La inflación se modera al 2,2% en abril por la bajada del gas, la luz y las gasolinas y marca su menor nivel desde octubre
El IPC subyacente repunta cuatro décimas hasta el 2,4%, según los datos avanzados por el INE.

La evolución del gas, la luz y las gasolinas ha contenido la subida de los precios en el mes de abril. Según los datos provisionales adelantados este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), la inflación en tasa interanual ha caído levemente este mes con respecto a la marca anotada en marzo, lo que no quiere decir que los precios hayan bajado, sino que han ralentizado ligeramente su subida. La primera estimación del INE apunta a que abril cierra con una tasa de variación interanual del IPC del 2,2%, su nivel más bajo desde octubre. La leve caída, debida fundamentalmente al abaratamiento de la energía con respecto al mismo mes del año pasado, contrasta con el avance del IPC subyacente, que rompe la tendencia a la baja de los últimos meses y sube hasta el 2,4%.
La inflación se ha moderado en abril por segundo mes consecutivo, después de que en marzo se desplomara siete décimas pasando del 3% anotado en febrero a una tasa interanual del 2,3%. El descenso de este último mes ha sido mucho menos abultado, de apenas una décima. Sin embargo, ha permitido mantener la senda de la desaceleración y acercarse al objetivo del 2% al que el Banco Central Europeo (BCE) pretende devolver los precios. A falta de que el INE confirme a mediados de mes el dato provisional avanzado este martes, el dato del 2,2% registrado en abril sería el nivel de inflación más bajo desde el 1,8% anotado en octubre del año pasado.
Desde el Ministerio de Economía valoran positivamente el comportamiento de los precios. "España sigue haciendo compatible el mayor crecimiento económico entre las economías desarrolladas con una inflación moderada, a pesar de la elevada incertidumbre del entorno internacional", apuntan fuentes del departamento de Carlos Cuerpo. "Esto está permitiendo que estos excelentes datos macroeconómicos se estén trasladando también a los datos micro, mejorando la situación y perspectivas económicas de nuestras empresas y familias", añaden.
La moderación del IPC en este último mes se ha debido principalmente al descenso en los precios del gas, frente a la subida registrada el año pasado por las mismas fechas, y a la bajada en los precios de la electricidad, mayor que la de abril de 2024. El INE atribuye también la desaceleración de los precios al comportamiento de los carburantes para vehículos, cuyos precios han bajado con respecto a hace un año. Según los datos del boletín petrolero de la Unión Europea, en la última semana el precio medio del diésel y la gasolina ha rondado en España los 1,39 y 1,48 euros por litro respectivamente, mientras que el año pasado por las mismas fechas superaban los 1,5 y 1,6 euros.
Habrá que esperar hasta mediados de mayo para conocer la evolución exacta de estos y otros productos, como los alimentos, cuyo IPC repuntó en marzo por segundo mes consecutivo hasta el 2,4%. Por el momento lo que sí se sabe es que la moderación de los precios se ha concentrado en los productos energéticos. De hecho, al descontar del cálculo —debido a su alta volatilidad— estos elementos y los alimentos no elaborados, se observa una importante subida de la inflación subyacente en el mes de abril hasta una tasa interanual del 2,4%, cuatro décimas por encima de la de marzo.
Este indicador, que da cuenta de en qué medida la subida de los precios se ha contagiado al conjunto de la economía, revierte así las bajadas de los últimos meses, situándose por encima desde octubre del año pasado por encima del índice general y volviendo al nivel en el que inició 2025. En términos mensuales, la inflación subyacente ha crecido un 1% con respecto a marzo, mientras que el índice general ha avanzado un 0,6%.
El Banco Central Europeo vigila de cerca la evolución de la inflación en el conjunto de países de la eurozona, especialmente ante la situación de incertidumbre provocada por las tensiones comerciales con Estados Unidos y el temor a que pueda desencadenarse una nueva crisis de precios. Por el momento, la institución presidida por Christine Lagarde no ha interrumpido la bajada de los tipos de interés, con la que pretende dar oxígeno a la economía.