Tercera generación de la terapia CAR-T: un nuevo horizonte en la lucha contra el cáncer

En los últimos años, ha surgido una forma revolucionaria de tratar ciertos tipos de cáncer llamada terapia CAR-T. Se basa en usar nuestras propias defensas —las células del sistema inmune— para atacar a las células cancerosas. Aunque ya ha cambiado la vida de muchos pacientes, especialmente con leucemias y linfomas, los científicos siguen mejorándola. Ahora, … Continuar leyendo "Tercera generación de la terapia CAR-T: un nuevo horizonte en la lucha contra el cáncer"

May 1, 2025 - 06:42
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Tercera generación de la terapia CAR-T: un nuevo horizonte en la lucha contra el cáncer

En los últimos años, ha surgido una forma revolucionaria de tratar ciertos tipos de cáncer llamada terapia CAR-T. Se basa en usar nuestras propias defensas —las células del sistema inmune— para atacar a las células cancerosas. Aunque ya ha cambiado la vida de muchos pacientes, especialmente con leucemias y linfomas, los científicos siguen mejorándola. Ahora, hablamos de una tercera generación de esta terapia, aún más poderosa y duradera.

La terapia con células T con receptores de antígenos quiméricos (CAR-T) ha transformado el tratamiento de ciertos cánceres hematológicos. La tercera generación de CAR-T representa un avance significativo, incorporando múltiples dominios coestimuladores para mejorar la eficacia y persistencia de las células T modificadas.

¿Qué es exactamente la terapia CAR-T?

Las células T, una parte clave del sistema inmunitario, tienen la capacidad de identificar y eliminar células anómalas, como las cancerosas. La terapia CAR-T consiste en extraer estas células del paciente, modificarlas genéticamente en el laboratorio para que reconozcan de forma precisa las células tumorales, y luego reintroducirlas en el cuerpo para que actúen de manera más eficaz y dirigida contra el cáncer.

¿Cómo se hace esto? Se extraen esas células de la sangre del paciente y se modifican en un laboratorio. Allí se les añade una especie de GPS molecular (el llamado (receptor CAR) para que puedan encontrar el cáncer. Después, se vuelven a introducir en el cuerpo y comienzan su misión.

En la primera y segunda generación, esas células modificadas ya sabían detectar al enemigo. Pero a veces, se cansaban demasiado pronto o no atacaban con suficiente fuerza, algo tan potente como el cáncer.

La tercera generación de CAR-T mejora esto. ¿Cómo? Añadiendo nuevas señales internas a las células para que sean más resistentes, actúen durante más tiempo y destruyan mejor el tumor.

Aunque esta nueva generación aún está en fase experimental, ya se han hecho ensayos clínicos en países como:

  • Alemania, con pacientes de leucemia, donde se han visto respuestas completas y menos efectos secundarios.
  • Nueva Zelanda, donde la terapia mostró mejoras en linfomas sin causar efectos neurológicos.
  • Estados Unidos, con buenos resultados en personas con cánceres resistentes que ya habían probado otras terapias.

Principalmente, se está probando en personas con cánceres de sangre difíciles de tratar: leucemias, linfomas y mielomas. Pero la tercera generación abre la puerta a intentar combatir también tumores sólidos, como el de páncreas o el de tiroides, algo que las versiones anteriores no lograban con eficacia.

Como toda terapia potente, no está libre de efectos secundarios. Algunas personas pueden tener fiebre, fatiga extrema o inflamación. Pero la tercera generación parece provocar menos complicaciones graves que las anteriores.

Además, todavía es cara y no está disponible en todos los países. Pero los expertos creen que en pocos años podría estar más extendida y al alcance de más pacientes.

Avances globales en la terapia de tercera generación

Suecia: Ensayo clínico en linfoma y leucemia

Un estudio de fase I/IIa en Suecia evaluó CAR-T de tercera generación dirigidos a CD19 en pacientes con linfoma y leucemia linfoblástica aguda refractarios o en recaída. Los resultados preliminares mostraron respuestas completas en varios pacientes, con una persistencia prolongada de las células CAR-T y un perfil de seguridad aceptable.​

Alemania: Tratamiento en leucemia linfocítica crónica

Investigadores alemanes desarrollaron HD-CAR-1, una terapia CAR-T de tercera generación para pacientes con leucemia linfocítica crónica refractaria. En un ensayo de fase 1/2, el 67% de los pacientes alcanzaron una remisión completa, y el 83% de ellos presentaron enfermedad mínima residual indetectable. La terapia mostró una toxicidad baja, sin casos de neurotoxicidad.

Nueva Zelanda: Innovación en linfoma no Hodgkin

El Instituto Malaghan de Investigación Médica desarrolló una terapia CAR-T de tercera generación que combina los dominios coestimuladores CD28 y TLR2. En un ensayo de fase 1 con 21 pacientes con linfoma B no Hodgkin, la terapia mostró una tasa de respuesta completa del 52% a los 3 meses, sin casos de neurotoxicidad y con una incidencia reducida de síndrome de liberación de citocinas.