Dólares frescos: a cuánto llegan los fondos que recibirá Argentina más allá del FMI
Hay desembolsos pendientes por líneas de crédito ya aprobadas. Podrían sumarse a la plata que viene del FMI. Qué hará el Gobierno con ese dinero

En medio de las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) por un nuevo acuerdo, el Gobierno tiene fondos de organismos multilaterales pendientes que todavía no recibió. En paralelo al entendimiento con el FMI, negocia por más desembolsos adicionales.
La negociación también podría traer beneficios para las provincias. Si llega el dinero prometido, ira al Banco Central (BCRA) y a obra pública.
Un trabajo de UBS pronosticó que el entendimiento traerá u$s 20 mil millones , de los cuáles cerca de u$s 14 mil millones será para refinanciar vencimientos. El martes, una reunión del FMI dejó frases alentadoras para Argentina.
Al margen que esa sea la cifra final con el FMI, el Gobierno tiene otra vía -complementaría- para reforzar las reversas internacionales: los desembolsos pendientes con organismos multilaterales de líneas de crédito vigentes.
El sitio oficial del Ministerio de Economía informa que en cartera activa hay 237 operaciones por un monto total de u$s 32.912 millones, que un 36% corresponde al Banco Interamericano de Desarrollo (BID); 17% al Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF); 19% de "Bilateral". Gráfico "Organismo financiador" extraído del sitio oficial del Ministerio de Economía.
Mientras que 17% se explica por el Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF). Un rango más abajo se ubica el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) que representa el 3%, seguido por el Fondo Financiero para el Desarrollo de los Países de la Cuenca del Plata (Fonplata) 1%.
Pero del total más de u$s 32.000 millones, aún queda un importante parte que debe desembolsarse. A nivel del BID -que se lleva el mayor porcentaje sobre el total-, por líneas de crédito autorizadas quedan pendiente un total de u$s 6.233 millones, según cifras oficiales de la cartera de conduce Luis Caputo.
Mientras que del BIRF sobre un monto total de u$s 8.009 millones apenas se han desembolsado u$s 3.720 millones, lo que arroja una diferencia de u$s 4.289 millones tanto para proyectos que se encuentran en ejecución avanzada como que aún no han empezado.
Win-win con los gobernadores
A la par de las negociaciones con el FMI, el Gobierno entabló reuniones con gobernadores aliados en el Congreso, claves en las sesiones extraordinarias y el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU), a quienes se le prometió la reactivación de obra pública por medio de organismos internacionales.
En los primeros días de febrero, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, el vicejefe de Gabinete de Interior, Lisandro Catalán, el ministro de Economía, Luis Caputo, y el secretario de Finanzas, Pablo Quirno, mantuvieron una seguidilla de reuniones con los mandatarios de cinco provincias.
En Hipólito Yrigoyen 250, se les ofreció reactivar obra pública a través de una nueva modalidad que no afectaría las arcas nacionales a los mandatarios de Salta, Gustavo Sáenz (Identidad Salteña); Tucumán, Osvaldo Jaldo (Unión por la Patria); Jujuy, Carlos Sadir (Unión Cívica Radical, UCR); Misiones, Hugo Passalacqua (Frente Renovador de la Concordancia Social); y Catamarca, Raúl Jalil (UP).
"Están destrabando el tema del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y los préstamos internacionales", comentó a El Cronista, una fuente de primera línea en las negociaciones. Una alternativa que quedo sobre la mesa desde el viaje de Caputo a Estados Unidos en octubre de 2024.
La jugada se trataría de un win-win para el director de Analytica, Claudio Caprarulo. "Si las firmas la hacen directamente las provincias, el endeudamiento corre por cuenta de ellas y no del Gobierno Nacional. Si se las gestionaron pueden utilizarlo políticamente. Pero también le sirve al equipo económico porque llegan dólares al BCRA, todos salen beneficiados si la obra se termina ejecutando", sostuvo.
Un opositor que conoce de negociaciones con organismo multilaterales cree que el Gobierno va a intentar tomar todas las líneas de crédito nuevas para reforzar las reservas internacionales y luego desarrollará una parte mínima de la obra.
Una posibilidad que fue descartada, o que en teoría no se podría hacer, por Caprarulo quien aseguró que los prestamos son contra ejecución. "Si una provincia firma un convenio con un organismo internacional, los desembolsos se dan a medida que la obra avanza. Se puede quedar con el adelanto financiero, pero no mueve la aguja", sostuvo.