El nuevo fraude para poder entrar a las Zonas de Bajas Emisiones que pone en alerta a la Guardia Civil
Los agentes han informado sobre varios grupos que se dedican a la falsificación de documentos para obtener las etiquetas de la Dirección General de Tráfico (DGT).

Las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) son una realidad para cientos de personas en España. De hecho, son muchos los españoles que se enfrentan a diario a estas áreas con restricciones de circulación. A día de hoy existen 54 que están en funcionamiento, pero hasta 95 ciudades han aprobado su puesta en marcha.
Como bien es sabido, tan solo una serie de vehículos tienen permitido entrar en este tipo de áreas. De hecho, son los coches que no tienen etiqueta de la DGT los que tienen vetado el acceso a las ZBE. Sin embargo, poco a poco se han ido extendiendo más limitaciones a automóviles con etiquetas B y C.
Ante esta situación, se ha popularizado un nuevo timo que ha puesto en alerta a los agentes. Y es que la Guardia Civil ha informado de un grupo de criminales que se dedicaban a obtener la etiqueta medioambiental de forma fraudulenta y que los coches pudieran entrar en estas zonas con restricciones.
El timo de las etiquetas medioambientales
Los agentes de la Guardia Civil han desarticulado una banda que se dedicaba a falsificar documentos para poder obtener la etiqueta medioambiental para los vehículo. Este grupo se dedicaba a cobrar una tarifa a los propietarios de coches que no tenían acceso a las ZBE.
El precio de la tarifa era de entre 300 a 500 euros y este trámite fraudulento se hacía en las Jefaturas Provinciales de Tráfico de Guadalajara, Madrid, Alcalá de Henares y Alcorcón. La operación se ha saldado con la detención de cuatro personas y más de 20 que están siendo investigadas. Estas últimas están supuestamente acusadas de haber obtenido las etiquetas de la DGT tras la falsificación de los documentos.
De hecho, los agentes calculan que cerca de 39 vehículos de diferentes modelos habrían conseguido estos distintivos de forma ilegal para circular en las Zonas de Bajas Emisiones.
Tanto los destinos como investigados están acusados por la Guardia Civil por un delito de estafa y de falsedad documental. La operación se ha conseguido concretar después de varios meses de investigación. Todo comenzó después de detectar un incremento sospechoso de solicitudes de etiquetas que se habían presentado en diferentes Jefaturas Provinciales de Tráfico. Fue ahí cuando los agentes dieron con certificados de homologación que eran falsos.