¿Cobre de los trenes? Las mafias prefieren el platino de los coches

Bandas originarias de Europa del Este rentabilizan el negocio dando salida al cobre y otros metales más preciados en el mercado negro

May 12, 2025 - 04:59
 0
¿Cobre de los trenes? Las mafias prefieren el platino de los coches

El robo de cableado de cobre en la línea de AVE Madrid-Sevilla ha vuelto a constatar un fenómeno delincuencial que sigue al alza porque también resulta un negocio "muy lucrativo". Así definen las fuentes policiales consultadas la actividad de las bandas que sustraen los metales más "codiciados", principalmente en la infraestructura de la red ferroviaria, pero también en los vehículos particulares. Las mafias, principalmente originarias de Europa del Este, se hacen con estos materiales y los venden en el mercado negro.

Las cifras del Ministerio del Interior evidencian una clara tendencia al alza en este tipo de delitos durante los últimos años. Es tal la entidad que se tuvo que poner en marcha un plan especial de prevención, en este caso, del robo de cobre, quizás el materal más "accesible" para estas mafias, aunque otros como el platino o el rodio son más anhelados. Según las estadísticas, la "sustracción de cobre y materiales conductores" se disparó un 87 % entre 2019 y 2024, cuando se registraron 4.433 hechos. 

Detrás de este notable incremento están las mafias de Europa del Este -y clanes familiares locales-, quienes aprovechan, entre otras de la escasez de medios personales y materiales que adolece, principalmente, la Guardia Civil, en cuya demarcación de producen la mayoría de estos delitos. Pero no son sólo las zonas rurales -por donde pasan las líneas de alta velocidad- las que se ven afectadas por la actividad de las bandas que se dedican al robo de metales.

En ciudades como Madrid, los ladrones no miran en las vías del tren, sino debajo de los coches. Los catalizadores, hechos de cobre y con otros preciados metales como paladio, rodio o platino en su interior, se han convertido en una pieza de lo más cotizada. En el mercado negro se compra tanto su parte cobre como los metales preciosos que contiene. De hecho, hay mafias que sólo sacan rentabilidad a la pieza de cobre, mientras que otras consiguen dar salida también a los materiales más valiosos, cuyo valor es incluso superior al del oro. La sencilla extracción del catalizador del vehículo, mucho más que ser cazado in fraganti por la Policía, facilita el éxito de los robos, según explican fuentes policiales expertas en este fenómeno.

Al igual que ocurre con el resto de robos de metales, los hechos conocidos por las fuerzas de seguridad se han disparado en los últimos años, especialmente después de la pandemia. Las dificultades de las fuerzas de seguridad para detener a los autores son similares a los casos de la red ferroviaria: si no se les detecta in fraganti, es "muy difícil" imputarles el delito, en este caso robos con fuerza. Y es que los catalizadores no presentan un número de serie que los relacione con el vehículo del que fueron extraídos. A esto se suma que cuando la investigación policial es un éxito, los detenidos suelen quedar en libertad provisional, por lo que la tasa de reincidencia es alta. Los delincuentes acumulan bajas penas y la actividad de estas bandas no cesa.

Los precios en el mercado negro

El negocio para las mafias es rentable gracias a la facilidad para dar salida a estos materiales, especialmente al cobre, en el mercado negro. El kilo de este metal se puede pagar en las chatarrerías a unos 6 euros -hace años llegó a alcanzar los 10 euros-, mientras que una pieza completa de catalizador puede llegar a venderse por hasta 450 euros, ya que puede ser reutilizado y se puede sacar provecho a los metales preciosos que contiene. 

Ahora, las fuerzas de seguridad continuan ahondando en el recorrido que tienen el platino, el rodio o el paladio en el mercado negro, donde las bandas más especializadas podrían hacer aún más negocio a partir de los componentes más valiosos.