«Puta, si no fueras mujer te daba de hostias». Denuncian una nueva agresión a una cartera en Peñafiel (Valladolid)
«Puta, si no fueras mujer te daba dos hostias». Son las palabras con las que, según ha denunciado la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) era recibida una cartera a ir a entregar una misiva a un destinatario en Peñafiel (Valladolid) . Ocurría este lunes, 5 de mayo, pero lo que también censura el sindicato es que no es el primer caso de agresión que los trabajadores de este servicio de reparto reciben en la misma zona de estas localidad de la Ribera. El último incidente, por ahora, según ha dado a conocer CSIF en un comunicado, ocurría este lunes cuando la repartidora entregaba una carta ordinaria y el receptor empezó a insultarla y a amenazarla , profiriendo expresiones como «puta, si no fueras mujer te daba dos hostias». Acompañadas, además, según la queja de la organización, de «actitudes agresivas e intimidatorias». Hasta tal punto, aseguran, que la trabajadora del servicio de Correos «tuvo que refugiarse en su vehículo». « Sufrió un ataque de ansiedad, llamó a la Guardia Civil y a la responsable de su oficina de Correos», narran en la denuncia. Unos agresión, en este caso verbal, que tuvo su origen, al parecer, en que el supuesto agresor había recibido una carta de oferta de empleo, pero cuando llegó a sus manoso el plazo de respuesta había finalizado. «Una posible circunstancia que, de ser real, nada tiene que ver con la cartera, que realizó su trabajo y el reparto correctamente», subraya la organización sindical. Y ésta no es la única denuncia en el mismo sentido . Sino que, recuerda CSIF, ya van tres. En otras dos anteriores, otros compañeros del servicio también aseguraban sentirse «inseguros e indefensos por la situación de riesgo en el reparto». Tal es la situación, que ante este nuevo episodio, desde el sindicato se suman a las peticiones de la responsable de la oficina y del alcalde de Peñafiel que, dicen, ya han remitido a Correos para que « suprima el reparto en las zonas residenciales que se consideren conflictiva s, hasta que no se pongan soluciones y medidas». También, solicitan que la empresa requiera a los usuarios que se pasen por la oficina para recoger las cartas o paquetes, o el acompañamiento de la Guardia Civil durante el reparto en las «zonas de riesgo», hasta que no se solucione el problema. Una petición que ya han trasladado al regidor de esta localidad vallisoletana que, aseguran desde CSIF, «se ha comprometido a tratar el asunto con el subdelegado del Gobierno». Ante este caso, la central sindical «vuelve a exigir a Correos que atienda y asista a sus trabajadores». Y es que, recuerdan, hace un un mes ya denunciaron el «intolerable abandono» sufrido por otra cartera de Peñafiel, que no había recibido apoyo psicológico ni asistencia jurídica tras una agresión ocurrida en junio de 2024, tampoco durante la reciente celebración del juicio. CSIF lamenta, además, «que el calvario para la trabajadora no terminó aquí, pues acudió a su mutua de trabajo para que se le atendiera». «Sin embargo, sorprendentemente, la mutua recibió un correo desde los servicios médicos de Correos para que no se le asistiera porque no se había llegado a materializar la agresión física », cuestionan. CSIF ha remitido una carta a la Dirección Provincial de Correos en Valladolid para recriminar que « esta empresa pública está dejando a los pies de los caballos a sus trabadores antes, durante y después de estos hechos intolerables, además de evidenciar su desconocimiento de la normativa de prevención de riesgos laborales, ya que no es necesario que a un trabajador le muelan a palos para requerir la asistencia de la mutua». El servicio de relaciones laborales de Correos, a requerimiento urgente de CSIF, se puso ayer día 9 de mayo en contacto con la delegada de CSIF, Loli Merchán, cinco días después de la agresión, indicando «que se tomarán medidas para garantizar el reparto , con el acompañamiento por la Guardia Civil y la asistencia psicológica y el reconocimiento como baja laboral y no como Incapacidad Temporal Común«. Para CSIF, «son medidas que se toman a posteriori y como un parche temporal, con fecha de caducidad, y que no solucionan en modo alguno el problema crónico que se produce en Peñafiel ».
