Siân James: Aquella tarde
Idioma original: InglésTítulo original: One afternoonAño de publicación: 1975Traducción: Esther Cruz SantaellaValoración: Bastante recomendableEste libro podría titularse "A year in the life", más o menos como la archiconocida canción de los Beatles. Porque un año es lo que transcurre entre el comienzo y el final de la novela, entre el momento en que Anna, viuda de unos 35 años y con 3 hijas, se encuentra con Charlie y el momento en que... No, tranquilos, que no desvelaré nada.Lo anterior podría indicar que Aquella tarde es una novela romántica al uso y, en cierta forma, en sus páginas iniciales lo es. Mujer conoce a hombre (o viceversa), primeras semanas emocionantes y agotadoras, deseo y dudas sobre el pasado y el presente, cierto distanciamiento con las hijas, etc. Pero la novela es algo mucho más amplio y más complejo que todo lo anterior. Fundamentalmente, por tres motivos.El primero de ellos es que, sin olvidar en ningún momento que Aquella tarde tiene en su centro la relación entre Anna y Charlie, esta explora en otras relaciones familiares. Especialmente bien tratada me parece la relación de Anna con su padre.El segundo es su vinculación al momento histórico en el que está escrito. Se trata de una novela del año 1975 y han pasado apenas 7 años de mayo del 68, la revolución sexual, etc. Pero una viuda que se "lía" con un hombre algo más joven es algo que no todo el mundo está dispuesto a aceptar. A veces, incluso, ni su propia protagonista.El tercero y más importante, y en cierta medida vinculado al punto anterior, es que Aquella tarde es una novela de formación / toma de conciencia por lo que supone de revelación sobre el pasado, sobre anteriores relaciones propias y ajenas, sobre el descubrimiento de tiempos e historias que quizá no nos pertenecen del todo, sobre cómo a veces decidimos cosas de manera instintiva y luego buscamos motivos que respalden esa decisión.Los citados motivos dotan de complejidad, por tanto, a un personaje protagonista y a una novela que crecen, especialmente, en su segunda mitad y que solo se ve "lastrada", a mi entender, por ciertos pasajes algo melodramáticos y por esas voces infantiles tan difíciles de conseguir. Lo sé, tengo un problema con los libros que incluyen voces infantiles. Ya me pasó con Helena y el mar de verano o con El príncipe destronado. ¿Será grave, doctor?

Año de publicación: 1975
Traducción: Esther Cruz Santaella
Valoración: Bastante recomendable
Este libro podría titularse "A year in the life", más o menos como la archiconocida canción de los Beatles. Porque un año es lo que transcurre entre el comienzo y el final de la novela, entre el momento en que Anna, viuda de unos 35 años y con 3 hijas, se encuentra con Charlie y el momento en que... No, tranquilos, que no desvelaré nada.
Lo anterior podría indicar que Aquella tarde es una novela romántica al uso y, en cierta forma, en sus páginas iniciales lo es. Mujer conoce a hombre (o viceversa), primeras semanas emocionantes y agotadoras, deseo y dudas sobre el pasado y el presente, cierto distanciamiento con las hijas, etc. Pero la novela es algo mucho más amplio y más complejo que todo lo anterior. Fundamentalmente, por tres motivos.
El primero de ellos es que, sin olvidar en ningún momento que Aquella tarde tiene en su centro la relación entre Anna y Charlie, esta explora en otras relaciones familiares. Especialmente bien tratada me parece la relación de Anna con su padre.
El segundo es su vinculación al momento histórico en el que está escrito. Se trata de una novela del año 1975 y han pasado apenas 7 años de mayo del 68, la revolución sexual, etc. Pero una viuda que se "lía" con un hombre algo más joven es algo que no todo el mundo está dispuesto a aceptar. A veces, incluso, ni su propia protagonista.
El tercero y más importante, y en cierta medida vinculado al punto anterior, es que Aquella tarde es una novela de formación / toma de conciencia por lo que supone de revelación sobre el pasado, sobre anteriores relaciones propias y ajenas, sobre el descubrimiento de tiempos e historias que quizá no nos pertenecen del todo, sobre cómo a veces decidimos cosas de manera instintiva y luego buscamos motivos que respalden esa decisión.
Los citados motivos dotan de complejidad, por tanto, a un personaje protagonista y a una novela que crecen, especialmente, en su segunda mitad y que solo se ve "lastrada", a mi entender, por ciertos pasajes algo melodramáticos y por esas voces infantiles tan difíciles de conseguir. Lo sé, tengo un problema con los libros que incluyen voces infantiles. Ya me pasó con Helena y el mar de verano o con El príncipe destronado. ¿Será grave, doctor?