El café con más ingredientes del mundo se sirve en las Islas Canarias

El barraquito, una tradición tinerfeña que ha conquistado paladares con su mezcla única de saboresTragos de sobremesa: café y licores para las tardes estivales El barraquito, una de las creaciones más emblemáticas de la gastronomía tinerfeña, ha alcanzado el reconocimiento internacional como el café con más ingredientes del mundo. Esta singular combinación de café, leche, leche condensada, licor y especias ha hecho las delicias de locales y turistas durante décadas. Aunque su origen es objeto de debate, lo que está claro es que este café tiene una historia que se remonta a los bares más tradicionales de Tenerife, y hoy en día se puede disfrutar en todos los rincones de la isla. El origen del barraquito: ¿un café nacido en Santa Cruz de Tenerife? Como muchos grandes clásicos, el nacimiento de este café está rodeado de misterio y leyendas. Algunos sitúan su creación en el Bar Imperial, cerca de la Plaza de La Paz en Santa Cruz de Tenerife. Según cuentan, un cliente habitual apodado “Barraco” o “Barraquito” pedía un café con una mezcla especial de café, leche condensada, licor, cáscara de limón y canela. Esta combinación, a primera vista extraña, rápidamente captó la atención de los demás clientes y se convirtió en una receta icónica. Sin embargo, otros apuntan que el barraquito nació en los famosos bares de los Paragüitas, otro lugar de encuentro popular entre los chicharreros durante la segunda mitad del siglo XX. Lo que es indiscutible es que, en cualquier caso, el barraquito comenzó en los bares de Santa Cruz de Tenerife y poco a poco se extendió por toda la isla, adoptando diferentes variaciones en función del lugar y del gusto de los clientes. Un café con historia y tradición El barraquito no es solo una bebida; es una tradición que forma parte del alma de Tenerife. Este café, que comenzó como una bebida para los habitantes de la ciudad, pronto se extendió más allá de los límites de la capital, Santa Cruz, y ahora se puede disfrutar en casi cualquier rincón de la isla. Además, tiene una característica única: su versatilidad. Se puede servir con o sin licor, lo que permite a cada persona adaptarlo a su gusto. El proceso de preparación es tan importante como los ingredientes. El barraquito se sirve en capas, creando una presentación visualmente atractiva y un contraste de sabores que no se encuentran en ninguna otra bebida. La leche condensada le da un toque dulce y cremoso, mientras que el licor, generalmente un licor de café o ron, aporta un toque alcohólico que lo hace aún más especial. La cáscara de limón y la canela completan la receta, añadiendo frescura y un toque especiado que marca la diferencia. ¿Por qué es tan popular el barraquito? La popularidad del barraquito radica en su capacidad para combinar lo mejor de dos mundos: el sabor intenso del café y la suavidad de la leche condensada, sin olvidar el toque alcohólico que lo convierte en una experiencia única. Esta bebida, que se disfruta principalmente como un café de sobremesa, es perfecta para aquellos que buscan algo más que un café tradicional. Además, el barraquito tiene un componente cultural muy fuerte. Es una bebida que reúne a las personas en torno a la mesa, a menudo en pequeños bares tradicionales donde los locales comparten historias y risas. En Tenerife, disfrutar de un barraquito es una forma de conectar con la isla y con su gente. Por todo esto, no es sorprendente que el barraquito se haya convertido en uno de los símbolos gastronómicos más representativos de Tenerife. Variedades del barraquito: un café para todos los gustos Aunque el barraquito original incluye licor, hoy en día se pueden encontrar varias versiones de esta bebida. El barraquito sin licor es una alternativa popular para quienes prefieren disfrutar del café sin el toque alcohólico. Además, muchos bares ofrecen variaciones que incorporan otros ingredientes, como el cacao o el azúcar moreno, para darle un toque aún más personalizado. La versatilidad del barraquito es lo que ha permitido que esta bebida se mantenga vigente a lo largo de los años y siga siendo una de las más queridas en las Islas Canarias. Ya sea con licor o sin él, el barraquito sigue siendo un símbolo de la cultura canaria y una de las experiencias más sabrosas que se pueden disfrutar en Tenerife.

