El precio de las casas subió en España más del doble que en Europa y acabó 2024 con el cuarto mayor alza

Los pisos se encarecieron un 11,4%, frente al aumento medio del 4,2% anotado en el conjunto de la eurozona.

Abr 8, 2025 - 23:01
 0
El precio de las casas subió en España más del doble que en Europa y acabó 2024 con el cuarto mayor alza

El de la vivienda es un problema compartido en buena parte de Europa, pero la subida de los precios está castigando especialmente a España, donde el incremento duplica la media comunitaria. Según los datos publicados por Eurostat este martes, 2024 terminó con un encarecimiento de los pisos a nivel nacional del 11,4% con respecto a finales de 2023. Se trata del cuarto mayor alza registrado en el Viejo Continente. El panorama dista de la evolución de precios observada en las otras grandes economías europeas, donde los incrementos no alcanzaron el 5% y en Francia incluso llegaron a bajar.

El ritmo de subida del precio de la vivienda se aceleró en el último trimestre del año, según los datos de Eurostat. Tras elevarse entre un 6,4% y un 8,3% interanual en los tres trimestres anteriores, el encarecimiento de los pisos se disparó en la recta final de 2024 hasta registrar una subida de dos dígitos sin precedentes para España en la serie estadística europea, es decir, desde al menos 2010. Con respecto al trimestre anterior, los precios subieron a nivel nacional un 1,8%, frente al alza media del 0,6% anotada en la eurozona y del 0,8% en el conjunto de la Unión Europea.

También en términos anuales el incremento registrado en España supera con creces las medias. De hecho, a lo largo del año pasado los pisos en el país ibérico se encarecieron más del doble que en el conjunto de la UE. Con respecto al mismo periodo de 2023, los precios a nivel europeo crecieron un 4,9% en el cuarto trimestre, un punto por encima de la marca anotada entre julio y septiembre. En el caso de la eurozona, el aumento fue del 4,2%, lo que supuso —igual que a nivel comunitario— la mayor subida desde el tercer trimestre de 2022.

De este modo, el precio de la vivienda retomó el año pasado su subida en Europa, después de dos años de ligera caída y estabilización y de haber experimentado un vertiginoso incremento entre el primer trimestre de 2015 y el tercero de 2022. No obstante, la evolución no ha sido igual en todos los países. Mientras las casas se encarecieron un 11,4% en España en los últimos tres meses de 2024 en comparación con la situación un año antes, en las otras grandes economías europeas los precios crecieron un 4,5% en Italia, un 1,9% en Alemania y en Francia incluso bajaron un 1,9%.

Estas disparidades en el comportamiento de los precios entre estos cuatro países no son nuevas. En Alemania, el importe de los pisos tocó techo en 2022, después de sufrir un alza del 97% en doce años. A partir de ese momento, se produjo una moderación. Algo similar ha ocurrido en Francia, aunque sin llegar a alcanzar la cima germana. Al norte de los Pirineos, los inmuebles se encarecieron un 36% entre 2010 y 2022, de ahí que actualmente el nivel de precios sea equivalente al español pese a acumular trimestres en negativo. En cambio, el punto de partida de España era más bajo, ya que el hundimiento durante la crisis fue mucho más abultado.

Más allá de las cuatro grandes economías europeas, el alza registrado en España en el cuarto trimestre se coló entre las más pronunciadas del Viejo Continente. Solo lo superaron la subida del 18,3% observada en Bulgaria, del 13% en Hungría y del 11,6% en Portugal. En el extremo opuesto, el coste de comprarse una casa creció menos de un 2% en Luxemburgo y Austria. Únicamente dos países escaparon de los incrementos: Francia y Finlandia.

Cabe tener en cuenta que la fórmula de la compra tiene tradicionalmente más peso en los países mediterráneos que en Centroeuropa. Los datos de Eurostat reflejan que el 75,3% de la población española vive en viviendas en propiedad, frente a un 24,7% que se decanta por el alquiler, unos porcentajes similares a los de Italia (75,2% y 24,8% respectivamente). En cambio, en Francia y Alemania, la proporción de propietarios desciende hasta el 63,1% y el 46,6%, ganando peso los inquilinos.