Estas son la s señales que indican que deberías dejar de beber café
La clave está en la cantidad diaria que ingerimos, y que no debería ser de más de cuatro tazas. En cualquier caso, hay síntomas inequívocos que nos avisan de que no nos está sentando bien.

El café es una de las bebidas más consumidas en el mundo, con una gran aceptación en España, donde el café del desayuno y el de después de comer es todo un ritual insoslayable en la mayoría de los casos. Y sí, se trata de una bebida con ciertos beneficios para la salud, entre los que destaca la mejora de la memoria y la 'limpieza' de las arterias para evitar su obstrucción, así como su efecto en la termogénesis y su aceleración del metabolismo basal.
Como casi todo en nutrición, los beneficios de los alimentos van acompañados de un 'pero'. En este caso, el café puede contribuir a mejorar algunos aspectos de la salud (siempre y cuando no existan enfermedades de base que contraindiquen su consumo), pero moderando la cantidad. Según la Organización Mundial de la Salud, esa cantidad no debe superar los 400 mg. al día en las personas sanas (más o menos cuatro tazas) y siempre debe tomarse sin azúcar.
Los efectos inequívocos de que debemos dejar de tomar café
El café contiene cafeína, un excitante que puede alterar nuestra rutina del sueño, especialmente si lo tomamos en las horas posteriores a la comida. Incluso, su efecto dura tanto tiempo en el organismo, que podría afectarnos aunque lo tomemos a primera hora de la mañana (en caso de que nos siente mal, claro).
Café e insomnio, una peligrosa relación
Según explica la nutricionista Gaia Gottardi a Gazzetta, un medio de comunicación italiano, "la hipersensibilidad a la cafeína podría desencadenar problemas de insomnio, incluso aunque lo hubiéramos tomado por la mañana y solo uno".
Aunque las reacciones a la cafeína van a variar de unas personas a otras, lo cierto es que el tiempo de metabolización de esta sustancia puede llegar a alcanzar las 16 horas, por lo que aunque hayamos tomado el café por la mañana, si tenemos esa reacción negativa, nos va a durar hasta la hora de irnos a dormir. Como explica la experta, "si la cafeína continúa estando presente al irnos a dormir, se va a unir a los receptores de adenosina (molécula que favorece el sueño) del cerebro, bloqueando su acción relajante".
Si sientes palpitaciones con el café, quizá deberías dejarlo
La doctora Gottardi habla de un segundo síntoma, como son las palpitaciones, después de haber tomado cafeína en exceso. "Esta sustancia presente en el café en gran medida genera excitabilidad cardíaca; dependiendo del genotipo de cada persona, puede aumentar o no la presión arterial. También puede crecer la liberación de adrenalina, una sustancia que acelera el ritmo cardíaco, lo que en individuos sensibles o en presencia de dosis altas, puede desencadenar palpitaciones".
Cuando un exceso de cafeína provoca crisis de ansiedad
El tercer signo de alarma que avisa de que podríamos estar consumiendo más café del que nuestro organismo soporta, o que por alguna causa aunque tomemos poca cantidad nos está sentando mal, es el hecho de que generemos demasiado cortisol.
El cortisol es la denominada hormona del estrés, que se genera en un área del cerebro que es la glándula pituitaria. Por su capacidad estimulante, la cafeína puede provocar que el estrés se dispare, que no esté controlado. Según explica la doctora, "existe una predisposición genética que nos puede hacer más sensibles a estos efectos, con síntomas como temblores y contracturas musculares. En los casos más extremos, el consumo excesivo de café puede provocar auténticas crisis de ansiedad".
Las consecuencias del café en el sistema digestivo
Aunque los efectos neurológicos del café son muy significativos, también puede tener repercusiones indeseables en el aparato digestivo, eso sí, en casos muy concretos. Uno de ellos es cuando existe reflujo, circunstancia que recomienda no tomar café en ningún caso. Tampoco es buena idea en personas diagnosticadas con el síndrome del intestino irritable. La causa del problema está en la liberación de ácido clorhídrico en el estómago de esta bebida tan popular y consumida en nuestro país.
En los cuatro casos mencionados, siempre será mejor consultar con un médico que nos dé las pautas a seguir, puesto que si nuestro organismo está habituado a beber mucho café y lo dejamos de manera brusca, podría haber efectos secundarios indeseables.
Referencias
Daniel Borota, Elizabeth Murray, Gizem Keceli, Allen Chang, Joseph M. Watabe, Maria Ly, John P. Toscano, Michael A. Yassa. 'Post-study caffeine administration enhances memory consolidation in humans'. Nature Neuroscience. Consultado online en https://www.nature.com/articles/nn.3623