No extrañas a tu ex, sino a su fantasma, y la psicología explica por qué
A veces, cuando una relación termina, la mente juega trucos sucios. En lugar de recordar todo el panorama, selecciona solo los momentos más bonitos, borra los problemas y convierte a tu ex en un estándar inalcanzable. Lo que en su momento tenía fallas ahora parece perfecto, y sin darte cuenta, te aferras a un recuerdo […]

A veces, cuando una relación termina, la mente juega trucos sucios. En lugar de recordar todo el panorama, selecciona solo los momentos más bonitos, borra los problemas y convierte a tu ex en un estándar inalcanzable. Lo que en su momento tenía fallas ahora parece perfecto, y sin darte cuenta, te aferras a un recuerdo que posiblemente no fue como lo imaginas.
El escritor Max Jancar llama a esto el “vínculo fantasma”, y aquí te explicamos por qué es un espejismo que te impide seguir adelante.
¿Extrañas a tu ex… o a su versión fantasma?
Max Jancar acuñó el término “Phantom X” para describir un fenómeno curioso: cuando idealizamos a una expareja y recordamos solo lo bueno, borrando los conflictos y las razones por las que la relación terminó. No extrañas a esa persona tal como era, sino una versión editada con nostalgia, una especie de Frankenstein hecho de los momentos más dulces y completamente amputado de la realidad.
Ver esta publicación en Instagram
Una publicación compartida por Anabell Cuevas (@bellcorazonalquimia)
Esa voz en tu cabeza que dice: “Era el amor de mi vida y lo dejé ir. Nadie se compara con él/ella. Nunca encontraré algo así otra vez”… es mentira. Realmente fue alguien real, con virtudes y defectos, con una dinámica que en su momento te hizo decir: “Esto no es para mí”.
El problema es que la mente evitativa no lidia bien con el presente. Prefiere reescribir el pasado y aferrarse a una historia que nunca fue.
¿Cómo romper el hechizo?
Viendo la versión completa de la relación, no solo los mejores momentos. Pregúntate: ¿Echas de menos a la persona real… o a la fantasía que construiste?
Porque el “ex fantasma” no es un amor perdido, sino un espejismo que te mantiene atrapado en el pasado y no te deja avanzar.
Nada Qué Ver, la guía con todo lo que deberías estar viendo en streaming