Un cortijo lleno de encanto y detalles estilosos
La de Ellie y James es de esas historias que solo se dan en las películas. Son dos escoceses con pasión por Andalucía que se encontraron y se enamoraron en Vejer de la Frontera por casualidad. De eso hace ya 10 años y, ahora, aunque su acento los delate, parecen un matrimonio “de los de toda la vida” de este encantador pueblo encalado, donde se han ganado el corazón de locales y forasteros. “Compramos esta casa de arquitectura tradicional. Estaba en mal estado y la reformamos por completo. Es una mezcla de nuestros gustos - el mío es más relajado, el de James más clásico - y de nuestro amor por el sur, con guiños a nuestras raíces”, explica Ellie, interiorista de profesión en Ellie Cormié Interiors, y encargada de dar vida a esta propiedad de los años 70.La casa más bonita del mundoEs, posiblemente, de las casas más especiales que puedas ver hoy, donde la personalidad, la tradición y un gusto exquisito se dan la mano para llevarnos de viaje a lugares lejanos sin movernos del sur. El duende era esto. Vamos a verla.
La de Ellie y James es de esas historias que solo se dan en las películas. Son dos escoceses con pasión por Andalucía que se encontraron y se enamoraron en Vejer de la Frontera por casualidad. De eso hace ya 10 años y, ahora, aunque su acento los delate, parecen un matrimonio “de los de toda la vida” de este encantador pueblo encalado, donde se han ganado el corazón de locales y forasteros. “Compramos esta casa de arquitectura tradicional. Estaba en mal estado y la reformamos por completo. Es una mezcla de nuestros gustos - el mío es más relajado, el de James más clásico - y de nuestro amor por el sur, con guiños a nuestras raíces”, explica Ellie, interiorista de profesión en Ellie Cormié Interiors, y encargada de dar vida a esta propiedad de los años 70.
La casa más bonita del mundo
Es, posiblemente, de las casas más especiales que puedas ver hoy, donde la personalidad, la tradición y un gusto exquisito se dan la mano para llevarnos de viaje a lugares lejanos sin movernos del sur. El duende era esto. Vamos a verla.