Merz se convierte en nuevo canciller de Alemania tras sufrir una histórica derrota durante la primera votación en el Parlamento

El líder de la CDU había perdido en la mañana del martes la primera opción de liderar el Gobierno.

May 6, 2025 - 17:30
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Merz se convierte en nuevo canciller de Alemania tras sufrir una histórica derrota durante la primera votación en el Parlamento

Friedrich Merz ya es canciller. El líder de la CDU ha sacado adelante la segunda votación en el Bundestag con 325 votos a favor, horas después de perder el primer intento en un evento histórico para Alemania: nunca un candidato había sido rechazado de primeras por el Parlamento. Rápidamente la Cámara convocó un segundo intento para evitar que la crisis fuera a mayores y los conservadores vuelven de esta forma a encabezar el Gobierno (no lo hacían desde los tiempos de Angela Merkel). Merz sustituye a Olaf Scholz al frente del motor de la Unión Europea.

Esta victoria se da después de que perdiera la primera votación, por la mañana del martes, contra pronóstico al no sumar los 316 votos necesarios para liderar el Gobierno. Es la primera vez en la historia del país que sucede algo así. El jefe conservador se había quedado en 310 síes en el Bundestag, una cuenta que no salió para nada teniendo en cuenta que la CDU y el SPD, que acordaron formar una nueva gran coalición, suman 328 diputados en total, por lo que se le han 'cayeron' 18 apoyos en las últimas horas, pues parecía que el respaldo estaba asegurado.

Hay que tener en cuenta que el voto en estos casos es secreto, así que las fugas no parece que se vayan a conocer abiertamente, y mucho menos después del sí de la Cámara en segunda votación. Las primeras sospechas, eso sí, apuntaron a que los que se cayeron fueron votos de los socialdemócratas, precisamente descontentos con el apoyo de su partido casi sin contrapartidas a los conservadores.

No tardaron, después de la incertidumbre, en llegar las reacciones. "Contigo se incorpora a la Cancillería un amigo de probada eficacia y experto en Europa. Trabajaremos juntos por una Europa fuerte y más competitiva", reaccionó la presidenta de la Comisión Europea y compañera de partido de Merz, Ursula von der Leyen. "Su liderazgo, su determinación y su compromiso fortalecerán a Alemania y a Europa", añadió la presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola.

También recibió el 'calor' del presidente del Consejo Europeo, Antonio Costa, pero uno de los más esperados fue el de Emmanuel Macron: "Ahora nos toca a nosotros hacer que el motor franco-alemán y la conciencia franco-alemana sean más fuertes que nunca. Depende de nosotros acelerar nuestra agenda europea de soberanía, seguridad y competitividad. Para los franceses, los alemanes y todos los europeos", escribió en las redes sociales el presidente francés.

De este modo, la CDU vuelve a liderar un Ejecutivo tras la salida de Merkel y tras una legislatura convulsa con los socialdemócratas en el poder, pero la nueva gran coalición parece que arranca con dudas. La inmigración, la economía, una nueva revolución industrial, un papel más propositivo en la UE o la 'convivencia' de esta nueva gran coalición son temas que están en la agenda de Merz, aunque tendrá que esperar para empezar a aplicarla. La gestión migratoria, de hecho, es clave. "Nadie quiere cerrar nuestras fronteras", sostuvo el líder conservador tras las elecciones, pero sí pretende acelerar los retornos o endurecer las condiciones de asilo, además de poner el foco en los inmigrantes irregulares o quienes hayan delinquido, en línea además con el pacto migratorio europeo. Ahí Alemania también tendrá mucho que decir: se prevé su entrada en vigor en 2026, pero ya hay países haciendo presión, entre ellos España, para que se adelante su implantación a este mismo año. Si Berlín empuja en este sentido, todo se puede acelerar más.

Las tornas también han cambiado en el tema económico: en la crisis del 2008 Alemania fue el malo de la película, abogando por políticas de austeridad que castigaron al sur de Europa. Ahora es el país germano el que afronta una profunda crisis, y ha entrado en su tercer año consecutivo en recesión. Además, el Bundesbank ha advertido de la situación de "obstinado estancamiento" en el que se encuentra la economía de Alemania, cuyo PIB apenas ha crecido desde 2028, como consecuencia de vientos en contra cíclicos, pero sobre todo a causa de factores estructurales, por lo que no se puede descartar un tercer ejercicio consecutivo sin crecimiento.

Asimismo, Alemania tiene que afrontar una reconversión industrial que, a ojos de los expertos, ya tuvo que iniciarse en la época de Angela Merkel, en la que al final se acabaron reforzando las dependencias, como la energética con Rusia. Así, Merz busca garantizar un suministro estable mediante la construcción de nuevas plantas de gas y la posible reapertura de centrales nucleares, desafiando así algunas políticas medioambientales recientes. Asimismo, Merz se opone a la prohibición de los motores de combustión a partir de 2035, con el fin de proteger la industria automotriz.

Otro aspecto central de su plan es la reestructuración del sistema de prestaciones sociales, con el objetivo de restringir las ayudas a quienes no participen activamente en la búsqueda de empleo y reducir los subsidios destinados a refugiados y desempleados de larga duración. Asimismo, ha propuesto una flexibilización del límite constitucional de endeudamiento para facilitar inversiones clave sin poner en riesgo la estabilidad fiscal. Con estas medidas, Merz pretende recuperar el liderazgo económico de Alemania pero mirando más hacia dentro: adiós a las dependencias de Rusia en energía y de China en el comercio y la industria.