Los bancos más escuchados en Wall Street recortan proyección para el S&P500, ¿cómo encarar el clima adverso?
Los bancos de inversión esperan que la guerra comercial declarada por Donald Trump afecte las ganancias corporativas y recortan sus estimaciones de suba para el S&P500. ¿Qué recomiendan?

Los comentarios de Trump imprimen mayor volatilidad al mercado. La guerra comercial desatada por el mandatario estadounidense es vista por los grandes bancos de inversión como una señal negativa y que afectará al nivel de actividad y crecimiento a mediano plazo.
Esperan que la guerra comercial afecte las ganancias corporativas, por lo que recortan estimaciones de suba para el S&P500. Recomiendan selectividad, sectores defensivos y cautela en medio de la mayor tensión financiera.
Mercado en modo "sube y baja"
La volatilidad en Wall Street es elevada y se ve reflejada en movimientos en forma de pico, con fuertes subas seguidas de abruptas caídas.
El mercado se mueve en función de los comentarios de Trump y de las especulaciones de que la guerra comercial entre EEUU y las demás economías pueda ceder, a la vez que festeja o se alarma con lo que pueda hacer el presidente de EEUU respecto al futuro de Jerome Powell, el presidente de la Reserva Federal (Fed).
En las últimas horas el mercado se tornó más negativo ya que los ataques de Trump sobre Powell afectaron las expectativas económicas, mostrando preocupación de los inversores sobre la futura independencia del Banco Central de EEUU y su capacidad de resolver los desafíos macro actuales y futuros.
Sin embargo, ayer Trump dijo que no pensaba despedir a Powell a pesar de que se demora en recortar la tasa de interés, y como resultado, el mercado rebotó con fuerza.
La mirada de los grandes bancos
En este contexto de subas y bajas, al menos 10 bancos de Wall Street se muestran más pesimistas sobre el futuro de las acciones y recortaron drásticamente sus objetivos para el S&P500 en las semanas posteriores a la decisión de Trump de imponer un arancel base del 10% a la mayoría de las importaciones estadounidenses y el aumento de los aranceles recíprocos.
El banco de inversión BMO redujo su estimación de este año para el S&P500 desde 6750 a 6300 puntos. Por su parte, Bank of América (BofA) redujo desde los 6700 a 5600 puntos su expectativa para el S&P500.
Casos como Citi, Goldman Sachs y JP Morgan esperaban que el S&P500 cierre este año en 6500 puntos, pero ahora el Citi espera que lo haga en 5800 puntos, Goldman proyecta un cierre en 5600 puntos y JP Morgan, 5200 puntos.
Otros bancos como Evercore, Societe Generale, Royal Bank of Canadá y Oppenheiumer también redujeron sus expectativas de subas para el S&P500.
Los bancos de inversión se mantienen pesimista sobre futuro en el S&P500 ya que entienden que las consecuencias económicas de la guerra comercial serán inevitables, afectando el crecimiento económico, o incluso desencadenar una recesión, lo que golpearía las ganancias de las empresas estadounidenses que cotizan en bolsa.
El objetivo promedio de Wall Street para el S&P 500 a fin de año se sitúa ahora en 6012, en comparación con los 6539 puntos de finales del año pasado.
Las nuevas previsiones implican que, a pesar de la creciente preocupación por la desaceleración del crecimiento económico, los estrategas esperan que el índice suba un 14 % en los próximos meses.
Esto representaría una ganancia de tan solo el 2% para 2025, una importante desaceleración respecto a los repuntes consecutivos de más del 20% en 2023 y 2024.
Federico Filippini, Chief Economist de Adcap Grupo Financiero, agregó que la economía de EEUU, y el mercado financiero, dependen fuertemente el cómo se continua desarrollando la guerra comercial.
