En el casi medio siglo de profesión periodística no alcanzo a recordar algo parecido a la rúa del pasado viernes del
Barça para celebrar el primer triplete doméstico, (
Liga, Copa y Supercopa) de la historia del club. Empezando por aquel apoteósico retorno de la
Recopa de
Basilea del 1979, que abarrotó todo el trayecto del autocar barcelonista desde el aeropuerto de El Prat hasta la plaça de Sant Jaume, que convirtió los gritos de “
Neeskens sí, Núñez no” en todo un símbolo de resistencia antinuñista, hasta el regreso de Wembley 92 con la primera Copa de Europa y el celebrado “ciutadans de Catalunya ja la teniu aquí” de
Guardiola, emulando al presidente
Tarradellas desde el balcón del Palau de la Generalitat, no llegan a superar la explosión de barcelonismo que se ha vivido esta semana. Puede que en aquellas ocasiones anteriores hubiera más simbolismo, pero en efervescencia y proximidad nada supera a esta última.
Seguir leyendo...]]>