se debe, principalmente, a que hay una enorme cantidad de electricidad prevista para su generación, y los productores están obligados a venderla. Todo apunta a que el precio mayorista seguirá muy bajo en los próximos días, lo que pone de manifiesto el grave problema estructural que arrastran tanto el sistema eléctrico español como el europeo.