Parece ensaladilla rusa pero son garbanzos: la receta cargada de proteínas que puedes preparar en minutos
Se trata de una preparación con la misma base de la receta tradicional, pero en lugar de patatas se utilizan garbanzos.

Cuando suben las temperaturas, uno de los de los platos estrella es la ensaladilla rusa. Muy fresca y acompañada de unos buenos picos de pan, es un entrante perfecto para triunfar frente a nuestros invitados. Además de su delicioso sabor, es una receta muy fácil y rápida de preparar. Hoy te traemos una variante de esta delicia, pero mucho más proteica que la tradicional: debes sustituir las patatas por garbanzos cocidos. Aquí te contamos como prepararla en menos de 10 minutos.
Una ensalada fuente de proteínas vegetales
Al tener como base a los garbanzos, se convierte en una preparación cargada de proteínas vegetales de buena calidad. Estas legumbres también son ricas en minerales como magnesio y hierro, así como en vitaminas del grupo B y fibra. Esto lo hace una excelente opción para incluirla en nuestras preparaciones diarias.
¿Cómo preparar una ensaladilla rusa con garbanzos?
Cuando se trata de querer comer sano y delicioso sin pasar mucho tiempo en la cocina, esta es una receta ideal. Solo te tomará el tiempo de cocer los huevos y picar las verduras y aceitunas.
Ingredientes
- 400 gramos de garbanzos cocidos.
- 1 cebolla morada pequeña.
- ½ pimiento rojo.
- ½ pimiento verde.
- 50 gramos de aceitunas verdes.
- 5 huevos.
- 1 lata grande de atún en aceite de oliva.
- 1 cucharada de zumo de limón.
- 4 rebanadas de pan de cereales.
- Sal.
Elaboración de la ensaladilla rusa con garbanzos
- Escurre los garbanzos: Colócalos en un colador, acláralos en agua fría y déjalos escurrir muy bien.
- Pica las verduras: Pela la cebolla, limpia los pimientos eliminando los filamentos y las semillas, y pícalos finamente. Corta las aceitunas a la mitad.
- Cuece los huevos: Colócalos en un cazo con agua y sal. Cuécelos durante 10 minutos. Retíralos del fuego y refréscalos en agua fría para detener la cocción. Cuando estén fríos, pélalos con cuidado y pícalos en daditos.
- Alista el atún: Escúrrelo de la conserva y desmenúzalo muy bien.
- Prepara la mayonesa: Agrega un huevo en el vaso de la batidora, vierte todo el aceite de oliva, sal y vinagre. Mézclalo hasta que empiece a emulsionar y se consiga un líquido un poco espeso pero con textura ligera.
- Mezcla todos los ingredientes: En un cuenco amplio, pon todos los garbanzos escurridos y aplástalos ligeramente con ayuda de un tenedor. Agrega la cebolla, las aceitunas, los pimientos, los huevos y el atún desmenuzado. Añade sal al gusto y remueve muy bien con una espátula hasta que los ingredientes se mezclen de manera uniforme.
- Dejar reposar: Tapa el cuenco con papel film transparente de cocina y deja la ensaladilla en la nevera durante unos 30 minutos. Esto permite que los sabores se asienten y se enfríe ligeramente para disfrutarla al máximo.
Variante para la ensaladilla de garbanzos
Esta versión de ensaladilla rusa con garbanzos también puedes prepararla con algunos otros ingredientes dependiendo del tipo de alimentación que sueles llevar. Aquí te dejamos algunas ideas:
- Pueden enriquecerla con unas hojas de lechuga cortadas finamente. Le aporta un delicioso toque crujiente a la preparación.
- SI quieres que la ensalada sea más ligera, puedes prepararla con mayonesa de yogur.
- También puedes añadirle daditos de aguacate, una zanahoria rallada o judías verde. En el último caso es recomendable escaldarlas durante un par de minutos en un cazo con agua para que queden al dente.
- Para sustituir el atún en conserva, puedes irte por trocitos de merluza cocida, salmón ahumado, langostinos, gambas o palitos de surimi. Incluso, si tienes restos de pollo asado, no dudes en incorporarlos. Cual sea que escojas debe estar muy bien desmenuzado.