La CNMC ve "suficientes" los compromisos presentados por BBVA para la opa sobre el Sabadell

El organismo aprueba la operación en 'fase II' con medidas que abarcan desde el mantenimiento de las condiciones en determinados códigos postales a la puesta en marcha de una cuenta para clientes vulnerables.

Abr 30, 2025 - 23:37
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La CNMC ve "suficientes" los compromisos presentados por BBVA para la opa sobre el Sabadell

En La Vela se vive un día grande. La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha aprobado este miércoles después de una reunión frenética la opa de BBVA sobre Banco Sabadell. El plácet de la Sala de Competencia, encabezado por Cani Fernández y otros cuatro miembros, llega tras determinar que los compromisos presentados por BBVA son "adecuados, suficientes y proporcionados para solucionar los problemas que esta concentración supone para la competencia en los mercados afectados".

El regulador ha cerrado filas el último día del abril después de once meses de análisis exhaustivo, que finalizó con el lanzamiento de un test de mercado entre 40 entidades para comprobar si se darían las garantías de los compromisos asumidos por BBVA en caso de que prospere la unión. El objetivo pasaba por mitigar los potenciales problemas de crédito que pudieran darse, así como los riesgos de servicio de pagos, que han sido las áreas en las que ha detectado un mayor riesgo de concentración. Entre los participantes se encuentra Banco Sabadell, al que se le preguntó si las propuestas planteadas por el 'opado' eran suficientes.

En la nota sucinta difundida concluye que la operación supone una "amenaza para la competencia efectiva" en determinados ámbitos de banca minorista y de servicios de pagos. En concreto, ha señalado que la concentración dará lugar a la creación de una entidad líder en varios segmentos, tanto en particulares como en el segmento de pymes y autónomos. Asimismo, ha identificado 96 municipios en los que la suma de ambos bancos daría lugar a una cuota conjunta superior al 50%, con adición mayor al 15%, resultando una situación de duopolio en 48 de estos municipios.

En la misma línea, en 72 códigos postales se daría lugar a monopolio (7) o bien duopolio (65). En lo que respecta al servicio de pagos, la entidad resultante alcanzaría una cuota del 30% a nivel nacional, ante lo que advierte del deterioro de las condiciones comerciales a particulares y autónomos, pero también de problemas en el acceso a los cajeros automáticos, contracción del crédito a pymes y exclusión financiera. En estas circunstancias, considera que la propuesta de BBVA contribuye a abordar todos estos hándicaps.

Entre ellos se encuentra la puesta en marcha de una cuenta para clientes vulnerables; el mantenimiento de las líneas de circulante y el volumen de crédito a pequeñas y medianas empresas que reciban menos del 85% de esta financiación de BBVA y/o Banco Sabadell. En lo que respecta a los acuerdos de Sabadell con la red Euro6000 y Cardtronics, se plantea que en caso de finalizar los mismos, se ofrezca a sus clientes acceso a los cajeros que eran titularidad del grupo catalán en las mismas condiciones previstas en dichos acuerdos. La mayoría de las citadas medidas tendrán una duración de tres años, prorrogables por dos más en el caso del crédito para pymes; y de 18 meses en lo relativo al acceso a los cajeros. Un periodo bajo el que la CNMC se encargará de supervisar que se cumple lo pactado.

La operación fue notificada a la CNMC en mayo de 2024 y fue el pasado 12 de noviembre cuando decidió elevarla de 'fase I' a 'fase II', que requiere un examen más en profundidad, siendo la primera operación bancaria que no sale adelante en esta primera etapa. Desde entonces, el organismo ha estado estudiando los efectos derivados de una eventual fusión y negociando con BBVA los requisitos en un proceso que se ha alargado en el calendario más de lo previsto. Para este tipo de situaciones se contempla alrededor de tres meses, cuyo contador se paraliza cada vez que solicita información.

Superado el filtro de Competencia, el regulador deja ahora en manos del Gobierno el permiso para que la opa se materialice. El Ministerio de Economía dispone de un mes para ratificar la decisión de Competencia o imponer medidas adicionales en base a criterios de interés general diferentes de la competencia como, por ejemplo, seguridad nacional o promoción de la innovación. Fuentes del departamento encabezado por Carlos Cuerpo aseveran que analizarán con "rigor y detalle" la opa una vez reciban el informe, por lo que piden máxima prudencia hasta entonces.

Moncloa ha expresado en reiteradas ocasiones su rechazo inicial a este 'matrimonio' alegando motivos de cohesión territorial. Esto unido a la reticencia que provoca entre los partidos catalanes, una pieza clave para la continuidad de la legislatura, aboca a muchos a pensar que el Ejecutivo se pondrá de parte del Sabadell, máxime tras el retorno de su sede a Cataluña. El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, ha remarcado que "examinarán con rigor" el informe, así como todos los datos y análisis para actuar con coherencia", defendiendo por encima de todo los intereses de esta CCAA, que es donde mayor riesgo de concentración hay. "En Cataluña existe un modelo bancario arraigado en el país, en su tejido empresarial y en sus empresas con un compromiso social", ha agregado.

El Sabadell carga contra la metodología de la CNMC

Desde BBVA celebran el dictamen del organismo y alegan que "preservan la competencia". "Hoy la CNMC ha autorizado la operación entre BBVA y Banco Sabadell, un proyecto de crecimiento que creará un banco más fuerte y con mayor capacidad de financiación a empresas y familias", precisan. El potencial matrimonio dará lugar a la segunda mayor entidad financiera en España por volumen de crédito, solamente por detrás de CaixaBank. "Los compromisos que asumimos favorecen la inclusión financiera, la cohesión territorial y el crédito a pymes y autónomos, y preservan la competencia, especialmente en los territorios en los que tendremos mayor presencia, como Cataluña", ha añadido Torres.

El Sabadell, por su parte, se ha mostrado crítico con la la metodología empleada al considerar que "no es adecuada para analizar la unión de negocios bancarios para pymes y que, por tanto, no permite conocer las consecuencias que esta concentración tiene para esos clientes", indican antes de recordar que serán los accionistas quienes tendrán la última palabra a la hora de decidir si avalan o no la creación de este 'megabanco'.