Mosaicos y cerámicas antiguas muestran escenas de gladiadores atacados por leones en espectáculos de la antigua Roma. Textos de la época también describen esas escenas sangrientas. Ahora, un equipo internacional de investigadores ha descubierto en Driffield Terrace , uno de los cementerios de gladiadores mejor conservados del mundo, a las afueras de York (Inglaterra), el esqueleto de un joven fornido con marcas de mordeduras de un gran felino, probablemente un león. Se trata de la primera evidencia física de combate entre humanos y animales en el período romano. Driffield Terrace, de 1.800 años de antigüedad, se encuentra en la calzada romana que salía de York hacia Tadcaster. Allí fueron enterrados 82 hombres jóvenes, cuyos restos comenzaron a recuperarse en 2004....
Ver Más