«Puta, si no fueras mujer te daba dos hostias». Son las palabras con las que, según ha denunciado la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) era recibida una cartera a ir a entregar una misiva a un destinatario en Peñafiel (Valladolid) . Ocurría este lunes, 5 de mayo, pero lo que también censura el sindicato es que no es el primer caso de agresión que los trabajadores de este servicio de reparto reciben en la misma zona de estas localidad de la Ribera. El último incidente, por ahora, según ha dado a conocer CSIF en un comunicado, ocurría este lunes cuando la repartidora entregaba una carta ordinaria y el receptor empezó a insultarla y a amenazarla , profiriendo expresiones como «puta, si no fueras mujer te daba dos hostias». Acompañadas, además, según la queja de la organización, de «actitudes agresivas e intimidatorias». Hasta tal punto, aseguran, que la trabajadora del servicio de Correos «tuvo que refugiarse en su vehículo». « Sufrió un ataque de ansiedad, llamó a la Guardia Civil y a la responsable de su oficina de Correos», narran en la denuncia. Unos agresión, en este caso verbal, que tuvo su origen, al parecer, en que el supuesto agresor había recibido una carta de oferta de empleo, pero cuando llegó a sus manoso el plazo de respuesta había finalizado. «Una posible circunstancia que, de ser real, nada tiene que ver con la cartera, que realizó su trabajo y el reparto correctamente», subraya la organización sindical. Y ésta no es la única denuncia en el mismo sentido . Sino que, recuerda CSIF, ya van tres. En otras dos anteriores, otros compañeros del servicio también aseguraban sentirse «inseguros e indefensos por la situación de riesgo en el reparto». Tal es la situación, que ante este nuevo episodio, desde el sindicato se suman a las peticiones de la responsable de la oficina y del alcalde de Peñafiel que, dicen, ya han remitido a Correos para que « suprima el reparto en las zonas residenciales que se consideren conflictiva s, hasta que no se pongan soluciones y medidas». También, solicitan que la empresa requiera a los usuarios que se pasen por la oficina para recoger las cartas o paquetes, o el acompañamiento de la Guardia Civil durante el reparto en las «zonas de riesgo», hasta que no se solucione el problema. Una petición que ya han trasladado al regidor de esta localidad vallisoletana que, aseguran desde CSIF, «se ha comprometido a tratar el asunto con el subdelegado del Gobierno». Ante este caso, la central sindical «vuelve a exigir a Correos que atienda y asista a sus trabajadores». Y es que, recuerdan, hace un un mes ya denunciaron el «intolerable abandono» sufrido por otra cartera de Peñafiel, que no había recibido apoyo psicológico ni asistencia jurídica tras una agresión ocurrida en junio de 2024, tampoco durante la reciente celebración del juicio. CSIF lamenta, además, «que el calvario para la trabajadora no terminó aquí, pues acudió a su mutua de trabajo para que se le atendiera». «Sin embargo, sorprendentemente, la mutua recibió un correo desde los servicios médicos de Correos para que no se le asistiera porque no se había llegado a materializar la agresión física », cuestionan. CSIF ha remitido una carta a la Dirección Provincial de Correos en Valladolid para recriminar que « esta empresa pública está dejando a los pies de los caballos a sus trabadores antes, durante y después de estos hechos intolerables, además de evidenciar su desconocimiento de la normativa de prevención de riesgos laborales, ya que no es necesario que a un trabajador le muelan a palos para requerir la asistencia de la mutua». El servicio de relaciones laborales de Correos, a requerimiento urgente de CSIF, se puso ayer día 9 de mayo en contacto con la delegada de CSIF, Loli Merchán, cinco días después de la agresión, indicando «que se tomarán medidas para garantizar el reparto , con el acompañamiento por la Guardia Civil y la asistencia psicológica y el reconocimiento como baja laboral y no como Incapacidad Temporal Común«. Para CSIF, «son medidas que se toman a posteriori y como un parche temporal, con fecha de caducidad, y que no solucionan en modo alguno el problema crónico que se produce en Peñafiel ».
