No son Adán y Eva: un estudio descubrió que descendemos de dos ancestros en común

Un nuevo estudio reveló detalles sobre la historia de separación y reencuentro de nuestros antepasados hace miles de años. ¿De dónde proviene la especie humana moderna?

Mar 27, 2025 - 22:05
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No son Adán y Eva: un estudio descubrió que descendemos de dos ancestros en común

Durante siglos, la especie humana ha sido objeto de fascinación y estudio. Desde Charles Darwin hasta los genetistas contemporáneos, los científicos trataron de reconstruir nuestro pasado para entender de dónde venimos. 

A lo largo de los años, las teorías predominantes coincidieron en que el Homo sapiens se originó en África hace entre 200.000 y 300.000 años, descendiendo de un único linaje ancestral. 

Sin embargo, un nuevo estudio de la Universidad de Cambridge desafía esta visión. A través del análisis de secuencias genómicas completas, los investigadores descubrieron que nuestra especie no desciende de un solo grupo humano antiguo, sino de al menos dos poblaciones ancestrales.

No fueron Adán y Eva: ¿quiénes son nuestros ancestros?

La investigación, publicada en la revista Nature Genetics, reveló que hace aproximadamente 1,5 millones de años, dos poblaciones humanas divergieron en líneas separadas, evolucionando de manera independiente. 

Fuente: Universidad de Cambridge.

Sin embargo, hace alrededor de 300.000 años, estas dos poblaciones se reencontraron y comenzaron a mezclarse genéticamente. De esta combinación, una población aportó cerca del 80% del material genético de los humanos modernos, mientras que la otra contribuyó con el 20% restante. 

Los científicos señalaron que, en comparación con la unión entre los neandertales y los denisovanos, que ocurrió hace unos 50.000 años, esta mezcla descubierta tuvo un impacto mucho más profundo en la composición genética de los Homo sapiens actuales. 

Cuál fue el método de investigación

Para llevar a cabo la investigación, el equipo de Cambridge no recurrió a ADN extraído de restos fósiles, sino que analizó datos genéticos humanos modernos del Proyecto 1000 Genomas, una base de datos con secuencias de ADN de poblaciones de todo el mundo. 

Utilizando un innovador algoritmo computacional denominado "cobraa", los científicos modelaron cómo estas antiguas poblaciones humanas se separaron y luego volvieron a fusionarse. 

Fuente: Shutterstock. 

El estudio también encontró evidencia de que, tras la división inicial, una de las poblaciones sufrió una drástica reducción en su tamaño, pasando por un "cuello de botella" antes de crecer lentamente durante un millón de años. Luego, esta misma población se convirtió en la principal contribuyente del ADN de los humanos modernos. 

Las pruebas fósiles indican que especies como Homo erectus y Homo heidelbergensis habitaron África y otras regiones en ese período, lo que las convierte en candidatas probables para estas poblaciones ancestrales. Sin embargo, será necesario realizar más investigaciones para identificar cuáles de estos grupos fueron los verdaderos ancestros de la humanidad moderna.

¿Cuál es el impacto de este descubrimiento en la comprensión de la evolución humana?

Más allá de demostrar la existencia de dos ancestros genéticos principales, el estudio arroja luz sobre cómo ciertos genes provenientes de la población minoritaria pudieron haber desempeñado un papel crucial en la evolución del cerebro y el desarrollo cognitivo. 

Fuente: Pixabay. 

Además, se identificó un proceso conocido como "selección purificadora", mediante el cual la selección natural eliminó gradualmente mutaciones perjudiciales en los genes heredados de la segunda población, asegurando su integración en el genoma humano moderno.

El hallazgo también desafía la idea de que la evolución humana siguió un camino lineal y exclusivo. En cambio, sugiere que el mestizaje y el intercambio genético fueron procesos fundamentales en la aparición de nuevas especies a lo largo del tiempo.