Así es la infanta Sofía, que cumple 18 años: toca el violín, adora los perros, prefiere las ciencias y su mejor amiga es su hermana

Aunque ha recibido la misma educación que la princesa de Asturias, Sofía disfrutará de más libertad para elegir su camino

Abr 29, 2025 - 13:45
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Así es la infanta Sofía, que cumple 18 años: toca el violín, adora los perros, prefiere las ciencias y su mejor amiga es su hermana

Cuentan, quienes la han tratado en la proximidad, que se parece en el carácter fuerte y espontáneo a su madre. Es amable y divertida en las distancias cortas, como su padre, y tremendamente educada, al igual que su hermana. Sofía de Borbón Ortiz cumple 18 años y aunque es imposible conocer de forma milimétrica sus gustos y debilidades, el hecho de pertenecer a la primera familia del país en cuestiones de protocolo y exposición pública ha permitido a la sociedad tener un retrato más o menos certero de quién es la hija pequeña de los reyes de España.

Hasta este 29 de abril, día del nacimiento de Sofía hace 18 años en la clínica Ruber de Madrid, todo ha sido similar en su evolución personal y académica a la de su hermana, la princesa de Asturias y heredera, Leonor. Con algún pequeño matiz, eso sí.

Por ejemplo, cuando se anunció el embarazo de la entonces princesa Letizia, rápidamente se comunicó desde palacio que sería una niña, lo que no pasó con su hermana Leonor, un año y medio mayor, por una cuestión en el orden sucesorio y constitucional. Sea como fuere, que el anunciado bebé fuera otra niña no afectaba ya a quién heredaría el trono de Felipe VI.

La hija pequeña de los reyes vino al mundo en la misma clínica que su hermana y también por cesárea. En este caso, la llegada de la niña fue un alivio y revulsivo en el ánimo entristecido de Letizia, que dos meses antes había perdido a su hermana pequeña.

La hija menor de los reyes acudió hasta los dos años a la guardería de palacio, donde también acuden hijos del personal. Rubísima y observadora, pasó allí el tiempo necesario antes de ir al colegio Santa María de los Rosales, donde ya estaba escolarizada su hermana y estudió su padre de niño.

Amistad con otros padres de alumnos del colegio

Su paso por el colegio Santa María de los Rosales fue una plácida etapa, muy similar a la de otros niños de su edad. Incluso sus padres, los reyes, entablaron amistad con otros progenitores, como una familia normal que hacía cosas normales, como viajar en grupo y quedar para comer o merendar.

En este centro privado y cercano a su domicilio de la Zarzuela ha estado Sofía, hasta que hace dos cursos iniciara el bachiller internacional en el internado AWC de Gales, como antes hizo Leonor. Esta prestigiosa escuela internacional cuesta en torno a los 80.000 euros al año y basa sus enseñanzas en el debate, el crecimiento personal y la implicación con la naturaleza y el entorno social.

Apasionada de la ciencia ficción

Sofía y Leonor han tenido, pues, idéntica formación, dependiendo, eso sí, de los gustos personales de cada una. Por ejemplo, a Sofía le gusta más el deporte que el ballet (que le encanta a Leonor), en particular el fútbol, al menos como espectadora. También se le ha dado bien el teatro como asignatura complementaria.

A Sofía le entusiasma, igual que a su padre, el cine. Se inclina por la ciencia ficción, de la que ha visto los títulos más conocidos, como La guerra de las galaxias y Dune, dos de sus preferidas. Con este nombre, Dune, se presentó a las pruebas de acceso al AWC, que son anónimas.

Tocó en conciertos escolares

Sofía ha sido, asimismo, instruida en la música clásica, en concreto toca con soltura el violín. Incluso, ha participado en varios conciertos organizados en el colegio cuando era más pequeña. Entre sus ídolos está el violinista libanés Ara Malikian, al que ha escuchado en diversas ocasiones, la última en el décimo aniversario de Felipe VI como rey.

Habla, además del castellano, los mismos idiomas que Leonor, esto es: inglés, francés, mandarín, chino, árabe, catalán y gallego. Y aunque ha valorado ingresar al terminar su formación elemental en el Ejército de Tierra y recibir un curso de pilotaje de helicópteros, finalmente y de manera libre, ha optado por pasar directamente al ámbito universitario. Es decir, comenzará una carrera tres años de que lo haga su hermana, que sigue instrucción militar desde hace dos y la terminará el curso que viene en la Academia del Aire de San Javier.

De Harry Styles a Rosalía

En cuanto a otras preferencias personales, Sofía adora la música moderna, en concreto, se apasiona por el británico Harry Styles, al que ha oído en directo en varias ocasiones con su hermana. Le gustan igualmente Rosalía y el reguetonero puertorriqueño Ozuna. Deportista nata, sabe esquiar, afición aprendida de su padre. Asimismo, práctica vela, tenis y pádel. Y realiza escalada, como su madre.

