La resistencia a deflactar el IRPF y la subida del IVA siguen engordando las arcas de Hacienda
El alza por la negativa del Gobierno a deflactar la tarifa del IRPF será mayor cuando se haga efectiva la subida salarial de los funcionarios

Un IRPF disparado y el IVA y los Impuestos Especiales logran que la recaudación tributaria crezca hasta marzo un 9,7%, un 10,9% en el mes comparada con marzo de 2024. El Informe de recaudación de marzo de la Agencia Tributaria (AEAT) muestra los efectos de la negativa del Gobierno de Pedro Sánchez a deflactar la tarifa del IRPF, que llevan a que el tipo efectivo crezca incluso "a más ritmo que en el pasado" y reúna un récord de 35.756 millones de euros hasta marzo.
A lo que se añade un fuerte aumento de los ingresos brutos del IVA gracias al aumento de tipos y de la recaudación del Impuesto Especial sobre Labores del Tabaco debido al dato muy bajo de marzo de 2024 y a los efectos de la subida. A todo esto se suma el desempeño del Impuesto al plástico y los de los pagos fraccionados de las empresas personales y del Impuesto sobre la Renta de No Residentes.
El crecimiento del IRPF en el mes, del 13% -con un acumulado del 11%- está condicionado por el buen dato de las retenciones del trabajo y del capital mobiliario.
Las retenciones del trabajo y actividades económicas crecieron en marzo un 11,6% y en el primer trimestre un 9,3%. La información que proporcionan las declaraciones a la AEAT indica que las subidas salariales en estas empresas son del 3,5%, que es un porcentaje igual al registrado en el cuarto trimestre de 2024 e igual que la media de ese año.
"El empleo, en cambio, repuntó en estos primeros meses y también el tipo efectivo creció a más ritmo que en el pasado", constata el Fisco. En el conjunto del sector privado, el aumento de las retenciones hasta marzo fue del 9,6%.
En las AA.PP. los ingresos crecieron un 6,9% en marzo y un 8,2% en el trimestre. La moderación que muestra este crecimiento tiene que ver, fundamentalmente, con la ausencia de subida salarial hasta el momento, advierte el informe. Esto se traduce en un incremento de las retenciones ligadas a salarios que es aproximadamente dos puntos más bajo en los devengos de este año que en los devengos del último trimestre del año pasado.
A ello hay que añadir que la actualización de las pensiones también ha sido menor que en 2024, de manera que las retenciones por pensiones crecieron un 9,3% en los dos últimos meses (los correspondientes a las pensiones pagadas en enero y febrero), tasa casi dos puntos inferior a la registrada en el trimestre final de 2024. Algo más de dos tercios del aumento de las retenciones por pensiones procede de la masa de pensiones y el resto de la subida del tipo efectivo.
Los ingresos brutos por IVA, los más relacionados con la coyuntura económica más reciente, crecieron en marzo un 9,8% (7,8% en el primer trimestre). En los ingresos mensuales los porcentajes son del 10,5% y del 6,8%, respectivamente. Son estos ingresos mensuales los que acaparan prácticamente toda la recaudación del mes. Corresponden al devengo de enero, ya con todas las subidas de tipos completas (productos energéticos y alimenticios). La comparación se produce con tipos de los productos energéticos que todavía no se habían normalizado y con el tipo 0 de los alimentos básicos vigente hasta avanzado el año 2024. En términos homogéneos el creicmiento fue del 6,2% en el mes y del 7,4% hasta marzo.
El impacto de estas medidas fue hasta marzo de 654 millones, por lo que, sin los cambios de tipos en 2024 y 2025, el aumento de los ingresos brutos en el primer trimestre sería del 5,7%, tasa que es aproximadamente la misma del cuarto trimestre de 2024 y algo más de un punto superior a la cifra con la que se cerró ese año, detalla la AEAT.
Incremento "anormal" en Plásticos
En marzo el protagonismo recayó en el Impuesto Especial sobre Labores del Tabaco, esta vez, como en enero, por su fuerte crecimiento. A diferencia de lo sucedido entonces en el que el incremento era consecuencia del episodio de acaparamiento por la subida de tipos y precios, en marzo la AEAT lo atribuye al bajo nivel un año antes (357 millones frente a la media de casi 600 millones del resto de los meses de 2024). En el trimestre el crecimiento es del 1,8%.
En el Impuesto sobre Hidrocarburos los ingresos crecieron en marzo un 0,9% (2% en el trimestre), aunque, si consideran nada más las autoliquidaciones, el crecimiento es mayor, del 2,3%, en la línea de los dos meses anteriores y con un buen resultado en gasolinas y gasóleo bonificado y un incremento casi cero en el gasóleo de automoción.
Una cierta novedad es el aumento de los impuestos sobre el alcohol (4%), que habían comenzado el año con resultados muy negativos (en el trimestre pierden un 2,4%).
Finalmente, en el Impuesto sobre Plásticos No Reutilizables se produce un "incremento anormalmente alto" para la AEAT, del 36,8%, con lo que la recaudación en lo que va de año sube un 15,8%. Este "dato atípico" se produce por la existencia de ingresos de otros períodos por actuaciones de control y por la realización de menores devoluciones que en marzo del año pasado. Si solo se consideran los flujos habituales (declaraciones e importaciones), la situación en el año es ligeramente mejor que la del año pasado (+0,7%), sostiene el informe.
Fedea: la rebaja del IRPF no suple la subida por la inflación
La Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) calcula que el efecto de no haber ajustado la tarifa del IRPF a la inflación de los últimos años cuesta a una familia media -dos adultos y dos hijos, con unos ingresos anuales de 50.000 euros- unos 736 euros al año. Es la estimación que publicó el 21 de abril en el artículo Seguimiento de las reformas del Plan de Recuperación y otras medidas estructurales, en el que repasa las reformas implementadas en los últimos años, así como aquellas que se habían planificado pero no llegaron a aprobarse, entre ellas, buena parte de la reforma fiscal prometida a Bruselas.
Ante las críticas de Hacienda, que subraya los efectos de su rebaja del IRPF a rentas bajas de 2023 en los reducción por rentas del trabajo, Ángel de la Fuente, director ejecutivo de Fedea, ha publicado este miércoles una nota en la que calcula también los efectos del aumento de la reducción por rentas del trabajo (RRT). "Los resultados confirman que la no corrección del impuesto tiene un coste significativo para la inmensa mayoría de los contribuyentes que es, además, proporcionalmente mayor para los de menor renta", destaca.
"Visto como una posible alternativa a la corrección por inflación, la mejora de la RRT es una medida claramente inadecuada porque la reducción de la cuota que se obtiene por esta vía no tiene nada que ver con el perjuicio generado por la inflación no compensada. La medida sobrecompensa a ciertos contribuyentes (los de rentas más bajas por encima del umbral de tributación), pero no beneficia en absoluto a la mayor parte de los afectados por la subida poco transparente de impuestos que hemos sufrido en la última década. Aumentar la RRT tampoco es, seguramente, la mejor forma de aumentar la progresividad del impuesto, si es eso lo que se pretende, pues tal aumento se concentra únicamente en los tramos de renta más bajos, donde se introducen tipos marginales efectivos muy elevados que pueden plantear problemas de incentivos pese a reducirse la recaudación del impuesto", concluye, y advierte de que "una vez más, estamos ante un parche seguramente bienintencionado, pero no demasiado bien pensado".