May 17, 2025 - 17:22
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El café con más ingredientes del mundo se sirve en las Islas Canarias

El café con más ingredientes del mundo se sirve en las Islas Canarias

El barraquito, una tradición tinerfeña que ha conquistado paladares con su mezcla única de sabores

Tragos de sobremesa: café y licores para las tardes estivales

El barraquito, una de las creaciones más emblemáticas de la gastronomía tinerfeña, ha alcanzado el reconocimiento internacional como el café con más ingredientes del mundo.

Esta singular combinación de café, leche, leche condensada, licor y especias ha hecho las delicias de locales y turistas durante décadas.

Aunque su origen es objeto de debate, lo que está claro es que este café tiene una historia que se remonta a los bares más tradicionales de Tenerife, y hoy en día se puede disfrutar en todos los rincones de la isla.

El origen del barraquito: ¿un café nacido en Santa Cruz de Tenerife?

Como muchos grandes clásicos, el nacimiento de este café está rodeado de misterio y leyendas. Algunos sitúan su creación en el Bar Imperial, cerca de la Plaza de La Paz en Santa Cruz de Tenerife.

Según cuentan, un cliente habitual apodado “Barraco” o “Barraquito” pedía un café con una mezcla especial de café, leche condensada, licor, cáscara de limón y canela. Esta combinación, a primera vista extraña, rápidamente captó la atención de los demás clientes y se convirtió en una receta icónica.

Sin embargo, otros apuntan que el barraquito nació en los famosos bares de los Paragüitas, otro lugar de encuentro popular entre los chicharreros durante la segunda mitad del siglo XX.

Lo que es indiscutible es que, en cualquier caso, el barraquito comenzó en los bares de Santa Cruz de Tenerife y poco a poco se extendió por toda la isla, adoptando diferentes variaciones en función del lugar y del gusto de los clientes.

Un café con historia y tradición

El barraquito no es solo una bebida; es una tradición que forma parte del alma de Tenerife. Este café, que comenzó como una bebida para los habitantes de la ciudad, pronto se extendió más allá de los límites de la capital, Santa Cruz, y ahora se puede disfrutar en casi cualquier rincón de la isla.

Además, tiene una característica única: su versatilidad. Se puede servir con o sin licor, lo que permite a cada persona adaptarlo a su gusto.

El proceso de preparación es tan importante como los ingredientes. El barraquito se sirve en capas, creando una presentación visualmente atractiva y un contraste de sabores que no se encuentran en ninguna otra bebida.

La leche condensada le da un toque dulce y cremoso, mientras que el licor, generalmente un licor de café o ron, aporta un toque alcohólico que lo hace aún más especial. La cáscara de limón y la canela completan la receta, añadiendo frescura y un toque especiado que marca la diferencia.

¿Por qué es tan popular el barraquito?

La popularidad del barraquito radica en su capacidad para combinar lo mejor de dos mundos: el sabor intenso del café y la suavidad de la leche condensada, sin olvidar el toque alcohólico que lo convierte en una experiencia única.

Esta bebida, que se disfruta principalmente como un café de sobremesa, es perfecta para aquellos que buscan algo más que un café tradicional.

Además, el barraquito tiene un componente cultural muy fuerte. Es una bebida que reúne a las personas en torno a la mesa, a menudo en pequeños bares tradicionales donde los locales comparten historias y risas.

En Tenerife, disfrutar de un barraquito es una forma de conectar con la isla y con su gente. Por todo esto, no es sorprendente que el barraquito se haya convertido en uno de los símbolos gastronómicos más representativos de Tenerife.

Variedades del barraquito: un café para todos los gustos

Aunque el barraquito original incluye licor, hoy en día se pueden encontrar varias versiones de esta bebida. El barraquito sin licor es una alternativa popular para quienes prefieren disfrutar del café sin el toque alcohólico. Además, muchos bares ofrecen variaciones que incorporan otros ingredientes, como el cacao o el azúcar moreno, para darle un toque aún más personalizado.

La versatilidad del barraquito es lo que ha permitido que esta bebida se mantenga vigente a lo largo de los años y siga siendo una de las más queridas en las Islas Canarias. Ya sea con licor o sin él, el barraquito sigue siendo un símbolo de la cultura canaria y una de las experiencias más sabrosas que se pueden disfrutar en Tenerife.

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