Aunque su verdadera locura son los animales. Tiene una mascota, su perra Jan, que conocimos cuando se despidió de ella rumbo a Gales y la acariciaba a las puertas de palacio, con las maletas en el coche listas para la partida.

En lo físico, es una mezcla de su padre y de su madre. Al nacer midió 50 centímetros, tres más que su hermana. Es muy alta, mide más de 1,80, rasgo claramente heredado del rey y es la infanta con más estatura de la familia, seguida por su tía Cristina. La llamaron Sofía por su abuela paterna, la reina emérita, y tuvo de madrina en el bautizo a su abuela materna, Paloma Rocasolano.

Estrechamente unida a su abuela Paloma Rocasolano

Con esta última, la relación que Sofía mantiene es estrechísima y tremendamente afectuosa. Paloma Rocasolano ha permanecido durante muchos momentos y viajes de los reyes con sus nietas, por lo que ha convivido con ellas de manera frecuente y familiar. Su complicidad es absoluta, como se ha visto en los premios Princesa de Asturas.

De ojos marrones (ni verdes ni azules, como los de sus padres), al nacer ya mostró su energía. "Es más despierta que Leonor, -contó su madre-. Tiene más apetito y se porta algo peor" que su hermana, bromeó Letizia.

Dicharachera, bromista y muy simpática, pues, siempre ha sido buena estudiante y gran amiga de sus amigos. Aunque por encima de todos, su mejor confidente y cómplice es Leonor. Hasta que la distancia física las ha separado, las dos hermanas han ido siempre juntas a actos, viajes, premios... cogidas de la mano o del brazo. Es palpable que Sofía admira poderosamente a su hermana, quien un día será reina y a cuyo lado trabajará, aun cuando su vida goce de más libertad de acción y de elección.

Estudiará Relaciones Internacionales fuera

Por ello, y a falta de que la casa real lo confirme, Sofía, aunque le encantan las materias de ciencias, previsiblemente se incline por una carrera vinculada a las Relaciones Internacionales que le permita trabajar para la institución en un futuro, cerca de Leonor. Y que lo haga en una universidad extranjera, dado que ya ha aplicado a algunas, por ejemplo en Washington, donde se formó su padre también durante un año cursando un Máster de esa materia.

A su cumpleaños este martes 29 en Gales no irá nadie de su familia. Los reyes han suspendido su viaje Jaén, para celebrar el 1.200 aniversario de su capitalidad por la crisis del apagón eléctrico que dejó España a oscuras todo el lunes 28; y su hermana sigue de travesía en el buque Elcano. Tampoco parece viable que alguna de sus abuelas, o las dos, viajen solas al Reino Unido para felicitar personalmente a la joven, a la que no le faltarán compañeros de pupitre para festejar su mayoría de edad.

Al igual que sucedió con Leonor, su graduación está prevista para finales de mayo. El rey tiene un viaje oficial a Hispanoamérica para la toma de posesión del presidente de Ecuador, Daniel Noboa y parece coincidente. Tampoco Leonor podrá ir, puesto que no habrá desembarcado del Elcano todavía. Es más que previsible que sí acuda la reina Letizia para no dejar sola a su hija en el día en que empieza un nuevo futuro para ella.

No usa joyas ni accesorios

Sofía, que luce una larguísima y lacia melena, no es amiga de las joyas ni de los accesorios. Suele elegir ropa sobria, que repite cuando es necesario (incluso ha alquilado alguna vez un vestido para actos de envergadura), y nunca usa calzado alto, para no añadir centímetros a su más que notable estatura. Apenas se maquilla, solo utiliza labiales.

De momento, ya ha presidido sola la entrega de premios Concurso de Fotografía Infanta Sofía, en diciembre pasado, por encargo de su padre, para lo que estrenó un traje blanco, una señal de su bautismo en la escena pública en solitario. Aunque no pronunció ningún discurso, sí mostró aplomo y seguridad. Antes había leído con su hermana el Quijote, en 2022, en la lectura continuada de este texto con motivo del Día del Libro.

Lo que no habrá, al menos de momento, es una gran fiesta familiar donde se pueda ver a todos los primos Borbón, una escena inédita por imposible, al menos de cara a la gente. Así como Irene Urdangarin y Victoria Federica son grandes amigas (ambas se siguen en las redes y hay fotos de ellas de ocio juntas), no consta que las hijas de los reyes se vean con el resto de primos fuera de contadas celebraciones familiares (incluyendo las Navidades, de las que nunca hay imágenes).

Se sabe que la infanta Sofía sigue redes sociales ajenas, como TikTok, así lo ha contado en alguna comida oficial, pero no parece que ella las utilice. Este martes, con casi toda probabilidad, esas redes se llenan de mensajes de felicitación y comentarios sobre su mayoría de edad. Un hecho, no por discreto, poco relevante.