Cuatro mil ejemplares diferentes: este es el museo de las mariposas que puedes visitar en este pueblo de Lleida
Fruto del trabajo de investigación de un matrimonio de la zona, el Museo de las Mariposas de Catalunya exhibe ejemplares únicos y promueve la investigación y acciones de conservación de la biodiversidad del Alt PirineuObjetivo: 'resucitar' la primera mariposa extinguida por los humanos Son hermosas, inspiradoras y sorprendentes. Pero también delicadas, singulares y dignas de ser protegidas: las mariposas, más allá de su belleza, constituyen todo un universo natural poco conocido, tanto por las comunidades locales de sus hábitats como por la ciencia en general, con un sinfín de especies, muchas de ellas endémicas o en peligro de extinción. Para avanzar en su difusión, precisamente, abrió sus puertas un singular museo en Ribera de Cardós, Lleida, donde se han reunido más de 30.000 ejemplares, de los cuales, 4.400 se exhiben al público. El Museo de las Mariposas de Catalunya, además, complementa la parte expositiva y divulgativa con numerosas actividades para toda la familia, visitas guiadas e incluso itinerarios a través de la naturaleza en grupos muy reducidos donde se enseña a los visitantes cómo observar, cuidar y proteger la biodiversidad. En el museo, podemos encontrar piezas absolutamente singulares, como su joya, un ejemplar único de la mariposa descubierta en Andorra en 1994, u otro de “la mariposa más grande del mundo”. Pero también una colección de insectos invasores, un particular lepidóptero que es macho en la parte izquierda y hembra en la parte derecha, o incluso un tipo de preinsecto fosilizado de más de 500 millones de años de antigüedad. 50 años de trabajo Una colección zoológica que está considerada como una de las más importantes de Catalunya y del conjunto del Estado y que es fruto de más de 50 años de trabajos de investigación por parte del matrimonio formado por Alfons Dolsa y María Teresa. A los ejemplares conservados se une, como no podía ser de otra manera, una rigurosa colección de documentos históricos de gran valor y bases de datos sobre este tipo de insectos desde el siglo XIX, lo que convierte este centro en un referente para investigadores de todo el mundo. Desde el Museo de las Mariposas explican que Catalunya es una de las tres zonas con mayor biodiversidad de Europa, un valor como ecosistema de gran interés para el estudio de la entomología. Por ello, vinculado a este proyecto divulgativo, se desarrolla un estudio en paralelo para conocer mejor las poblaciones de mariposas en la comarca del Alt Pirineu. Una investigación en el marco del programa Catalan Butterfly Monitoring Scheme, coordinado por el Museo de Ciencias Naturales de Granollers, que trata de documentar las poblaciones de lepidópteros, pero también los cambios en sus poblaciones para poder detectar a tiempo las amenazas que se ciernen sobre ellas debido al cambio climático y poder actuar en su conservación. Este programa, al igual que el propio museo, trata de explicar también por qué son importantes las mariposas para nuestros ecosistemas: entre otras funciones, representan un importante biomarcador sobre la salud de la vegetación de su hábitat o sobre las variaciones pluviométricas y climáticas, además de ser consumidoras primarias de especies vegetales, presa de numerosas especies de aves e incluso aliadas de actividades sostenibles como la ganadería extensiva, en contraposición con las explotaciones intensivas del Alt Pirineu, donde se han contabilizado 168 especies de mariposas diurnas, el 82% de toda la fauna catalana. Y es que una de las conclusiones de esta investigación muestra su relación con los pastos de uso extensivo leve, ya que ese tipo de prados suponen un refugio plagado de mariposas.

Fruto del trabajo de investigación de un matrimonio de la zona, el Museo de las Mariposas de Catalunya exhibe ejemplares únicos y promueve la investigación y acciones de conservación de la biodiversidad del Alt Pirineu
Objetivo: 'resucitar' la primera mariposa extinguida por los humanos
Son hermosas, inspiradoras y sorprendentes. Pero también delicadas, singulares y dignas de ser protegidas: las mariposas, más allá de su belleza, constituyen todo un universo natural poco conocido, tanto por las comunidades locales de sus hábitats como por la ciencia en general, con un sinfín de especies, muchas de ellas endémicas o en peligro de extinción.
Para avanzar en su difusión, precisamente, abrió sus puertas un singular museo en Ribera de Cardós, Lleida, donde se han reunido más de 30.000 ejemplares, de los cuales, 4.400 se exhiben al público. El Museo de las Mariposas de Catalunya, además, complementa la parte expositiva y divulgativa con numerosas actividades para toda la familia, visitas guiadas e incluso itinerarios a través de la naturaleza en grupos muy reducidos donde se enseña a los visitantes cómo observar, cuidar y proteger la biodiversidad.
En el museo, podemos encontrar piezas absolutamente singulares, como su joya, un ejemplar único de la mariposa descubierta en Andorra en 1994, u otro de “la mariposa más grande del mundo”. Pero también una colección de insectos invasores, un particular lepidóptero que es macho en la parte izquierda y hembra en la parte derecha, o incluso un tipo de preinsecto fosilizado de más de 500 millones de años de antigüedad.
50 años de trabajo
Una colección zoológica que está considerada como una de las más importantes de Catalunya y del conjunto del Estado y que es fruto de más de 50 años de trabajos de investigación por parte del matrimonio formado por Alfons Dolsa y María Teresa. A los ejemplares conservados se une, como no podía ser de otra manera, una rigurosa colección de documentos históricos de gran valor y bases de datos sobre este tipo de insectos desde el siglo XIX, lo que convierte este centro en un referente para investigadores de todo el mundo.
Desde el Museo de las Mariposas explican que Catalunya es una de las tres zonas con mayor biodiversidad de Europa, un valor como ecosistema de gran interés para el estudio de la entomología. Por ello, vinculado a este proyecto divulgativo, se desarrolla un estudio en paralelo para conocer mejor las poblaciones de mariposas en la comarca del Alt Pirineu.
Una investigación en el marco del programa Catalan Butterfly Monitoring Scheme, coordinado por el Museo de Ciencias Naturales de Granollers, que trata de documentar las poblaciones de lepidópteros, pero también los cambios en sus poblaciones para poder detectar a tiempo las amenazas que se ciernen sobre ellas debido al cambio climático y poder actuar en su conservación.
Este programa, al igual que el propio museo, trata de explicar también por qué son importantes las mariposas para nuestros ecosistemas: entre otras funciones, representan un importante biomarcador sobre la salud de la vegetación de su hábitat o sobre las variaciones pluviométricas y climáticas, además de ser consumidoras primarias de especies vegetales, presa de numerosas especies de aves e incluso aliadas de actividades sostenibles como la ganadería extensiva, en contraposición con las explotaciones intensivas del Alt Pirineu, donde se han contabilizado 168 especies de mariposas diurnas, el 82% de toda la fauna catalana. Y es que una de las conclusiones de esta investigación muestra su relación con los pastos de uso extensivo leve, ya que ese tipo de prados suponen un refugio plagado de mariposas.