Polémica arbitral antes de la final: el Madrid pide que se cambien los colegiados por estar "incapacitados"

La polémica está servida antes de la final de Copa del Rey entre Barça y Real Madrid: la rueda de prensa de los árbitros del partido, Ricardo de Burgos Bengoechea y Pablo González Fuertes, en la que ambos se han referido a los vídeos sobre los trencillas de Real Madrid TV, han causado indignación en el Real Madrid, cuyo deseo es que se cambie el equipo arbitral del partido al considerar que ambos están "incapacitados" para dirigir el encuentro.

Así lo han señalado fuentes oficiales del club madridista, que consideran que tanto De Burgos Bengoechea, árbitro principal de campo, y González Fuertes, colegiado encargado del VAR, quedan incapacitados para dirigir la final tras sus polémicas declaraciones. Además, la entidad apunta a un conflicto de intereses tras escuchar sus palabras.

El Real Madrid, del mismo modo, no entiende cómo la RFEF ha permitido este tipo de declaraciones y esperaba una respuesta que invalidase a los dos colegiados para dirigir el partido. La RFEF, por su parte, estaría esperando a que fuese el club el que solicitase el cambio en la designación arbitral.

Esta reacción de la entidad merengue llega después de que Ricardo de Burgos Bengoechea rompiese a llorar en su comparecencia, lamentando entre lágrimas "la repercusión de los vídeos de Real Madrid TV" contra su estamento y criticando la reacción que provocan en la sociedad, sufrida por su propio hijo.

"Cuando un hijo tuyo va al colegio y le dicen que su padre es un 'ladrón' y llega a casa llorando, eso es muy jodido. Lo que hago en mi caso es intentar educar a mi hijo para decirle que su padre es honrado, que se equivoca, como un deportista más. Es muy jodido, no se lo deseo a nadie. El día que me vaya de aquí, quiero que mi hijo esté orgulloso de lo que fue su padre y lo que es el arbitraje, que nos ha dado muchos valores", se sinceró el colegiado vasco, protagonista, junto a González Fuertes, de los últimos vídeos del canal madridista.

El árbitro del VAR de la final, por su parte, ha asegurado que en el colectivo arbitral "hay más unión que nunca", y ha desvelado que van a tener "que empezar a tomar medidas mucho más serias de las que se están tomando". "No vamos a seguir permitiendo que pase lo que está pasando. En pocas fechas tendréis noticias sobre lo que va a venir. Pero la plantilla del arbitraje español y el CTA va a hacer historia, porque no vamos a seguir aguantando lo que estamos aguantando", ha afirmado.