El lado menos conocido de León XIV que los cardenales tuvieron en cuenta para enfrentar los desafíos de este tiempo

Pese a las especulaciones sobre las profundas luchas entre cardenales, los últimos cónclaves alcanzaron rápidamente a una decisión mayoritaria

May 10, 2025 - 11:51
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El lado menos conocido de León XIV que los cardenales tuvieron en cuenta para enfrentar los desafíos de este tiempo

ROMA.- Son muchos los que imaginan un colegio cardenalicio encargado de escoger a un nuevo Papa como un siniestro nido de encarnizados adversarios, capaces de las peores acciones para hacer ganar a sus candidatos. La historia reciente parece, sin embargo, demostrar lo contrario: que la Iglesia actual es capaz de construir, como en una meticulosa obra de ingeniería, el proyecto que sabrá responder con la mayor eficacia a los principales desafíos que le plantea el presente, antes de elegir a un Papa.

“Hace 48 horas que vaticanistas y politólogos cantan loas a la elección de un nuevo pontífice que tiene todas las características necesarias para hacer frente a los enormes desafíos que le esperan a la Iglesia en el futuro próximo. Lo hacen, como si se hubiese tratado de un milagro. Pero quizás habría que mirar un poco más en detalle la historia para darse cuenta de que el milagro no es tal”, se asombra Roberto Regoli, profesor de historia de la Iglesia en la romana universidad pontificia gregoriana, que recomienda consultar la lista de Sumos Pontífices de los siglos XIX y XX para convencerse.El Papa León XIII junto a sus colaboradores

Comenzando por León XIII, el inspirador del nuevo pontífice, elegido a fines del siglo XIX con el fin de posicionar a la Iglesia en un momento crítico: la amenaza que representaba el surgimiento del marxismo y la conmoción creada por la Revolución Industrial. Y el hombre escogido respondió con creces ya que, entre sus muchas iniciativas, le dio a la iglesia la encíclica Rerum Novarum, una doctrina proactiva para actuar frente a los peligros de aquel momento.

León XIII deploraba la opresión y virtual esclavitud de los pobres por parte de “un puñado de gente muy rica” y preconizaba salarios justos y el derecho a organizar sindicatos, aunque rechazaba vigorosamente el socialismo y mostraba poco entusiasmo por las instituciones de la democracia liberal y el sindicalismo obrero. El cónclave demoró solo tres días en elegir a León XIII.

A mediados del siglo siguiente, una figura mayor sacaría a la Iglesia de un encierro marcado por la estricta liturgia y el aislamiento impuestos por sus predecesores: Juan XXIII (1958-1963), dejaría una imagen de profunda humanidad y simplicidad ya que, desde el comienzo de su pontificado puso el acento en el aspecto pastoral. Su iniciativa de lanzar el Concilio Vaticano II -que nunca vería concluir- es considerada como “mayor”. Verdadera revolución en la Iglesia católica, marcó un giro en su relación con el mundo y sus propias tradiciones. Su importancia reside en la modernización de la Iglesia, la reforma de sus estructuras y la revisión de su liturgia, iniciando un periodo de renovación. El cónclave demoró tres días en elegir a Juan XXIII.Juan XXIII fue elegido papa el 28 de octubre de 1958, tras la muerte de Pío XII. Tenía 77 años al momento de su elección y muchos pensaban que sería un papa de transición. Sin embargo, sorprendió al mundo al convocar el Concilio Vaticano II en 1962, un evento que transformó profundamente la Iglesia católica en aspectos litúrgicos, pastorales y ecuménicos. (Ullstein bild Dtl. (ullstein bild via Getty Images)

Pablo VI (1963-1978) en plena Guerra Fría, llevó a término el concilio Vaticano II que modernizaría finalmente la Iglesia, iniciado por su predecesor. También trabajó por la unidad de los cristianos y la paz en el mundo. Esta vez, los cardenales demoraron apenas dos días para decidir su elección.

Con Juan Pablo II (1978-2005), primer papa polaco, la Iglesia escogió al hombre que sabría hacer frente al comunismo y sostener la lucha por la libertad en Europa. Fino político, fue un pontífice viajero, que no dudó en desplazarse a los rincones más lejanos del planeta para condenar toda forma de represión totalitaria y promover la paz y el diálogo interreligioso. Juan Pablo II fue elegido por el conclave en un solo día.Robert Prevost, junto al papa Juan Pablo II en los años en que el entonces joven sacerdote iniciaba su camino en la Curia romana

Presionada por las periferias del mundo, la Iglesia comprendió en 2013 que necesitaba un representante que rompiera con su secular tradición europeo-céntrica. Así fue a buscar “un Papa del fin del mundo” en la persona de Francisco (2013-2025). Sin demasiadas dudas, los cardenales lo eligieron en apenas dos días.

La Iglesia de este momento tendrá que hacer frente a la doble amenaza de una ideología inquietante surgida del interior de sí misma —el catolicismo MAGA que encarna J.D. Vance— y la expansión de las nuevas tecnologías disruptivas —entre ellas la inteligencia artificial—, que una parte de la humanidad consideran amenazadoras e invasivas. Y para ello no solo fue a buscar a un serio representante de la doctrina social, sino a un Papa científico, apasionado por las matemáticas y, en consecuencia, capaz de comprender la naturaleza misma de esos desafíos.

El cónclave tampoco se equivocó esta vez. El nuevo Papa habló de la inteligencia artificial en la homilía que pronunció en la misa celebrada este viernes en la capilla Sixtina ante los cardenales que lo eligieron para suceder a Francisco, confirmando que los tres objetivos que marcarán su acción son: la doctrina social de la iglesia, la democracia y la paz en el mundo, así como la atención a las redes sociales y las nuevas tecnologías, en particular la inteligencia artificial.

Cenando con algunos cardenales, León XIV había hecho el jueves el paralelo entre la Revolución Industrial, que marcó a su predecesor León XIII, y la “revolución digital” de hoy. También advirtió sobre otro escollo: reducir a Jesús “a una especie de líder carismático o superhombre”, con el riesgo de vivir, incluso para algunos bautizados, “un ateísmo de hecho”, fenómeno de fetichismo masivo provocado por el descontrol de las redes sociales.El papa recién electo, León XIV, centro, sale tras celebrar la misa con el Colegio Cardenalicio en la Capilla Sixtina, en el Vaticano, un día después de su elección como el 267mo pontífice de la Iglesia Católica Romana, el viernes 9 de mayo de 2025. (Vatican Media vía AP)

La comparación entre la Revolución Industrial y la revolución digital subrayó la preocupación del nuevo pontífice por la evolución de las tecnologías y su impacto en la sociedad, pero también la importancia de mantenerse atento a las implicaciones éticas y espirituales de estos cambios. León XIV fue elegido por su pares en solo dos días.