Cómo enfrentar el pronóstico más negativo
Además, advierte que no es momento de activos de riesgo y su perspectiva para el S&P500 es negativa en tanto se mantenga la incertidumbre por la economía de EEUU
"Mientras que la pausa de 90 días fue bienvenida, la probabilidad de que la economía vaya rumbo a una estanflación se mantiene elevada. En ese escenario, tanto el mercado de acciones como los bonos sufren. Típicamente, cuando EEUU entra en un escenario de poco crecimiento y expectativas sostenidas de inflación, los mercados emergentes y el oro, tienen una mejor performance", dijo Filippini.
Matías Mininni, Portfolio Manager Investment Ideas en Balanz, indicó que dada la volatilidad actual, la estrategia más conveniente resulta de apostar a mediano plazo.
"En este entorno, la volatilidad castiga a quienes intentan anticiparse a los valores buscando resultados inmediatos. En cambio, empieza a premiar a quienes, con paciencia, comienzan a armar posiciones en activos castigados, apostando a capturar valor en el próximo ciclo alcista. No es un momento para adivinar pisos, sino para construir con perspectiva", explicó.
En cuanto a las causas de la fuerte caída en el mercado, Mininni remarcó que la visión más pesimista por parte de los bancos de inversión en Wall Street se debe a que las trabas que complican la logística global, los riesgos políticos sobre empresas clave como Nvidia, y el escenario macro cada vez más denso.
"Cada capa suma incertidumbre. El combo de tasas altas, tensiones globales y desaceleración del crecimiento dibuja un contexto difícil de modelar. En ese marco, el recorte de expectativas sobre el SP500 no es pesimismo, sino un ajuste lógico ante un mercado expuesto a riesgos no tradicionales", afirmó.
Más volatilidad y manteniendo la cautela
En medio de la mayor volatilidad, el S&P500 acumula una caída del 13,9% desde los máximos previos alcanzados a comienzo de este año.
A su vez, la volatilidad se disparó este año a máximos desde la pandemia, con el VIX alcanzando niveles de 50 puntos, para luego retroceder hasta los valores actuales de 28 puntos.
Pese al retroceso reciente, aun el índice de volatilidad permanece un 100% por encima de los valores de comienzo de año.
Ante el contexto de mayor tensión y volatilidad, los analistas mantienen la cautela.
Joaquín Álvarez, CEO de IMSA Alyc, considera que aun el mercado no tiene incluido en los precios el peor de los escenarios todavía.
"Si bien venimos con caída fuerte en los índices, las proyecciones tanto en los múltiplos y caída en las ganancias de las empresas, creemos que el potencial bajista todavía puede ser más bajo. Estamos en un contexto de incertidumbre donde parte de la agenda política está generando movimientos muy abruptos y empezamos a ver que esto afecta en el sentimiento de las empresas y en el consumidor americano, lo cual es un riesgo muy fuerte", alertó.
Por su parte, Martin Polo, estratega jefe de Cohen agregó que la política exterior de Trump generó un shock en los mercados globales y los riesgos de una estanflación global aumentaron notablemente.
"En el "Liberation Day", el presidente americano anunció un fuerte incremento de aranceles que superaron ampliamente las expectativas. Si bien suspendió la medida de aranceles recíprocos por 90 días a todos los países, dejó afuera a China, a quien incluso se los subió aún más. Con la respuesta "con la misma moneda" por parte de los asiáticos, la guerra comercial parece definirse entre las dos principales potencias económicas y militares del planeta, lo que representa un riesgo considerable para el resto del mundo", alertó.
Además, agregó que "esperable ver un contexto antinflacionario, trayendo más volatilidad en Wall Street".
Pablo Lazzati CEO de Insider Finance, se mantiene con cautela sobre las acciones en Wall Street.
"Por el momento, con respecto al S&P, desde Insider Finance estamos en una posición de "Wait and see" debido a que por 90 todavía no están aplicados los aranceles y no sabemos si los nuevos aranceles van a ser más altos o más bajos de los último que se negociaron. Así que, no vemos momento de ingresar a EEUU", sostuvo.
Acciones defensivas
El mercado americano se encuentra indefectiblemente en un proceso correctivo. El S&P500 cae 10% este año, mientras que el Nasdaq cae 17%.
