Migrañas crónicas: el primer síntoma que no debés ignorar para detectarlas a tiempo
Si tenés este síntoma puede que se trate de un trastorno crónico. Enterate de qué se trata.

El dolor de cabeza es una molestia común que la mayoría de las personas experimenta en algún momento de su vida. Sin embargo, lo que comienza como una molestia episódica puede evolucionar hacia un problema crónico si los episodios se repiten con frecuencia.
Aunque muchas veces se normaliza el dolor, prestarle atención a ciertos síntomas podría marcar la diferencia entre una migraña ocasional y un trastorno que, si no se trata a tiempo, puede volverse debilitante.
¿Qué es la migraña?
La migraña es un trastorno neurológico caracterizado por un dolor de cabeza intenso, generalmente localizado en un solo lado de la cabeza, y que puede durar entre 4 y 72 horas. Se presenta con síntomas adicionales como náuseas, vómitos, alteraciones visuales y una sensibilidad extrema a los estímulos sensoriales.
Según Mayo Clinic, las migrañas afectan a niños, adolescentes y adultos, quienes pueden pasar por todas o algunas de estas cuatro etapas:
- Pródromo: ocurre uno o dos días antes del dolor. Se manifiesta con señales sutiles como cambios de ánimo, antojos, estreñimiento, rigidez en el cuello, bostezos frecuentes y retención de líquidos. Es una advertencia de que se aproxima una migraña.
- Aura: no todas las personas la experimentan. Se presenta justo antes o durante la migraña e incluye síntomas visuales (luces, formas, pérdida de visión), sensaciones de hormigueo o entumecimiento, y dificultad para hablar. Dura hasta una hora.
- Ataque: es el episodio principal. Dura entre 4 y 72 horas e incluye dolor pulsátil en uno o ambos lados de la cabeza, sensibilidad a la luz y el sonido, náuseas o vómitos.
- Postdromo: tras el dolor, puede haber fatiga, confusión, debilidad o euforia. Algunos movimientos bruscos de la cabeza pueden reactivar brevemente el dolor.
Migraña: ¿cómo pasa a ser un trastorno crónico?
La migraña se vuelve crónica cuando una persona presenta dolor de cabeza durante 15 o más días al mes, por al menos tres meses consecutivos, y en al menos 8 de esos días se manifiestan síntomas característicos de migraña.
Esta forma crónica afecta profundamente la calidad de vida, ya que la frecuencia del dolor y sus síntomas asociados dificultan el funcionamiento normal en el trabajo, los estudios o las relaciones personales.
Entre los factores que pueden convertir una migraña episódica en crónica se encuentran:
- El uso excesivo de medicamentos para el dolor.
- La falta de eficacia de los tratamientos iniciales.
- Trastornos médicos coexistentes como ansiedad, depresión o insomnio.
- Estrés prolongado o cambios importantes en la vida.
Detectar la progresión hacia la forma crónica a tiempo permite actuar con un plan de tratamiento adecuado y evitar que se intensifiquen los síntomas.
¿Cuál es el síntoma clave para detectar la migraña crónica?
El principal síntoma que no debe pasarse por alto es la frecuencia del dolor de cabeza. Cuando los episodios comienzan a repetirse cada vez con mayor regularidad, hasta alcanzar más de 15 días al mes, se debe considerar la posibilidad de estar ante una migraña crónica.
Muchas veces se normaliza el uso de analgésicos o se minimiza la intensidad del dolor, pero prestar atención a esta recurrencia es vital. Especialistas recomiendan llevar un registro de los días con dolor, su duración, intensidad y cómo se tratan, para ayudar al diagnóstico clínico.
¿Cuáles son las causas de la migraña?
Aunque no existe una única causa definida, se cree que la migraña tiene un componente genético y neurológico. Las investigaciones apuntan a desequilibrios en sustancias químicas del cerebro, como la serotonina, y la activación de vías nerviosas como el nervio trigémino.
También se identificaron algunos desencadenantes comunes:
- Cambios hormonales.
- Estrés emocional o físico.
- Falta o exceso de sueño.
- Luces brillantes, sonidos intensos o ciertos olores.
- Cambios climáticos o presión atmosférica.
- Algunos alimentos, como los quesos curados, el chocolate y el alcohol.
- Medicamentos vasodilatadores o anticonceptivos.
¿Cómo calmar el dolor de migraña?
Si bien no existe una cura definitiva para la migraña, hay tratamientos que ayudan a controlar y reducir la frecuencia e intensidad de los ataques. Entre ellos se encuentran:
- Medicamentos.
- Cambios en el estilo de vida: evitar desencadenantes, mantener horarios regulares de sueño y alimentación.
- Remedios naturales: el uso de jengibre, aceite esencial de lavanda, compresas frías, yoga y masajes puede aliviar los síntomas.
- Suplementos nutricionales: magnesio y vitaminas del complejo B son beneficios en algunos pacientes.
- Técnicas de manejo del estrés, como la meditación, escritura terapéutica o ejercicios de respiración.
Además de tomar ciertos recaudos en nuestra rutina, es importante consultar con un profesional de la salud para encontrar el tratamiento más adecuado y evitar complicaciones como el abuso de analgésicos, que puede empeorar el cuadro.