Demetrio Fernández recibe la medalla de la hermandad de San Rafael de Córdoba
Veinticinco nuevas medallas para los devotos que se incorporan a la hermandad de San Rafael y entre ellas, una con un marcado sentido, la que se impuso al obispo emérito de Córdoba, Demetrio Fernández . La cofradía celebró el 7 de mayo la función principal en honor del Custodio de la ciudad con motivo de su aparición y juramento al Padre Andrés de las Roelas en 1578 y él presidió la misa. Al finalizar el consiliario y rector de la iglesia del Juramento, Fernando Cruz-Conde, le puso la medalla. «Me siento muy honrado con llevar la medalla de San Rafael, al que me he encomendado muchas veces durante estos años», expresó monseñor Fernández, mientras recordaba que «voy a seguir en Córdoba». El hermano mayor, José Ángel Castro , resaltó su cercanía y subrayó sus quince años de episcopado, «el impulso evangelizador con sus continuas visitas pastorales y haberse volcado con las cofradías», como sucedió al contribuir en llevar la carrera oficial a la Catedral y con las distintas magnas. «Ser cofrade de la hermandad San Rafael es una credencial de ser cordobés », añadió Castro. Le agradeció su «compromiso con nuestra hermandad cada año y cuando nos invitó a participar en el 90 aniversario de la consagración de la diócesis al Corazón de Jesús», así como su «ejemplo de fe y amor». Es uno de los últimos actos con las hermandades que tiene Demetrio Fernández en esta recta final de su labor de servicio a Córdoba. Su asistencia cada 24 de octubre en la misa de la festividad de San Rafael ha sido fija, pero la de este miércoles ha supuesto la primera vez en que participaba en mayo. También hubo una ofrenda floral de las instituciones al Arcángel. Participó el presidente de la Diputación, Salvador Fuentes; la teniente de alcalde delegada de Turismo, Marian Aguilar; representantes de la Policía Local; y hermanos mayores de otras hermandades, como la Universitaria, la Misericordia y el Carmen de Puerta Nueva.
Veinticinco nuevas medallas para los devotos que se incorporan a la hermandad de San Rafael y entre ellas, una con un marcado sentido, la que se impuso al obispo emérito de Córdoba, Demetrio Fernández . La cofradía celebró el 7 de mayo la función principal en honor del Custodio de la ciudad con motivo de su aparición y juramento al Padre Andrés de las Roelas en 1578 y él presidió la misa. Al finalizar el consiliario y rector de la iglesia del Juramento, Fernando Cruz-Conde, le puso la medalla. «Me siento muy honrado con llevar la medalla de San Rafael, al que me he encomendado muchas veces durante estos años», expresó monseñor Fernández, mientras recordaba que «voy a seguir en Córdoba». El hermano mayor, José Ángel Castro , resaltó su cercanía y subrayó sus quince años de episcopado, «el impulso evangelizador con sus continuas visitas pastorales y haberse volcado con las cofradías», como sucedió al contribuir en llevar la carrera oficial a la Catedral y con las distintas magnas. «Ser cofrade de la hermandad San Rafael es una credencial de ser cordobés », añadió Castro. Le agradeció su «compromiso con nuestra hermandad cada año y cuando nos invitó a participar en el 90 aniversario de la consagración de la diócesis al Corazón de Jesús», así como su «ejemplo de fe y amor». Es uno de los últimos actos con las hermandades que tiene Demetrio Fernández en esta recta final de su labor de servicio a Córdoba. Su asistencia cada 24 de octubre en la misa de la festividad de San Rafael ha sido fija, pero la de este miércoles ha supuesto la primera vez en que participaba en mayo. También hubo una ofrenda floral de las instituciones al Arcángel. Participó el presidente de la Diputación, Salvador Fuentes; la teniente de alcalde delegada de Turismo, Marian Aguilar; representantes de la Policía Local; y hermanos mayores de otras hermandades, como la Universitaria, la Misericordia y el Carmen de Puerta Nueva.