Sectores como el aerocomercial retroceden 25%, así como el de tecnología a largo plazo (ARKK) que cae 18,8%.
En medio del ajuste actual, hay sectores que muestran una sólida performance.
Entre ellos se encuentran el sector de mineras de oro, que gana 48% este año, impulsados también por el rally del metal precioso, el cual opera en máximos históricos.
Otros sectores como el de consumo básico, servicios y real estate también operan con subas en 2025, avanzando entre 4,6% y 1,8% este año.
A su vez, entre los sectores que menos caen se encuentran el de salud (-1,2%), financiero (-1,8%), materiales (3,2%) y energético (-5%).
En medio del contexto de mayor volatilidad, los analistas priorizan acciones y sectores más defensivos.
Ignacio Murua, analista de Grupo SBS, afirmó que el ajuste actual del mercado se da desde valuaciones elevadas con las que operaban las acciones en Wall Street.
"El mercado americano había quedado peligrosamente caro luego de lo que fue un 2024 record, con las valuaciones del mercado llegando a niveles realmente elevados. El S&P500 llego a cotizar a casi 23x las ganancias esperadas de 2025 a fin de año", recordó
Murua agregó que ahora, tras el ajuste del mercado, las valuaciones se encuentran algo más razonables hoy en día, aunque aún está lejos de estar barato.
"Creemos que, en la medida que EEUU logré evitar una recesión, un punto de entrada entre 4800 y 5000 para el S&P500 tiene mucho sentido. Creemos que no está barato aunque si tiene sentido, sobretodo si invertimos un largo horizonte de inversión", detalló.
Sin embargo, también advirtió que las expectativas se van bastante más abajo si la principal economía del mundo entra en recesión.
"En ese caso podríamos ver el S&P500 cotizando cerca (o por debajo) de los 4000 puntos. Es por eso que, pese a la tentación que genera ver el desplome de ciertas compañías (principalmente las tecnológicas), recomendamos cautela y prudencia a la hora de invertir. No siempre es la mejor idea comprar la caída", indicó.
En cuanto a las oportunidades de inversión, Murua recomendó selectividad y buscar compañías más estables y que no dependan en gran medida del crecimiento para mantener o hacer crecer sus negocios.
"Compañías como Coca Coal, Walmart, Costco, Philip Morris, Procter & Gamble nos dejan tranquilos en este contexto. En cambio, si buscamos diversificar apuntar a sectores defensivos, nuestros preferidos son los sectores de consumo básico (XLP) o salud (XLV). Yendo al sector tecnológico, entendemos que Google (GOOGL) es la única compañía de las 7 magníficas que quedó "barata" en relación a su historia y comparables, y no vemos con malos ojos sumar posiciones para los inversores de mas largo plazo", indicó.
En cuanto al posicionamiento, Polo busca posicionarse en sectores más defensivos y/o fuera de EEUU.
"Con un escenario de elevada volatilidad e incertidumbre por el devenir de las relaciones internacionales, presas de las decisiones de Trump y de Xi Jinping, mantenemos nuestro sesgo defensivo en cuanto a los activos recomendados. Apuntando a sectores menos sensibles al ciclo económico, mientras que en renta fija preferimos los créditos más seguros y del tramo corto. En el plano geográfico, mantenemos nuestra mirada constructiva con Europa, que podría ser el árbitro de la guerra comercial entre norteamericanos y chinos", detalló. Bajo este panorama, Álvarez considera oportuno aumentar la exposición en liquidez en las carteras y de buscar acciones fuera de EEUU.
"Hace un tiempo venimos construyendo oposiciones de cash. Hay formas de dejar los dólares en money market con rendimiento alrededor del 4% en dólares, con lo cual creemos que es atractivo para el contexto actual. Por otro lado, recomendamos diversificar respecto a EEUU, con una visión de mediano y largo plazo. Nos gusta Brasil, ya sea a través del ETF o algunos nombres particulares como Nubank", recomendó el CEO de IMSA Alyc.