El actor de Gibby en iCarly ya dijo por qué no volvió al revival y su confesión nos mostró que el mundo está podrido

Noah Munck, mejor conocido por interpretar al excéntrico Gibby Gibson en iCarly (2007-2012), fue una de las grandes ausencias en el revival de la serie estrenado en 2021 por Paramount+. A pesar de que el reboot reunió a varias figuras del elenco original como Miranda Cosgrove, Nathan Kress y Jerry Trainor, ni Munck ni Jennette McCurdy (Sam) regresaron. Y aunque el caso de McCurdy fue más mediático, la historia de Munck es igual de fuerte… y triste.

¿Por qué Noah Munck no volvió como Gibby?

Aunque en algún momento dejó abierta la puerta para un posible regreso, Munck decidió alejarse por completo del personaje. En el podcast OYC (2017), dijo: “Tal vez algún día tenga una mejor relación con [el papel], y quién sabe, volveré”. Pero cuando Paramount+ lo contactó años después, no hubo acuerdo.

¿La razón? Una mezcla de desgaste emocional, estigmatización y una industria que rara vez protege a sus actores jóvenes. Munck habló abiertamente de su incomodidad con el papel desde hace años. En una entrevista con el periódico universitario The Chimes (2014), aseguró que quería dejar atrás los roles infantiles y dedicarse a algo más serio. “Quiero actuar en dramas, en comedias más adultas… Es un paso necesario para tener un futuro en la actuación”, dijo entonces.

Más allá de su deseo profesional, Munck también cargaba con el peso del personaje en su vida personal. En redes sociales y foros como Reddit, se ha discutido el acoso que sufrió por su apariencia y por cómo era tratado en la serie. Un usuario escribió: “Fue acosado por fans en el sitio de iCarly y en la vida real por su peso”. El mismo Munck lo confirmó en entrevistas: apreciaba el show, pero también sentía resentimiento. “Era el saco de boxeo, el que siempre recibía los golpes”, explicó.

El legado de Gibby (y el spin-off que nunca fue)

Aunque empezó como un personaje secundario, Gibby rápidamente se convirtió en uno de los más queridos por el público. Sus ocurrencias, su torpeza entrañable y sus inesperadas escenas sin camiseta lo volvieron icónico. Desde la cuarta temporada, Munck fue parte del elenco principal.

Nickelodeon incluso grabó un piloto para un spin-off llamado Gibby, donde el personaje trabajaba en un centro recreativo y ayudaba a niños a defenderse del bullying. El episodio nunca se emitió oficialmente, pero una versión filtrada circula por internet. A pesar de ese intento por desarrollarlo más allá del cliché, el proyecto fue cancelado y Munck decidió tomar otro camino.

¿Qué pasó con Noah Munck después de iCarly?

Aunque su carrera actoral continuó, Munck buscó alejarse de los reflectores. Apareció en comedias como The Goldbergs (2014-2023), donde interpretó a “Naked” Rob, un personaje que, irónicamente, también se quitaba la camiseta. Participó en películas como Bad Teacher y series como ER o Arrested Development, pero poco a poco su presencia en pantalla se volvió menos frecuente.

Lo que sí despegó fue su faceta creativa. Bajo los seudónimos NoxiK y SADWORLDBEATS, produce música electrónica experimental. También dirige su propio canal de YouTube (Sadworld), donde crea sketches surrealistas con un humor oscuro y visualmente cargado, lejos de la estética infantil de Nickelodeon. Su contenido ha acumulado millones de vistas y refleja una necesidad de distanciarse del Gibby que todos recuerdan.

 

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Munck estudió cine y artes mediáticas en la Universidad de Biola y ha estado vinculado con causas sociales, como Camp Del Corazon, un campamento para niños con enfermedades cardíacas. Su hermano menor, Ethan Munck, quien interpretó a Guppy (el hermanito de Gibby), sí apareció brevemente en el revival.

¿Y Gibby en el reboot?

Curiosamente, la nueva versión de iCarly no explica qué pasó con Gibby. A diferencia de Sam, cuya ausencia se aborda en el primer episodio, el personaje simplemente no existe. Nathan Kress y Jerry Trainor dijeron en una entrevista que “es muy Gibby no saber dónde está”, pero esa respuesta parece más un escape que una decisión narrativa.

Quizá los creadores aún guardan la esperanza de un regreso. Pero para quienes conocen la historia completa, lo más sano —y justo— fue que Munck eligiera cuidarse.

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