La reacción de los jugadores del Leganés: "Están indignados, enfadados"
El triunfo del Real Madrid en el Santiago Bernabéu dejó varias acciones que han dado de qué hablar.

La victoria del Real Madrid sobre el Leganés en la 29ª jornada liguera no estuvo exenta de polémica. Se adelantaron de penalti los de Ancelotti, pero los pepineros remontaron en apenas ocho minutos antes de marcharse al descanso. En la segunda parte, los blancos le dieron la vuelta a la tortilla gracias a Jude Bellingham y a un Kylian Mbappé cuyo lanzamiento de falta ha dado mucho de qué hablar, dada la acción previa.
Después de una primera media hora sin acontecimientos notables, Arda Güler cayó al suelo en el área al intentar recibir un pase de Bellingham, quedando atrapado entre las piernas de Óscar Rodríguez. El árbitro no dudó en señalar penalti, y desde los once metros, Mbappé la picó 'a lo Panenka' para adelantar a los locales.
El Leganés anotó dos goles rápidos para ponerse por delante antes del paso por los vestuarios. Al regresar, el dorsal '5' del Madrid puso las tablas, e inmediatamente después protagonizó otra de las jugadas más comentadas. En un contragolpe pepinero, Diego García cayó ante Lunin, y reclamó la pena máxima por el ligero contacto ejercido por Bellingham con el brazo. No sancionó González Fuertes.
La acción más discutida es probablemente la que dio paso al tercer gol del segundo clasificado en LaLiga. Rodrygo corría por el centro, y Renato Tapia se lanzó por detrás para rebañar el esférico. A pesar de las quejas del Leganés, el colegiado pitó falta y mostró al jugador peruano la tarjeta amarilla, ya que antes de tocar el balón, derribó al extremo brasileño.
Al ser preguntado en rueda de prensa por las acciones más polémicas, Borja Jiménez, entrenador del Leganés, no quiso meterse en problemas, pero sí desveló cómo le habían sentado las decisiones arbitrales a sus futbolistas: "Están indignados, enfadados. Hemos tenido la ocasión de hacer el 2-3. Estaban muy molestos", reconoció.