Esta es la cantidad de carne a consumir a la semana para respetar el planeta... pero cuidado con la carne roja

I han concluido que no debería exceder los 255 gramos a la semana, lo que equivaldría a dos pechugas de pollo

May 1, 2025 - 13:20
 0
Esta es la cantidad de carne a consumir a la semana para respetar el planeta... pero cuidado con la carne roja

Investigadores de la Universidad Técnica de Dinamarca (DTU) han calculado la cantidad de carne que se debería comer a la semana para realizar un consumo sostenible que no dañe el planeta y han concluido que no debería exceder los 255 gramos a la semana, lo que equivaldría a dos pechugas de pollo.

No obstante, esto se aplicaría únicamente a las aves de corral y el cerdo, mientras que en cuanto a la carne carne roja, como la ternera o el cordero, concluyen que incluso cantidades moderadas superan los límites planetarios establecidos para la regeneración de recursos, debido a su elevado impacto ambiental en términos de emisiones, uso de agua y suelo.

Caroline H. Gebara, postdoctoranda en DTU Sustain y autora principal del estudio, explica que sus cálculos "muestran que incluso cantidades moderadas de carne roja en la dieta son incompatibles con lo que el planeta puede regenerar de recursos según los factores ambientales que analizamos en el estudio. Sin embargo, hay muchas otras dietas -incluso con carne- que son saludables y sostenibles", apostilla.

El primer objetivo de los investigadores en su estudio, publicado en la revista 'Nature Food', era averiguar si es posible satisfacer las necesidades nutricionales de toda la población mundial sin sobrepasar los límites planetarios y, según sus cálculos, es posible. Pero requerirá un cambio en nuestro consumo de alimentos tanto a nivel global como individual, advierte Caroline H. Gebara.

"El cambio individual es más sencillo"

"El cambio global requiere una acción política al más alto nivel, mientras que el cambio individual será mucho más fácil si disponemos de mejores orientaciones y marcos de trabajo que nos permitan reducir el consumo de alimentos", explica.

El siguiente objetivo de la investigación era, por tanto, llegar a cifras concretas sobre la cantidad de distintos alimentos que se puede comer sin consumir más recursos de la Tierra de los que ésta puede regenerar, dice Caroline H. Gebara.

"La mayoría de la gente se da cuenta ahora de que deberíamos comer menos carne por razones tanto medioambientales como de salud pero es difícil relacionar cuánto es 'menos' y si realmente supone una diferencia en el panorama general --continúa--. Por eso, basándonos en los límites planetarios, hemos calculado una cifra concreta, 255 gramos de carne de ave o cerdo a la semana, que se puede visualizar y tener en cuenta cuando se está en el supermercado", explica.

Los cálculos del equipo de investigación tienen en cuenta una serie de factores medioambientales como las emisiones de CO2, el consumo de agua y el uso de la tierra, así como el impacto sobre la salud de una dieta concreta. En total, han examinado más de 100.000 variaciones de 11 tipos de dietas y han calculado sus respectivos efectos sobre el medio ambiente y la salud y los cálculos muestran claramente que una dieta incluso con cantidades moderadas de carne roja supera los límites planetarios.

En cambio, una dieta pescetariana, vegetariana o vegana probablemente se mantenga dentro de los límites de lo que el planeta puede soportar. Pero esto también depende en gran medida de los productos específicos incluidos en las dietas. Además, distintas combinaciones de dietas, como la vegetariana pero con lácteos o huevos, también pueden ser sostenibles.

Y eso es exactamente lo que Caroline H. Gebara espera que el estudio ayude a más gente a darse cuenta: que una dieta sostenible puede adoptar muchas formas diferentes.

"Por ejemplo, nuestros cálculos muestran que es posible comer queso si eso es importante para ti, y al mismo tiempo llevar una dieta sana y respetuosa con el clima --apunta--. Lo mismo ocurre con los huevos, el pescado y la carne blanca, pero la premisa es, por supuesto, que el resto de la dieta sea relativamente sana y sostenible. Pero no tiene por qué ser una cosa o la otra", precisa.